Las inmobiliarias prev¨¦n un auge del alquiler en los dos pr¨®ximos a?os

Ante tiempos dif¨ªciles, lo mejor es tener informaci¨®n sobre la que se viene encima. Siguiendo este principio, las grandes inmobiliarias han encargado un informe con el que pretenden anticiparse a la coyuntura negativa que vive el sector de la vivienda.

Una vez le¨ªdo, los se?ores del ladrillo tienen motivos para la alegr¨ªa y para la tristeza. Se consolar¨¢n al ver la predicci¨®n de que la demanda de pisos se situar¨¢ en los pr¨®ximos cinco a?os en torno a las 440.000 unidades anuales. Pero la preocupaci¨®n asomar¨¢ al enterarse de que gran parte de esta demanda se enfocar¨¢ hacia el alquiler en lugar de a la compra. El motivo principal es que las familias tienen menores expectativas de que los pisos se revaloricen, lo que har¨¢ que muchos se decidan por convertirse en inquilinos y no en propietarios.

El estudio encargado por el G-14 (el lobby que aglutina a las 13 mayores inmobiliarias y a la patronal del sector madrile?a) a Analistas Financieros Internacionales (AFI) augura para el periodo 2007-2015 casi cuatro millones de nuevas familias que precisar¨¢n un techo bajo el que dormir. Aunque esta cifra se queda por debajo de los m¨¢s de 600.000 hogares creados en los a?os ¨¢lgidos del boom, supone un respiro ante las visiones m¨¢s pesimistas que pronostican un desplome. De estas casas, 365.000 ir¨ªan destinadas cada a?o a la residencia principal, mientras que la segunda vivienda absorber¨ªa unas 73.500. La ralentizaci¨®n en el crecimiento de hogares responde al menor dinamismo de la econom¨ªa, que reducir¨¢ el n¨²mero de inmigrantes que llegan a Espa?a y ralentizar¨¢ el ritmo de emancipaci¨®n de los j¨®venes.

La traslaci¨®n que se producir¨¢ en los dos pr¨®ximos a?os desde la vivienda en propiedad hacia el alquiler responde, adem¨¢s de a las escasas expectativas de revalorizaci¨®n, a que el esfuerzo financiero que realizan ahora los espa?oles para comprarse un piso est¨¢ en niveles alt¨ªsimos. Aunque, como especifica el informe realizado por AFI, "sin estar en niveles cercanos a los que a principios de la d¨¦cada de los noventa provocaron una crisis en la demanda de vivienda en propiedad". "S¨ª creemos que la accesibilidad a la compra se encuentra en niveles de cierto estr¨¦s", matiza el estudio pagado por los constructores.

El presidente del G-14, Fernando Mart¨ªn, aprovech¨® la puesta de largo del grupo de presi¨®n inmobiliario el 24 de octubre para recalcar que el precio de los pisos no iba a bajar; y que la demanda se mantendr¨ªa estable en torno a las 450.000 viviendas anuales. La insistencia de Mart¨ªn se entiende por la necesidad del sector de convencer a los potenciales clientes de que al comprar una casa est¨¢n haciendo una inversi¨®n que aumentar¨¢ de valor con el tiempo.

Pues bien, el informe encargado por el G-14 certifica que la percepci¨®n del riesgo en la compra de una vivienda ha ido aumentando. "En el primer semestre de 2007 ya contamos con claras se?ales de moderaci¨®n en la intenci¨®n de compra por parte de las familias". Seg¨²n el estudio, la ca¨ªda es generalizada en todos los segmentos de renta, y m¨¢s pronunciada entre los que tienen entre 30 y 49 a?os.

Ayudas poco operativas

En Analistas Financieros calculan que la vivienda en propiedad pasar¨¢ del 87,2% actual al 86,4% a finales de 2009; lo que supone un trasvase hacia el alquiler cercano al 35% o 40% para el incremento anual del parque de viviendas durante el periodo 2007-2009. Pero en 2010, "la mejora en la accesibilidad a la compra y la elevada demanda" provocar¨¢n un menor ritmo de ca¨ªda de la tasa de vivienda en propiedad: una demanda para adquisici¨®n del 80%, frente a un porcentaje de alquiler del 20%.

APCE, la patronal de los promotores, considera que el plan de fomento del alquiler para j¨®venes aprobado por el Gobierno tendr¨¢ un impacto limitado a corto plazo, debido a la escasa oferta de viviendas en alquiler, seg¨²n un art¨ªculo de la revista Promotores Constructores.