Ur¨ªa Men¨¦ndez se hace hueco en Harvard

Lo primero que tuve que explicar a los alumnos es que las cosas no siempre son blancas o negras. A veces hay caminos grises", explica Luis de Carlos, abogado y socio director de la firma Ur¨ªa Men¨¦ndez. Todav¨ªa se emociona cuando cuenta c¨®mo se enfrent¨® a los estudiantes de la universidad estadounidense Harvard, en Boston, una de las m¨¢s prestigiosas del mundo. Su bufete fue elegido en enero para formar parte de los planes de estudios de su escuela de negocios, un honor al alcance de pocas firmas.

Los alumnos de la escuela de negocios de Harvard no estudian cientos de vol¨²menes llenos de teor¨ªa. Esta universidad prefiere prepararlos para el mundo real de los negocios, y para ello imparte sus masters y cursos para ejecutivos a base de cases. Los profesores seleccionan ejemplos reales del panorama empresarial. Casos reales. Estudian la evoluci¨®n de empresas, sus puntos de inflexi¨®n o sus perspectivas de futuro y elaboran un extenso informe. Los alumnos deber¨¢n analizarlo y proponer soluciones o cr¨ªticas.

El profesor de Harvard lanz¨® tres preguntas a los alumnos: "?Cre¨¦is que Ur¨ªa ha tenido ¨¦xito? ?Por qu¨¦? ?Cu¨¢les son ahora sus retos?"

La firma, fundada por Rodrigo Ur¨ªa en 1940, ocupa la sexta posici¨®n del mundo en intervenci¨®n de fusiones y compras internacionales

Entre los archivos de la universidad figuran informes sobre Microsoft, AOL, Nike o Coca-Cola. S¨®lo un peque?o y selecto grupo de empresas espa?olas tiene espacio en este elitista grupo de estudio: Zara, el FC Barcelona o el Real Madrid circulan cada a?o por las aulas de este centro de estudios de Boston. S¨®lo un despacho de abogados, el estadounidense Wachtel, Lipton, Rosen & Katz, hab¨ªa sido estudiado por la instituci¨®n. El mes pasado, tres socios de Ur¨ªa Men¨¦ndez, Luis de Carlos, Francisco S¨¢ Carneiro y Antonio Herrero, se examinaron ante la suspicacia de los alumnos del master en Business Administration que analizaron su firma.

"Fuimos a explicar nuestra evoluci¨®n, nuestra historia y a plantear los retos a los que nos enfrentamos", recuerda Luis de Carlos. Aunque presentaron su caso en enero, su viaje a Boston comenz¨® a planearse mucho antes. "En oto?o nos llamaron. Nos preguntaron si nos parec¨ªa bien participar en la formaci¨®n de Harvard y les dijimos sin dudar que s¨ª", explica. Entonces comenz¨® el trabajo de la universidad: se entrevistaron con varios socios del bufete, estudiaron la historia de la firma y plantearon los principales retos a los que se enfrenta en un futuro pr¨®ximo.

?Por qu¨¦ Ur¨ªa fue la elegida? Seg¨²n De Carlos, el profesor de la universidad estadounidense

Robert Eccles y al consultor Partha Bose conoc¨ªan su trayectoria y su buena posici¨®n en el panorama internacional. Ellos fueron los encargados de redactar el caso. "Este a?o hemos estado involucrados en las principales operaciones de M&A (fusi¨®n y adquisici¨®n) transnacionales", explica orgulloso De Carlos. Las compras de ABN Amro por Santander, la de Endesa por Acciona y Enel, la de Scottish Power por Iberdrola... en todas aparece involucrado este despacho. Operaciones emblem¨¢ticas que sit¨²an a la firma en la sexta posici¨®n del mundo en intervenci¨®n de acuerdos internacionales, seg¨²n Bloomberg. En total, colaboraron en 2007 en fusiones por valor de 243.967 millones de d¨®lares (m¨¢s de 160.684 millones de euros). En la decisi¨®n de Harvard tambi¨¦n pudo influir un reportaje publicado en octubre por el diario The New York Times en el que destacaban las posiciones privilegiadas de Ur¨ªa en los rankings internacionales de firmas de abogados.

Una vez preparado el informe, que consta de unas 30 p¨¢ginas donde se desarrolla la historia desde la fundaci¨®n de la firma en 1940 por Rodrigo Ur¨ªa hasta sus actuales retos, Harvard invit¨® a la firma de abogados a debatir con sus alumnos. Cuando llegaron al aula a primera hora de la ma?ana del 29 de enero, unos sesenta estudiantes les esperaban. De Carlos recuerda que la mayor¨ªa de ellos ten¨ªan rasgos asi¨¢ticos o hind¨²es, y todos con la lecci¨®n bien aprendida. "Les hab¨ªan proporcionado el documento y se hab¨ªan informado. Est¨¢bamos all¨ª para debatir, para dialogar", analiza De Carlos. El profesor Robert Eccles entr¨® en el aula y lanz¨® tres preguntas: "?Cre¨¦is que Ur¨ªa ha tenido ¨¦xito? ?Por qu¨¦? ?Cu¨¢les son sus retos para el futuro?". Los alumnos coincidieron en que los abogados hab¨ªan triunfado y destacaron la capacidad del despacho para "atraer el talento y conservarlo". El debate se centr¨® enseguida en si la firma de servicios profesionales deb¨ªa mantener su tama?o actual y si deb¨ªa o no profundizar en su internacionalizaci¨®n.

"Al principio, los alumnos estaban divididos: los que pensaban que deb¨ªamos ser como unos grandes almacenes de los abogados y crecer, y los que pensaban que nos conven¨ªa ser una boutique especializada". El principal cometido de los abogados, aseguran, fue explicar que existe el camino intermedio. "No se trata de ser global o local. No queremos ejercer derecho en todos los pa¨ªses, pero tampoco ser dom¨¦sticos", analiza De Carlos.

Una visi¨®n optimista

Actualmente, adem¨¢s de su cuartel general madrile?o, cuentan con oficinas en Barcelona, Bilbao, Lisboa, Oporto y Valencia. Una red de profesionales en las principales ciudades del mundo sirve de enlace con clientes y abogados extranjeros. Ellos se definen como una firma "de ¨¦lite". Ante las perspectivas de una econom¨ªa menos boyante en el futuro, se muestran seguros. "En el mercado sigue habiendo oportunidades para las empresas espa?olas, y ah¨ª estaremos nosotros para colaborar".

Ur¨ªa Men¨¦ndez asegura que la experiencia en Harvard fue enriquecedora. No s¨®lo por el prestigio que supone y por la difusi¨®n que tendr¨¢ su historia en todas las escuelas de negocios del planeta, sino porque formaron parte de un sistema de formaci¨®n muy completo, y en la firma se toman muy en serio la preparaci¨®n. "Aqu¨ª somos muy exigentes. Buscamos abogados con los mejores expedientes, idiomas y que sean competentes. Luego, cuando entran, comienzan a formarse intensamente los dos primeros a?os. Y luego, m¨¢s formaci¨®n". De Carlos asegura que nunca se est¨¢ suficientemente preparado. "Incluso yo sigo participando todos los meses en talleres y cursos", explica sonriente.

El paso por Harvard qued¨® grabado en su memoria y tambi¨¦n en v¨ªdeo. "Cuando alguien visita las aulas, ellos lo registran para mostrarlo. As¨ª seguiremos colaborando all¨ª todos los a?os que se imparta la asignatura".