'Forbes' huye del ladrillo

Lo advirti¨® y, un a?o m¨¢s tarde, se ha cumplido. La revista Forbes recibi¨® en 2007 a los nuevos integrantes espa?oles en la lista de los m¨¢s ricos del mundo con el aviso de que su estancia pod¨ªa ser fugaz. Once nuevos nombres acababan de desembarcar en la lista dorada. Nueve de ellos, vinculados a la construcci¨®n. Pero las fortunas de los se?ores del ladrillo, como los bautiz¨® la revista estadounidense, eran muy vol¨¢tiles.

No es s¨®lo que tres de esas 11 incorporaciones se hayan dado de baja en el club este a?o. Es que, en total, la riqueza acumulada de los ricos entre los ricos ha disminuido m¨¢s de 18.700 millones de d¨®lares (unos 12.200 millones de euros).

Es verdad que la fiabilidad de las cuentas que hace Forbes es discutible, ya que s¨®lo tienen en cuenta la informaci¨®n p¨²blica, lo que favorece a las sociedades que cotizan en Bolsa. El patrimonio de muchos multimillonarios con otro tipo de activos se escapa a sus ojos.

"Esa lista est¨¢ bien para re¨ªrse, pero no para otra cosa", dice Joaqu¨ªn Rivero

El gran damnificado es Enrique Ba?uelos, y s¨®lo Manuel Jove mantiene el tipo

La fortaleza del euro evita que el desplome en el 'ranking' sea mayor

Pero lo cierto es que la revista apunta en una direcci¨®n que es imposible de negar: el desplome del valor de las grandes constructoras e inmobiliarias espa?olas ha hecho que los bolsillos de los m¨¢s beneficiados por el boom del ladrillo est¨¦n ahora mucho menos llenos que hace un a?o.

Lo cierto es que el deterioro de las grandes fortunas espa?olas es mayor que el estimado por Forbes. Porque la revista hace sus c¨¢lculos en d¨®lares, lo que beneficia a todos los que cuentan su dinero en euros. La revalorizaci¨®n del 12% en un a?o de la moneda ¨²nica ha contribuido a inflar las cifras de los europeos frente a los norteamericanos.

Alguno de los directamente afectados no tiene muy buena opini¨®n sobre los m¨¦todos de Forbes. "Esa lista es una broma. Cuando ves que hay ciertos empresarios que no aparecen, de los que se sabe que tienen much¨ªsimo m¨¢s, y en cambio s¨ª que estamos otros como yo, que no tengo eso que dicen, me parece que se trata de un estudio mal hecho. Para ver la riqueza no hay que contar lo que se tiene, sino lo que se tiene menos lo que se debe. Est¨¢ bien para re¨ªrse, pero no para otra cosa".

Quien dec¨ªa esto la semana pasada -antes de que se hiciera p¨²blico el nuevo listado que le dejaba fuera- era Joaqu¨ªn Rivero, presidente de la inmobiliaria Gecina y due?o de una magn¨ªfica colecci¨®n de arte que incluye pinturas de Goya y Zurbar¨¢n. ?l, su socio Bautista Soler y el vicepresidente de Sacyr-Vallehermoso, Manuel Manrique, son los tres espa?oles que han salido este a?o del grupo de los que tienen m¨¢s de 1.000 millones de d¨®lares.

Adem¨¢s de estos tres empresarios que se han ca¨ªdo de la lista, el resto de constructores e inmobiliarios espa?oles han perdido puestos y mucho dinero. En total, los 11 han cedido casi 5.000 posiciones este a?o, que por primera vez ha superado el millar de integrantes.

El caso paradigm¨¢tico de la burbuja inmobiliaria es el de Enrique Ba?uelos, ex presidente de Astroc, que ahora se llama Afirma. Porque Ba?uelos es, entre los m¨¢s ricos, el gran perjudicado de la crisis del sector. El que hace un a?o era el tercer espa?ol m¨¢s adinerado, el que en pleno apogeo convid¨® a 25.000 neoyorquinos a una paella mastod¨®ntica en Central Park ha perdido en este tiempo 6.400 millones de d¨®lares. Le quedan 1.300. El mayor accionista de Astroc, que en 2007 escal¨® hasta codearse con las 100 mayores fortunas del mundo, se queda a tan s¨®lo 300 millones de salir de un club tan restringido.

Y es que Astroc es la empresa que m¨¢s ha sufrido los vaivenes del sector. Si el 9 de febrero (d¨ªa que Forbes utiliz¨® de referencia para el informe de 2007) cada acci¨®n val¨ªa 71,5 euros, un a?o m¨¢s tarde los mismos t¨ªtulos se vend¨ªan por 3,9 euros. Es decir, un 95% menos.

En el extremo opuesto est¨¢ Manuel Jove, ex presidente de Fadesa. El empresario gallego tuvo la inteligencia, o la suerte, de abandonar el sector inmobiliario a finales de 2006, justo antes de que se desplomara. Vendi¨® el 55% de Fadesa a Fernando Mart¨ªn, obtuvo 2.000 millones de plusval¨ªas, y compr¨® el 5% del BBVA convirti¨¦ndose en el primer accionista del banco. El resultado es que su riqueza de hoy es igual a la de hace un a?o: 3.500 millones de d¨®lares.

Entre los casos extremos de Jove y Ba?uelos, un amplio abanico de empresas que se han desplomado en Bolsa en el ¨²ltimo a?o. Cogiendo como referencia el 9 de febrero de 2007 y el 11 de febrero de 2008 (los d¨ªas que Forbes ha utilizado para sus dos informes anuales), el valor de la acci¨®n de ACS, Sacyr, Colonial, FCC, Astroc y Ferrovial ha ca¨ªdo entre un 25% y un 95%.

La menos castigada ha sido la constructora ACS, cuyas acciones valen un 25% menos. Su presidente, Florentino P¨¦rez, ha mantenido el tipo perdiendo s¨®lo 100 millones de d¨®lares de los 1.900 que ten¨ªa hace un a?o.

El valor burs¨¢til de Ferrovial y FCC, que ha ca¨ªdo en torno al 50%, ha arrastrado a sus mayores accionistas, Rafael del Pino y Esther Koplowitz, que han perdido 5.300 y 3.300 millones de d¨®lares respectivamente. A pesar de que haya visto desaparecer tal cantidad de dinero, Del Pino sigue siendo el segundo espa?ol m¨¢s afortunado, s¨®lo por detr¨¢s de Amancio Ortega, creador del imperio Inditex. Al presidente de Ferrovial se le ha atragantado la compra del gestor aeroportuario brit¨¢nico BAA, penalizada por el mercado.

Quedan ya lejos las revalorizaciones que vivieron empresas como Astroc o Colonial, que multiplicaban su valor en cuesti¨®n de semanas. Ahora, los gr¨¢ficos que representan su evoluci¨®n en Bolsa dibujan monta?as con ca¨ªdas espectaculares. Por una de esas pendientes baja la fortuna de Luis Portillo. El ex presidente de Inmocaral, que absorbi¨® Colonial, entr¨® en Forbes el a?o pasado en un nada desde?able puesto n¨²mero 237, avalado por sus 3.700 millones de d¨®lares. Cuando se public¨® el listado de 2008, Portillo apuraba reuniones maratonianas para llegar a un acuerdo con el fondo soberano de Dubai y deshacerse de su participaci¨®n en la inmobiliaria. En este tiempo, al empresario sevillano se le han esfumado 2.500 millones de d¨®lares.