Los purasangre m¨¢s deseados
MOTORHay fabricantes de coches que producen alg¨²n superdeportivo tan r¨¢pido y potente como los Ferrari, pero ninguno limita su oferta a purasangre tan especiales y carism¨¢ticos como los de la marca italiana.
Quiz¨¢s por eso, o porque hasta hace poco Ferrari no mostraba inter¨¦s en que la prensa condujera sus modelos, cuando son¨® el tel¨¦fono y escuch¨¦ una voz que preguntaba si estaba interesado en probar la gama al completo, mi primera reacci¨®n fue de incredulidad: ser¨¢ una broma de alg¨²n gracioso. Pero no, en pocos minutos recib¨ªa la invitaci¨®n que me llevar¨ªa a M¨®dena, al circuito de Fiorano, a cumplir el sue?o, casi siempre irrealizable, de muchos aficionados al motor: conducir los coches m¨¢s carism¨¢ticos del mundo.
Ferrari concentra su oferta en s¨®lo tres modelos, que compiten por un mercado al alza de 40.000 unidades anuales en todo el mundo. La gama se divide en dos grupos, sportcar o superdeportivos, como los F430 y 599 GTB, y GT o Gran Turismo, como el 612.
El modelo de acceso es el 430, un biplaza deportivo con motor central trasero de ocho cilindros disponible tambi¨¦n en versi¨®n Spider o cabrio. Por encima est¨¢ el 599 Fiorano,
m¨¢xima expresi¨®n de la producci¨®n en serie de Ferrari, otro purasangre biplaza, pero con motor delantero de 12 cilindros. Y la gama culmina con el 612 Scaglieti, la berlineta 2+2 plazas con motor V12 delantero.
La oferta se completa con series especiales de estos modelos y con los supercars de tirada limitada, que salen en ocasiones especiales, como los F40 (1987), F50 (1995) y Enzo (2002). El pr¨®ximo est¨¢ previsto para 2010.
Ferrari 430
Los d¨®ciles 490 CV
M¨¢xima eficacia, equilibrio impecable y conducci¨®n f¨¢cil y segura. Es la propuesta del 430, el Ferrari m¨¢s peque?o y deportivo. Lo anuncian su tama?o compacto y una distancia corta entre ejes que favorecen la agilidad. Y lo confirma al conducirlo, porque este purasangre atl¨¦tico de implacable poder¨ªo tiene un car¨¢cter tan d¨®cil que hace sentirse compenetrado enseguida.
El dise?o del 430 es obra de Pininfarina e impacta por las enormes tomas de aire del frontal, que, junto al morro largo y la zaga muy corta, definen una l¨ªnea afilada e imponente. Mantiene la deportividad por dentro -volante, pedales y asientos- y se adapta como un guante al conductor para asegurar su disfrute. Y la mec¨¢nica invita a hacerlo: motor 4.3 V8 de 490 CV, cambio F1 de seis marchas en el volante (opcional), chasis y suspensiones de aluminio, diferencial electr¨®nico... Pesa s¨®lo 1.350 kilos, lo que, aparte de ofrecer una agilidad imbatible, supone una relaci¨®n peso-potencia que dispara sus prestaciones: cuatro segundos de 0 a 100 km/h. y 315 km/h. Pero al margen de sus fulgurantes aceleraciones, cambios instant¨¢neos (tarda 1,5 d¨¦cimas) y frenadas de infarto, impresiona por su facilidad de conducci¨®n: es tan ¨¢gil y vivo como un GTI, y tan r¨¢pido y eficaz como un buen coche de carreras. Entra en las curvas con un leve toque de volante, se agarra como una lapa y las enlaza como las motos. Y hace tan f¨¢cil lo dif¨ªcil que parece que se lleva conduciendo toda la vida.
Ferrari 599 GTB Fiorano
Desaf¨ªo permanente
Naci¨® con el reto de superar en prestaciones al 430 y cuesta expresar con palabras el resultado. El 599 supone un desaf¨ªo constante para su conductor, en especial en un circuito seguro como el de Fiorano.
El motor V12 de 620 CV y el cambio F1 accionable en el volante forman un c¨®ctel explosivo que impresiona por su poder¨ªo. Y basta pulsar el bot¨®n de arranque para confirmar que va en serio. Su bramido sinf¨®nico desata reacciones contradictorias, y al mismo tiempo que pone la piel de gallina, provoca un cosquilleo en el est¨®mago, mezcla de emoci¨®n y temor, que parece anunciar al cerebro la descarga de adrenalina que viene. Y llega al instante, en cuanto se acelera y el cambio F1 empieza a subir marchas (tarda una d¨¦cima de segundo) mientras la espalda se empotra en el respaldo y el 599 parece encabritarse como caballo desbocado. Las cuatro primeras marchas pasan en un suspiro, llega a 100 km/h. en 3,7 segundos, pero sus brutales aceleraciones provocan que todo suceda muy deprisa y apenas queda tiempo para pensar. En cada cambio parece que se va a escapar de las manos, las curvas se acercan a ritmo de v¨¦rtigo y es como si se viajara sentado en un cohete que desborda al piloto. Afortunadamente, sus implacables frenos paran mucho antes de lo esperado y devuelven la serenidad con contundencia. Y aunque su largo morro no otorga la agilidad del 430 en zonas viradas, obedece con docilidad y confirma su eficacia extrema en curva con velocidades de paso espeluznantes. Es su forma de retar al conductor a buscar unos l¨ªmites s¨®lo al alcance de profesionales. ?Y siempre en un circuito!
Ferrari 612 Scaglieti
Cuatro plazas con carisma
Las sensaciones que transmite el 612 cambian mucho si se conduce antes o despu¨¦s que los anteriores. Y es que si se prueba primero, este imponente gran turismo con motor 5.7 V12 de 540 CV parece un ob¨²s que propulsa a sus cuatro ocupantes a otra dimensi¨®n: alcanza 100 km/h. en 4,2 segundos y llega a 320 km/h. Pero si se saborea despu¨¦s de los rabiosos Ferrari 430 o 599, impresiona menos, porque pesa 1.740 kilos y su relaci¨®n peso-potencia no es tan favorable. Las prestaciones imponen, pero no se dispara con el mismo poder¨ªo y rapidez que ellos en las marchas largas. Y aunque es ¨¢gil y tiene una conducci¨®n f¨¢cil y una estabilidad excelente, acusa m¨¢s las inercias y no muestra reacciones tan vivas. En cambio, el Scaglieti est¨¢ en un escal¨®n superior a las berlinas m¨¢s deportivas (BMW M5, Audi RS4...) y es m¨¢s largo (4,9 metros), alto y voluminoso que los dem¨¢s Ferrari. Su l¨ªnea exquisita y poderosa impresiona por la clase y elegancia que transmite, y mantiene todo el carisma de la marca.
Sin embargo, la gran aportaci¨®n de este cup¨¦ de cuatro plazas, el Ferrari m¨¢s serio y pr¨¢ctico, es que hace compatible el confort, e incluso el uso familiar, con los valores radicales de los superdeportivos. As¨ª, ofrece un interior m¨¢s amplio, exquisito y refinado que sus hermanos y permite alojar a cuatro adultos y el equipaje del fin de semana (240 litros) en un envoltorio inimitable. El Scaglieti es un purasangre, pero de talante tranquilo y esp¨ªritu se?orial.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.