El Bar?a hipnotiza Celtic Park
El equipo de Rijkaard remonta con tres bellos goles tras conceder dos tantos en fallos defensivos
Ya no despellejan a nadie en el Celtic Park, silenciado por el f¨²tbol po¨¦tico del Bar?a, m¨¢s guapo que competitivo, enfocado de nuevo al marco contrario y descuidado en el propio. El campo de los cat¨®licos de Glasgow fue anoche un escenario tan amable que hasta son¨® el himno del Bar?a y Ronaldinho sali¨® ovacionado del campo.
CELTIC GLASGOW 2 - BARCELONA 3
Celtic Glasgow: Boruc; Caddis (Wilson, m. 55) , Caldwell, McManus, Naylor; Nakamura, Robson, Hartley (Donati, m. 65), McGeady; Vennegoor of Hesselink (Samaras, m. 61) y McDonald. No utilizados: Brown; Kennedy, Sno y O'Dea.
Barcelona: Vald¨¦s; Puyol, M¨¢rquez, Milito, Abidal; Iniesta, Tour¨¦, Deco (Xavi, m. 65); Messi, Henry (Gudjhonsen, m. 88) y Ronaldinho (Eto'o m. 73). No utilizados: Pinto; Thuram, Sylvinho y Giovani.
Goles: 1-0. M. 15. Vennegoor of Hesselink, de cabeza. 1-1. M. 17. Messi, tras una pared con Deco. 2-1. M. 37. Robson se anticipa por alto a Milito. 2-2. M. 52. Henry, de rosca con el interior. 2-3. M. 79. Messi, a pase de Eto'o.
?rbitro: Peter Fr?jdfeldt. Amonest¨® a Robson, Deco, Hartley y Samaras.
55.000 espectadores en el Celtic Park.
Ronaldinho toc¨® para Henry y el franc¨¦s meti¨® un gol excelente por el recorte y la rosca
Nadie dir¨ªa que el Celtic s¨®lo hab¨ªa perdido un partido de 16 en su feudo
A la cortes¨ªa correspondieron los azulgrana con el regalo de dos goles en las dos ¨²nicas llegadas al ¨¢rea de Vald¨¦s. Dos saltos de cabeza, dos remates y dos dianas. Especialmente condescendiente en su ¨¢rea, el Barcelona se recre¨® en la rival en un ejercicio tan pl¨¢stico que a veces dio la sensaci¨®n de que no jugaba al f¨²tbol sino a otra cosa que consiste en meter el bal¨®n en la porter¨ªa contraria como un golfista emboca el putt de su vida. Los tres goles del Bar?a fueron tres obras de arte.
Aunque ha chupado mucho banquillo en jornadas de entretiempo, Ronaldinho reaparece en los partidos de mayor solemnidad, como si fuera un futbolista a la carta, reservado para las grandes ocasiones. No era titular desde el cl¨¢sico disputado por Navidad y repiti¨® ayer en la reanudaci¨®n de la Copa de Europa en el Celtic Park, un estadio con mucha m¨ªstica. Pocas citas puedan motivar m¨¢s a un futbolista que un Bar?a-Madrid o un Celtic-Barcelona, y Ronnie sali¨® en Glasgow como punta izquierdo, igual que en los buenos tiempos, defendido adem¨¢s por un lateral de 19 a?os, debutante en el torneo y apellidado Caddis. La china le toc¨® a Eto'o, sorprendentemente relegado a la suplencia si se atiende a la falta de gol que ha tenido el equipo desde su partida a ?frica: siete en ocho partidos.
Ronaldinho redund¨® en las cosas buenas y en las malas del Bar?a. El brasile?o y el equipo han perdido tensi¨®n competitiva y se adornan en exceso en jugadas insustanciales, acciones que a veces distraen mucho a los aficionados y poco a las defensas contrarias, y en otras provocan goles bell¨ªsimos como los anotados por Messi y Henry. Atacaron los azulgrana con mucho despliegue ofensivo, reiterados cambios de orientaci¨®n, y por contra remataron siempre en busca del m¨¢s dif¨ªcil. Circunstancia que aval¨® el repliegue del Celtic, resguardado en su cancha, pendiente de armar la contra.
As¨ª las cosas, los dos equipos encontraron en tres minutos motivos de sobra para reafirmar su posici¨®n en el campo. Erraron Puyol y Milito en la defensa del cuero y Naylor le puso un centro a la cabeza de Vennegoord of Hesselink, que era gol o gol. Al poco rato Messi pic¨® la pelota sobre la salida de Boruc tras tirar una pared con Deco. Empat¨® el Bar?a en la acci¨®n m¨¢s enrevesada, despu¨¦s de marrar hasta tres disparos consecutivos ante el espl¨¦ndido Boruc. No hubo mayor novedad, ni en un bando ni en otro, hasta poco antes del descanso.
A la esterilidad del Bar?a sigui¨® un nuevo arrebato del Celtic que culmin¨® Robson con un cabezazo a c¨¢mara lenta que se comieron Milito y Vald¨¦s en otra jugada dise?ada por McGeady, extremo excelente en un equipo muy pobre, sin apenas recursos, falto incluso de f¨ªsico. McGeady aprovech¨® que Tour¨¦ mezcl¨® siempre con los centrales para descolgar balones y dej¨® a Puyol sin cobertura, expuesto al uno contra uno. La respuesta azulgrana fue muy parecida a la del gol inicial. Ronnie toc¨® para Henry y el franc¨¦s meti¨® un gol excelente por el recorte y el remate de rosca al palo contrario. Y c¨¦lebre fue igualmente el tercero, materializado por Messi en un gesto t¨¦cnico que subray¨® la actuaci¨®n azulgrana con Eto'o ya en escena. La pulga no remat¨® de primeras, como ped¨ªa la jugada, sino que se sac¨® un quiebro para sentar al zaguero y anotar el tanto de la victoria, la n¨²mero 100 azulgrana en la Copa de Europa. De paso, Messi, con 6 dianas, se convirti¨® en el m¨¢ximo goleador de esta Champions.
Nadie hubiera dicho que el Celtic llevaba ocho victorias seguidas ni que s¨®lo hab¨ªa perdido un partido en su feudo de los ¨²ltimos 16 disputados. La muchachada de Strachan qued¨® embobada con el juego de claqu¨¦ de los puntas azulgrana, comandados por un Ronaldinho que hizo de Fred Astaire. Alejado de la tensi¨®n propia de la Copa de Europa, el partido no ten¨ªa ning¨²n peligro y el Bar?a se regal¨® un triunfo bien bonito y divertido.
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