"Las mallas se estrechan"

M¨¢s de diez positivos por dopaje de deportistas de alto nivel se han dado a conocer en julio. Cuatro de ellos correspond¨ªan a ciclistas del Tour de Francia. Mientras los asuntos de dopaje pusieron a la carrera al borde de la cat¨¢strofe, las agencias de noticias no dejaban, al mismo tiempo, de vomitar informaciones sobre controles positivos de deportistas que no eran precisamente ciclistas, sino, en su mayor¨ªa, atletas. Pero el atletismo, pese a la persistencia de casos de dopaje al m¨¢ximo nivel -Gatlin, Jones, Montgomery...- en los ¨²ltimos a?os, no ha ca¨ªdo a¨²n en los abismos del psicoan¨¢lisis y las sesiones cat¨¢rticas del ciclismo.

No hay coincidencia ni casualidad posibles. Ambos deportes, ciclismo y atletismo, son los que han desarrollado a lo largo de los a?os las estrategias m¨¢s sofisticadas para descubrir a los tramposos. Pagan por ello el precio de la falta de credibilidad, un asunto que tanto en el mundillo del ciclismo como en el del atletismo se considera una "consecuencia inevitable". "En todo caso, el aumento de n¨²meros de casos positivos demuestra no tanto que ha aumentado el recurso al dopaje, sino que trabajamos mucho mejor", dice Juan Manuel Alonso, presidente de la comisi¨®n m¨¦dica de la federaci¨®n internacional de atletismo (IAAF); "dicho de otra manera, sabemos m¨¢s porque buscamos m¨¢s".

Pongamos el caso de Iban Mayo. El ciclista vizca¨ªno ha resultado positivo por EPO, se le ha cazado -argot de las autoridades antidopaje, que consideran su trabajo una lucha de inteligencias, como la caza, entre el cazador y su presa-, porque los inspectores han estado tras su pista desde hace meses. La Uni¨®n Ciclista Internacional (UCI) se lo hab¨ªa advertido por escrito varias veces: "Acabaremos caz¨¢ndote". Las pistas, seg¨²n la UCI, eran claras: las variaciones de su perfil hematol¨®gico -fluctuaci¨®n de su hematocrito, hemoglobina y reticulocitos- indicaban el recurso a la eritropoietina. Que cayera era cuesti¨®n de tiempo y de paciencia. Mario Zorzoli, el cerebro de la lucha antidopaje en la UCI, ilustra esta perseverancia con el caso del lituano Raimondas Rumsas. Su perfil hematol¨®gico era claramente irregular y alcanz¨® cotas exageradas en el Tour de 2002 -su esposa fue detenida con el coche lleno de productos prohibidos-, pero siempre se escapaba entre las mallas de la red. Hasta el Giro de Italia de 2003, en el que un an¨¢lisis de orina confirm¨® un positivo por EPO.

"Las mallas de la red, en efecto, se han estrechado", dice Alonso; "hemos creado una secci¨®n de inteligencia, espionaje, en la que los expertos cruzan datos, perfiles esteroideos y hematol¨®gicos, para afinar el grupo de sospechosos. Adem¨¢s, todos aqu¨¦llos que no cumplen perfectamente con la obligaci¨®n de informarnos de su paradero para los controles fuera de competici¨®n pasan directamente al grupo de controlables, igual que los deportistas Guadiana, que viniendo de ninguna parte hacen un marc¨®n o ganan una medalla y luego desaparecen. Y, adem¨¢s, los laboratorios ya empiezan a efectuar de oficio IRMS para detectar testosterona sint¨¦tica, procedimiento que antes apenas aplicaban. Sabemos mejor a qui¨¦n controlar, qu¨¦ buscar y c¨®mo encontrarlo".

Tambi¨¦n saben que, a efectos publicitarios y de gratificaci¨®n, m¨¢s vale cazar a una gran figura que a 100 desconocidos. As¨ª, este verano se han anunciado las ca¨ªdas de Tatyana Lysenko, plusmarquista mundial de martillo, por un control sorpresa del 9 de mayo (antiestr¨®genos para bloquear las hormonas femeninas y potenciar las masculinas), y de las b¨²lgaras Vania Stombolova (sorprendente y sospechos¨ªsima campeona de Europa de 400 en Gotemburgo) y Venelina Veneva, plata en salto de altura en los Europeos en pista cubierta en Birmingham (lo que podr¨ªa dar medalla a la espa?ola Beitia, cuarta), controladas por sorpresa el 24 de enero en Budapest y en cuya orina hab¨ªa testosterona.

Tambi¨¦n se ha cazado al franc¨¦s Florent Lacasse, testosterona, especialista en 800 metros, en un caso que ha llevado los focos de nuevo al medio fondo de ese pa¨ªs, con media docena de casos este a?o y las denuncias de un ex atleta, sancionado tres a?os y metido a camello, contra varios grandes nombres que ser¨ªan sus clientes.