Espa?a hace ejercicio en Finlandia

Dicen que para un jugador de f¨²tbol no hay entrenamiento m¨¢s espec¨ªfico que un partido de f¨²tbol. De acuerdo con esta premisa, la selecci¨®n espa?ola se entren¨® ayer en el estadio Ol¨ªmpico de Helsinki. No hubo m¨¢s intenci¨®n por parte de los jugadores que mantener caliente la musculatura. El cerebro permaneci¨® fr¨ªo como la noche b¨¢ltica. Apenas unos cuantos miles de aficionados siguieron las acciones envueltos en gorros y abrigos, sin dar se?ales de su presencia. Sentados en las viejas gradas de madera, los finlandeses no levantaron la voz en toda la velada. Asistieron como quien acude al cine y los equipos ofrecieron cine mudo. De entrada, Luis Aragon¨¦s puso a ocho jugadores que fueron suplentes en Dinamarca. Los acompa?¨® medio tiempo de Iniesta y Albelda, para que dirigieran las operaciones. Del otro lado, Finlandia se ejercit¨® un rato pensando en su cita con Portugal del mes que viene, en busca de la primera clasificaci¨®n para la Eurocopa de su historia. Los finlandeses ir¨¢n a Lisboa a encerrarse atr¨¢s. Eso hicieron ayer, procurando un simulacro que Espa?a no se molest¨® en desbaratar. En toda la primera parte se registr¨® un solo disparo: Riera, desde fuera del ¨¢rea a los 28 minutos. Luego nada. Dosificaci¨®n y un poco de ejercicio.

A la selecci¨®n se le hizo tan mon¨®tono tener el bal¨®n que los jugadores acabaron adormecidos

Finlandia no est¨¢ para exigir a nadie. Sin Litmanen, es un equipo irrelevante en el continente. Un sparring que no estimula en ning¨²n sentido. Mucho menos cuando los jugadores espa?oles saltaron al campo m¨¢s pendientes de regresar sanos a sus clubes. Ayer en Helsinki estaba todo dicho de antemano. Tambi¨¦n los m¨¦ritos de cada uno. En el equilibrio de poderes del grupo, en el orden de m¨¦ritos, un amistoso contra Finlandia carece de jerarqu¨ªa suficiente para alentar a los futbolistas a lucirse ante Luis Aragon¨¦s. El seleccionador lo sab¨ªa y s¨®lo esper¨® que todos se entrenasen un poco. As¨ª se celebr¨® el partido, y cada uno interpret¨® su papel. Como en el teatro.

Iniesta fue el mejor de Espa?a. Tuvo m¨¦rito porque jug¨® cuando quiso. S¨®lo a ratos, tal vez m¨¢s pendiente del viaje que har¨¢ ma?ana a Vila-real con el Bar?a. El hombre al que Luis Aragon¨¦s piensa dar la bandera de la selecci¨®n se limit¨® a las labores administrativas imprescindibles de un media punta. Con eso le bast¨® para elevarse por encima de sus colegas, que le contemplaron y esperaron a que les mandara el bal¨®n. Con medio campo vac¨ªo, a la selecci¨®n se le hizo mon¨®tono disponer de la pelota. Los jugadores acabaron adormecidos. De vez en cuando, Silva amag¨® con un mano a mano. Riera le imit¨® con su habitual gusto por los gestos elegantes. Ninguna de estas peque?as jugadas acab¨® en algo grande. Mucho menos en un gol. La parte m¨¢s sensible del p¨²blico se atrevi¨® a soltar alg¨²n pitido. Pero la funci¨®n deb¨ªa continuar.

Luis removi¨® el banquillo para empezar y lo sigui¨® agitando durante toda la noche. El t¨¦cnico pretendi¨® que todos sus muchachos hicieran ejercicio. Los cuatro d¨ªas que la selecci¨®n pas¨® en Helsinki supusieron una ocasi¨®n para la vida sedentaria y el esparcimiento que en los deportistas de ¨¦lite nunca es recomendable si no se complementa con buenos entrenamientos. Eso es lo que Luis suministr¨® a los jugadores a lo largo de un partido que no sirvi¨® para otra cosa. A Pern¨ªa casi le sirve, adem¨¢s, para salir en el telediario metiendo un gol. No fue posible porque su falta directa fue despejada por Niemi en acrob¨¢tica palomita. Niemi tambi¨¦n impidi¨® que Luis Garc¨ªa tuviera sus segundos de exposici¨®n p¨²blica. Y el palo frustr¨® la vocaci¨®n televisiva de Riera.

La ¨²nica amenaza de Espa?a consisti¨® en el fr¨ªo que pasaron sus centrales. Salvo por una carrera de Johansson, Pablo y Marchena estuvieron a punto de pedir el cambio entumecidos. Ayer, el ¨²nico que pareci¨® entretenido fue Joaqu¨ªn, que se divirti¨® regateando finlandeses. El extremo del Puerto es un futbolista de motivaciones imprevistas.

Entrenamiento en Finlandia