El Consejo de Seguridad refuerza las sanciones contra Teher¨¢n
El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas adopt¨® ayer, por una amplia mayor¨ªa, una nueva resoluci¨®n exigiendo a Ir¨¢n que suspenda su programa nuclear y activando el r¨¦gimen de sanciones. Para ello, se imponen nuevas restricciones al comercio de bienes civiles y militares con la Rep¨²blica Isl¨¢mica, y se pide que se vigilen las actividades financieras de dos bancos.
Las entidades sospechosas son el Bank Melli y el Bank Saderat. Adem¨¢s, se contempla la congelaci¨®n de activos de una docena de compa?¨ªas y otra docena de individuos vinculados al programa at¨®mico y de misiles bal¨ªsticos. Los pa¨ªses deber¨¢n informar a la ONU sobre los viajes que realicen a su territorio las personas en la lista. Y se ampl¨ªa la prohibici¨®n de viajes.
La resoluci¨®n tambi¨¦n pide que se haga un "ejercicio de vigilancia" al firmar nuevos acuerdos comerciales con Ir¨¢n, y autoriza a que se realicen inspecciones a las mercanc¨ªas de doble uso (civil y militar) que tengan como origen o destino este pa¨ªs. Se trata de la tercera ronda de sanciones que el Consejo de Seguridad decide contra Ir¨¢n, que completa las resoluciones adoptadas en diciembre de 2006 y marzo de 2007.
El texto, impulsado por Francia, Reino Unido y Alemania, con el respaldo de EE UU, no cont¨® con el apoyo un¨¢nime de los 15 miembros del Consejo de Seguridad. Indonesia se abstuvo en el voto, porque consideran que el ¨²ltimo informe del Organismo Internacional de la Energ¨ªa At¨®mica (OIEA), del pasado 22 de febrero, muestra progresos y considera que las nuevas sanciones crean una tensi¨®n innecesaria. Las potencias occidentales consideran que Ir¨¢n sigue desafiante, al no suspender las actividades de enriquecimiento de uranio y por eso dicen que es necesario que se lance desde la ONU una clara se?al pol¨ªtica hacia Teher¨¢n. Washington buscaba m¨¢s. Sus intenciones se vieron aguadas por sus propios servicios de espionaje, que en diciembre afirmaron que Ir¨¢n abandon¨® su programa para desarrollar la bomba nuclear en 2003.
Mohammad Khazee, representante iran¨ª ante la ONU, rechaz¨® los t¨¦rminos de esta nueva reprimenda e insisti¨® en que su plan nuclear es de car¨¢cter civil (para producir electricidad). Tambi¨¦n defendi¨® su derecho a desarrollar esta tecnolog¨ªa, por lo que considera que la resoluci¨®n es ilegal, al violar uno de los principios b¨¢sicos del Tratado de No Proliferaci¨®n Nuclear, y mina la credibilidad del organismo.
Restricciones
- La resoluci¨®n ordena la vigilancia de las actividades de Bank Melli y Bank Saderat.
- La congelaci¨®n de activos relacionados con una docena de compa?¨ªas y otros tantos individuos vinculados al programa at¨®mico y de misiles bal¨ªsticos iran¨ª.
- La inspecci¨®n de mercanc¨ªas sospechosas, de doble uso civil y militar, que entren o salgan de Ir¨¢n.
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