El temor a la recesi¨®n castiga con dureza a las principales Bolsas

Si hay que fiarse de la Bolsa como term¨®metro de la econom¨ªa, pintan bastos. Los mercados alimentaron ayer, con la ca¨ªda m¨¢s pronunciada desde el estallido de las hipotecas basura, las voces de los economistas que afirman que la crisis hipotecaria va mudando de piel para transformarse en una recesi¨®n en toda regla, por lo menos en Estados Unidos. Ese miedo no ha calado tanto a¨²n en Europa, pero el aterrizaje ser¨¢ mucho menos suave de lo esperado, a juzgar por el perfil burs¨¢til de 2008.

Las constructoras espa?olas y la banca sufrieron ca¨ªdas hasta del 8%

En tres semanas se han esfumado 800.000 millones de d¨®lares en EE UU

Ajenas a los an¨¢lisis pol¨ªticos propios del calendario electoral, las Bolsas se empe?an en ensombrecer el panorama econ¨®mico. Wall Street protagoniza el peor arranque burs¨¢til desde 1978. En tres semanas se han esfumado 800.000 millones de d¨®lares en los mercados de EE UU. Los inversores no quieren saber nada de las primarias norteamericanas, pero tampoco de la precampa?a espa?ola: el Ibex cedi¨® ayer el 3,4%, la mayor ca¨ªda de Europa, y se ha comido todas las ganancias acumuladas en 2007. Tambi¨¦n el Ibex hace a?icos las estad¨ªsticas, y para mal. La ca¨ªda del 8,15% es el peor comienzo de a?o desde que empez¨® a calcularse el ¨ªndice, en 1989.

La espantada de los inversores respondi¨® a dos est¨ªmulos fundamentales. Citigroup, el mayor banco del mundo, present¨® los peores n¨²meros de su historia y demostr¨® que el impacto de la crisis hipotecaria est¨¢ siendo devastador. Y la mayor econom¨ªa del mundo, la de EE UU, comunic¨® el dato que esperaban todos los agoreros: el consumo -el principal motor del crecimiento- pinch¨® en diciembre, con un retroceso del 0,4% en las ventas minoristas. "No parece haber final para las malas noticias", acert¨® a resumir un analista.

Si hay un t¨¦rmino de moda para definir el futuro de la econom¨ªa norteamericana, ¨¦se es sin duda la recesi¨®n. Alan Greenspan, ex presidente de la Reserva Federal y or¨¢culo de las Bolsas cuando estaba al frente del banco central estadounidense, se uni¨® al eco de voces m¨¢s pesimistas e indic¨® que los s¨ªntomas "est¨¢n ah¨ª, claramente". "Las recesiones no ocurren sin m¨¢s, sino que suelen llegar antecedidas por una discontinuidad en los mercados", asegur¨® Greenspan, que ve en el rosario de datos publicados en las ¨²ltimas semanas se?ales inequ¨ªvocas de esa "discontinuidad".

A otra escala, la Bolsa espa?ola reproduce un esquema similar. A las malas noticias de Estados Unidos se unieron las cifras de inflaci¨®n y, procedente de Europa, la ca¨ªda de la confianza de los consumidores alemanes. La banca y las constructoras fueron de nuevo los sectores m¨¢s perjudicados. El boom de la construcci¨®n deslumbr¨® en su d¨ªa a los economistas de medio mundo, de la misma manera que ahora todos los organismos internacionales coinciden en se?alarlo como el mayor peligro para la econom¨ªa.

"Ya nadie duda de que hay burbuja inmobiliaria en Espa?a", indic¨® en Madrid Daniel Thorniley, vicepresidente de The Economist Intelligence Unit, "pero s¨®lo una minor¨ªa de los analistas" considera que la econom¨ªa espa?ola entrar¨¢ tambi¨¦n en recesi¨®n, explic¨®. Seg¨²n Throniley, la burbuja "se ir¨¢ desinflando en los dos pr¨®ximos a?os, pero es poco probable que explote".

Hasta que eso ocurra, las constructoras viven su particular v¨ªa crucis. La sesi¨®n fue especialmente dura para las grandes del sector, con ca¨ªdas del 6% al 8% para ACS, FCC, Ferrovial y Sacyr. "El aterrizaje suave que se preve¨ªa hace unos meses va a ser mucho m¨¢s ¨¢spero", explic¨® Daniel Su¨¢rez, analista de AFI.

Ante el desplome de los mercados, hay expertos que ven un cambio de las expectativas. "La inflaci¨®n repunta, la vivienda est¨¢ cayendo y el desempleo crece. Los riesgos son cada vez mayores y cada vez est¨¢ m¨¢s claro que los beneficios de las empresas no van a ser los que el mercado esperaba. De ah¨ª que los inversores est¨¦n dejando las Bolsas para irse a otros activos, como el oro o la renta fija", explic¨® Rafael Pampill¨®n, profesor del Instituto de Empresa.

En el fondo, dato a dato las perspectivas econ¨®micas se van tornando cada vez m¨¢s pesimistas, y las Bolsas no hacen m¨¢s que amplificar -y anticipar- esa tendencia. Las inyecciones de liquidez por parte de los bancos centrales no bastan. "Lo m¨¢s probable es que los mercados financieros sigan sufriendo", concluy¨® Su¨¢rez, a la espera de lo que pase con los tipos de inter¨¦s en EE UU.