Bernanke y Bush respaldan nuevos est¨ªmulos fiscales contra la crisis

La Reserva Federal (banco central de EE UU) volvi¨® a descartar ayer un escenario de recesi¨®n en el pa¨ªs. Y aunque Ben Bernanke prefiere hablar de lento crecimiento en su diagn¨®stico, apoy¨® ante el Congreso que se pongan en marcha cuando antes est¨ªmulos fiscales para que la expansi¨®n recupere su potencial. Eso s¨ª, dej¨® claro que cualquier incentivo debe ser temporal y no elevar el d¨¦ficit p¨²blico. La Casa Blanca tambi¨¦n respalda que se avance por esta v¨ªa.

El Dow Jones, que apuesta por una bajada de tipos, cay¨® el 2,46%

Bernanke conf¨ªa en que el crecimiento retomar¨¢ su senda en EE UU a fin de a?o o como muy tarde a mediados de 2009. Eso s¨ª, hasta entonces precis¨® que el ritmo de expansi¨®n estar¨¢ claramente por debajo del potencial (3% del PIB). Y aunque evit¨® mostrarse alarmista, asegur¨® que estar¨¢ vigilante para actuar con "rapidez", "agilidad" y "flexibilidad" ante cualquier cambio en las condiciones econ¨®micas o financieras. La situaci¨®n, dice, es fr¨¢gil.

El presidente de la Reserva cree que es un "error" leer demasiado en el dato de empleo de diciembre, que calific¨® de decepcionante tras el fuerte repunte del paro al 5%. Sin embargo, precis¨® que los riesgos al crecimiento son m¨¢s pronunciados ahora que hace unos meses, por el efecto combinado de la crisis hipotecaria, el par¨®n en el mercado de la vivienda y el alza de la energ¨ªa. Por eso consider¨® que podr¨ªan ser necesarias nuevas rebajas en los tipos de inter¨¦s (4,25%) para apoyar la econom¨ªa. En este contexto, Bernanke consider¨® que el paquete de est¨ªmulos fiscales que est¨¢ dise?ando el Congreso podr¨ªa ser complementario a la pol¨ªtica monetaria. Aunque puso dos condiciones de principio para su dise?o. Por un lado, cree que estos incentivos deben aplicarse cuando m¨¢s se necesitan y durante un plazo de 12 meses, para que no desestabilicen la econom¨ªa cuando haya retomado el vuelo. Por otro, dijo que debe cuidarse la disciplina fiscal a largo plazo.

Se tratar¨ªa de poner con la mayor rapidez posible un dinero extra en manos de las familias con menos recursos, para que puedan mantener el consumo, del que dependen dos terceras partes del PIB. Eso, explic¨® Bernanke, tendr¨¢ un efecto positivo a corto plazo para la econom¨ªa.

La Casa Blanca tambi¨¦n est¨¢ de acuerdo en que se d¨¦ un impulso a la econom¨ªa por la v¨ªa de los incentivos fiscales. Y con este prop¨®sito el presidente George Bush discuti¨® ayer con los l¨ªderes del Congreso las medidas que quiere presentar hoy. El Partido Republicano y el Dem¨®crata difieren en este momento sobre qu¨¦ medidas deber¨ªan integrar ese plan de incentivos. Sin embargo, parece que hay un principio de acuerdo para que una de los instrumentos que se adopte sea similar a la devoluci¨®n de impuestos que ya se aplic¨® para salir de la recesi¨®n de 2001.

La Casa Blanca se limita a decir que est¨¢ dispuesta a escuchar todas las opciones que est¨¦n sobre la mesa, que busquen evitar que la econom¨ªa entre en una crisis m¨¢s pronunciada.

Wall Street no valor¨¢ las palabras de Bernanke y le presiona para que baje los tipos de inter¨¦s cuanto antes. La Bolsa de Nueva York perdi¨® el nivel de los 12.200 tras caer el Dow Jones un 2,47%. Los bonos del Tesoro se convirtieron en un valor refugio y se situaron en el 3,62% a 10 a?os.

Y a los problemas que siguen aflorando en el sector financiero, se le sumaron nuevos datos que muestran que el mercado inmobiliario sigue en la senda del debilitamiento. Ayer se supo que las nuevas construcciones de viviendas cayeron un 14% en diciembre, su nivel m¨¢s bajo en 16 a?os. Si se compara con diciembre de 2006, la ca¨ªda fue del 38,2%. Tampoco hay datos muy positivos del lado de los permisos solicitados para iniciar nuevas obras.

El par¨®n en la construcci¨®n se comi¨® un punto porcentual del PIB durante el tercer trimestre. Bernanke cree que la crisis inmobiliaria tendr¨¢ un impacto mayor en la expansi¨®n econ¨®mica en el cuarto trimestre y continuar¨¢ as¨ª "durante una buena parte" de 2008.