"El alumno que nos elige sabe qu¨¦ parte vamos a tomar"
La Federaci¨®n Espa?ola de Religiosos de la Ense?anza (FERE), mayoritaria en la educaci¨®n concertada, ha sido duramente atacada por los sectores que promocionan el boicoteo a la nueva asignatura de Ciudadan¨ªa, incluidos algunos obispos, por decir que en sus centros no es necesario "objetar" porque ense?ar¨¢n la materia de acuerdo al ideario cat¨®lico. El salesiano Manuel de Castro (Salamanca, 1947), secretario general de la FERE, asegura que est¨¢n con la Iglesia en su rechazo a la asignatura.
Pregunta ?Qu¨¦ hay en los contenidos m¨ªnimos del Ministerio que haya que adaptar al car¨¢cter propio de los centros cat¨®licos?
Respuesta. Fundamentalmente, el tema de la vida y la familia. Aunque la versi¨®n que muchos libros de texto han hecho se adec¨²a ya al car¨¢cter propio, pero hay otros inaceptables. En la negociaci¨®n que tuvimos con Educaci¨®n insistimos mucho en retirar este tipo de cosas que al final van a tener visiones distintas.
"La Administraci¨®n debe unificar los valores que se van a transmitir en la escuela"
P. Entonces, sus pegas se refieren m¨¢s al desarrollo que a los contenidos del Gobierno.
R. S¨ª, donde se est¨¢ viendo mayor discrepancia es en los desarrollos que algunos libros est¨¢n haciendo de esos contenidos.
P. Pero en los contenidos m¨ªnimos, ?qu¨¦ es lo que ser¨ªa inaceptable para ustedes?
R. Se ha hablado de la filosof¨ªa del g¨¦nero que puede haber, pero creo que se puede f¨¢cilmente orientar.
P. Entonces, lo que les preocupa es una posible aplicaci¨®n de esos contenidos.
R. Efectivamente, ah¨ª est¨¢ el germen de lo que podr¨ªa llegar a ser. Lo que est¨¢ claro es que este curr¨ªculo es muy abierto, de manera que se pueden generar, respet¨¢ndolo, libros con pensamiento contrario, siempre en estos temas referidos a la vida y familia. Esa flexibilidad nos permite a la escuela cat¨®lica tener nuestra propia visi¨®n de estos temas, pero un alumno que va a una escuela p¨²blica se puede encontrar con dos panoramas.
P. ?Pero lo ideal en esos temas no ser¨ªa presentarle ambas posturas en lugar de decantarse por una?
R. Lo ideal en un centro p¨²blico ser¨ªa eso. Pero no es as¨ª, de la misma forma que hay libros que se inclinan por un lado o por otro.
P. En sus escuelas, sostenidas con fondos p¨²blicos, tambi¨¦n hay alumnos que no son cat¨®licos.
R. El padre no creyente sabe que a su hijo le vamos a transmitir una formaci¨®n cat¨®lica. Si no lo acepta, pues que no venga. En nuestros centros todos los profesores van a tomar parte, la diferencia es que el alumno que elige nuestros centros sabe qu¨¦ parte vamos a tomar.
P. En los puntos conflictivos, ?no hay tambi¨¦n muchos cat¨®licos que no est¨¢n de acuerdo con la posici¨®n oficial de la Iglesia?
R. S¨ª, bueno, muchos..., habr¨ªa que matizar. Pero nosotros, obviamente, nos vamos a atener al Magisterio oficial de la Iglesia.
P. En la adaptaci¨®n de sus centros, ?se mencionar¨¢ la homosexualidad?
R. S¨ª, a los chavales de hoy no se les puede ocultar nada.
Donde hay que poner el acento es en educar en el sentido cr¨ªtico, de manera que las personas sean capaces de asumir unos valores, justificarlos y, entre comillas, defenderlos.
P. ?Debe la escuela formar en valores
R. S¨ª, pero en consonancia con la familia.
P. ?Y cu¨¢l es el papel de la Administraci¨®n?
R. Tiene responsabilidad en unificar los valores que se van a transmitir.
P. La Conferencia Episcopal no le reconoce al Estado esa capacidad de formar en valores.
R. Exactamente, lo que no puede hacer el Estado es hacer una ¨¦tica propia.
P. ?Se ven en los contenidos m¨ªnimos esa ¨¦tica propia?
R. Seg¨²n los documentos de la Conferencia Episcopal, hay algunas opciones en el curr¨ªculo que la marcan un poco. Es mejor no hablar de determinadas cuestiones hasta que la sociedad no alcance un acuerdo.
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