Vecinos de La Granada increpan a Tura y le piden ayuda en un conflicto
Un hombre, con 70 causas pendientes, tiene atemorizado al pueblo
Unos 200 vecinos del municipio de La Granada (Alt Pened¨¨s) increparon ayer a la consejera de Justicia de la Generalitat, Montserrat Tura, durante una visita de ¨¦sta a los nuevos juzgados de la poblaci¨®n. Los vecinos, que tuvieron que ser contenidos por agentes de la Guardia Civil y la Polic¨ªa Local, pidieron a Tura que les ayude en el conflicto vecinal que mantienen con una familia conflictiva de la localidad.
A la salida de los nuevos juzgados, la consejera se acerc¨® a los manifestantes, entre los que estaba Joan Cols, alcalde convergente de La Granada, para hablar de un problema que el pueblo arrastra desde hace tres a?os. La titular de Justicia, que conoc¨ªa el caso, se mostr¨® confiada en que la justicia act¨²e a partir de ahora m¨¢s r¨¢pidamente para solucionar el problema.
La acci¨®n de ayer es una m¨¢s de las que desde el Ayuntamiento se han iniciado en las ¨²ltimas semanas para que diferentes administraciones les ayuden a resolver el conflicto. Consistorio y vecinos se han movilizado para poner fin a la actitud provocadora e inc¨ªvica de una familia que vive en esta localidad desde hace siete a?os.
70 casos en el juzgado
El cabeza de familia, Licerio R., de 32 a?os, tiene abiertos en diferentes juzgados hasta 70 casos pendientes de sentencia, seg¨²n el alcalde Joan Cols. Por eso, las demandas del consistorio se centran en lograr m¨¢s presencia policial en el municipio y que se agilicen los casos judiciales pendientes que acumula Licerio R.Otra de las acciones promovidas por el Ayuntamiento ha sido una recogida de firmas para pedir la colaboraci¨®n de la Delegaci¨®n del Gobierno, del Departamento de Justicia y del Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a. La iniciativa recogi¨® 1.300 firmas en una semana, sobre un censo de poblaci¨®n de 1.900 personas. Para el alcalde, "la gente tiene miedo que acabe pasando algo grave".La problem¨¢tica familia est¨¢ integrada por Licerio R., su mujer y sus cuatro hijos, de los que el mayor tiene 11 a?os. Entre las causas m¨¢s graves de Licerio R. est¨¢ su participaci¨®n hace seis a?os en el atraco de un restaurante, en el que dej¨® ciego a un guardia civil tras un tiroteo. Cols dice que los vecinos est¨¢n hartos de la actitud amenazante de ¨¦l y su familia. Insultos, amenazas, destrozos en el mobiliario urbano, peque?os hurtos y cristales y retrovisores rotos son algunos ejemplos que explican los vecinos para denunciar la situaci¨®n.
Pero la gota que colm¨® el vaso lleg¨® hace 15 d¨ªas, durante la celebraci¨®n de la fiesta mayor. Licerio R. estuvo durante un rato circulando en moto y haciendo r¨¢pidas aceleraciones por una calle en la que se bailaban sardanas, jugando a esquivar a los asistentes. M¨¢s tarde lleg¨® la polic¨ªa y se encerr¨® en casa, pero sal¨ªa al balc¨®n de vez en cuando para tirar botellas e insultar a los que pasaban por delante de su casa. Al final, la Guardia Civil lo acab¨® deteniendo por en¨¦sima vez por desacato a la autoridad, pero unas horas m¨¢s tarde qued¨® en libertad. Este incidente es el que origin¨® que el Ayuntamiento reaccionara con la celebraci¨®n urgente de un pleno extraordinario.
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