Imaz arroja la toalla y deja al PNV sin su referente m¨¢s firme ante ETA

Josu Jon Imaz, presidente del PNV y principal puente de di¨¢logo con el Gobierno central para la lucha contra ETA y el futuro de Euskadi, anunci¨® ayer por sorpresa que abandona la pol¨ªtica y renuncia a seguir dirigiendo el partido. Su decisi¨®n sembr¨® ayer el desconcierto en el seno del nacionalismo y llev¨® la preocupaci¨®n al Gobierno y a los principales partidos pol¨ªticos. La marcha de Imaz (Zumarraga, 1963), comunicada a trav¨¦s de un art¨ªculo remitido a los medios de comunicaci¨®n, abre un horizonte de incertidumbres en la pol¨ªtica vasca y espa?ola.

El anuncio se produce dos d¨ªas despu¨¦s de pactarse la ponencia pol¨ªtica que admite una consulta no consensuada

La renuncia abre la puerta a la retirada de Egibar de la lucha por la presidencia en la asamblea general de diciembre

El presidente del PNV renuncia a la reelecci¨®n y dejar¨¢ la pol¨ªtica en diciembre tras 13 a?os de dedicaci¨®n

El dirigente peneuvista ha sido un referente de firmeza democr¨¢tica frente a las pretensiones del mundo de ETA y un leal colaborador del Gobierno en el frustrado proceso de di¨¢logo para el fin de la violencia terrorista. Imaz ha encarnado el discurso m¨¢s integrador de su partido, empe?ado en conseguir un marco de relaci¨®n de Euskadi con Espa?a aceptable tanto por los nacionalistas como por los no nacionalistas.

El l¨ªder nacionalista ha anunciado su renuncia s¨®lo dos d¨ªas despu¨¦s de que se anunciase un acuerdo sobre la estrategia pol¨ªtica a seguir entre los dos sectores que pugnaban para dirigir el PNV. Despu¨¦s de ese pacto, no ha tardado ni 48 horas en anunciar su marcha. La raz¨®n profunda, que el propio Imaz reconoce, es que ha visto cuestionado su liderazgo y tambi¨¦n las posibilidades de modernizaci¨®n y actualizaci¨®n del pensamiento y el proyecto nacionalista que ha intentado impulsar, con el objetivo de adaptar a los nuevos tiempos conceptos como soberan¨ªa o independencia.

Imaz acudi¨® ayer por la ma?ana a su despacho pero, despu¨¦s de enviar su art¨ªculo a los peri¨®dicos a primera hora de la tarde, permaneci¨® ilocalizable. El PNV se cerr¨® a cal y canto. Sus servicios de prensa se limitaron a se?alar que el partido no har¨ªa "ninguna valoraci¨®n sobre las reflexiones del presidente de la ejecutiva".

Falto de apoyos suficientes para conducir a su partido por el camino de la moderaci¨®n que ha predicado y practicado, Imaz decidi¨® arrojar la toalla, con una reflexi¨®n por escrito en la que deja sentados los principios que le mueven y los que echa en falta en el PNV.

El l¨ªder nacionalista hab¨ªa comprobado en las ¨²ltimas semanas c¨®mo dirigentes cualificados de su partido traspasaban los l¨ªmites que el propio Imaz se hab¨ªa fijado en julio, cuando sali¨® a campo abierto para exponer los principios por los que estaba dispuesto a trabajar y para explicar para qu¨¦ cosas su partido no pod¨ªa contar con ¨¦l. Imaz se mostr¨® entonces contrario a celebrar una consulta popular sobre el futuro de Euskadi sin consenso previo entre nacionalistas y no nacionalistas, una propuesta que finalmente se ha abierto paso en la ponencia consensuada.

Con su retirada de la batalla interna por el control del partido, Imaz intenta mostrar tambi¨¦n el camino que debe seguir Joseba Egibar, su contrincante de hoy en el PNV y que tambi¨¦n lo fue hace cuatro a?os tras la marcha de Arzalluz. "El esfuerzo por conseguir la uni¨®n en el seno del PNV nos obliga a todos", indic¨® ayer. A la vez, intenta abrir el paso al presidente de la poderosa organizaci¨®n vizca¨ªna del partido y portavoz de su ejecutiva, I?igo Urkullu, en quien todos ven al sucesor.

Sin embargo, otros dirigentes nacionalistas consideran improbable que Egibar acepte ahora como elemento de unidad a Urkullu, ya que fue clave hace cuatro a?os para el triunfo de Imaz. Pocos saben a¨²n cu¨¢les son los t¨¦rminos del pacto que necesariamente deben de haber alcanzado ambos, y los dos con el lehendakari Ibarretxe, pero los mejores conocedores del PNV sostienen que "los mismos que le auparon en 2004 [a Imaz] le han dejado ahora caer". "Le han quemado para nada", afirman. Urkullu ha sido el protagonista del acuerdo con Egibar en el documento de consenso pactado el lunes, en el que Imaz ha debido ver contenidos que traspasan los l¨ªmites que ¨¦l mismo se fij¨® en p¨²blico. Los rumores sobre su marcha exist¨ªan desde el 31 de julio, cuando en el acto del 112? aniversario de la fundaci¨®n del PNV se?al¨®: "Las personas no deben ni debemos ser obst¨¢culo para el logro de posiciones integradoras en el partido".

Imaz afirm¨® ayer que ha puesto por delante de su posici¨®n personal el proyecto, es decir, el partido, en riesgo cada vez m¨¢s serio de divisi¨®n, con dos discursos claramente contrapuestos y evidentes tensiones ante el proceso asambleario iniciado. Los malos resultados electorales encendieron las alarmas sobre las consecuencias de esa escalada, por m¨¢s que, en t¨¦rminos de poder, el PNV haya terminado por salir reforzado.

Pero hasta ese reforzamiento ha jugado en contra del presidente del PNV, porque ha sido el sector de Egibar el que se ha instalado en las diputaciones de Guip¨²zcoa y ?lava, despu¨¦s de desplazar de la primera a un hombre de Imaz. Los resortes institucionales de ¨¦ste hab¨ªan quedado considerablemente mermados a la hora de moderar desde el partido la postura de Ibarretxe sobre la consulta popular.

La cr¨ªtica de Imaz al planteamiento sobre la consulta popular del lehendakari, realizada en un art¨ªculo a mediados de julio, no gust¨® a relevantes personalidades del aparato vizca¨ªno, que pensaron que se hab¨ªa extralimitado trasladando al debate p¨²blico esa delicada cuesti¨®n. Ahora hay quien sostiene que cuando Imaz escribi¨® aquel art¨ªculo no estaba dando una batalla, sino que ya era consciente de que la hab¨ªa perdido.

Imaz, la modernizaci¨®n del PNV