Fuera los coches, no al t¨²nel
EL PA?S consulta a seis prestigiosos expertos acerca del gran 'proyecto Gallard¨®n'
Es el caballo de batalla de Alberto Ruiz-Gallard¨®n. Otra oportunidad que le brinda el destino para medirse con su gran rival, la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre. Quiz¨¢ una ¨²ltima bala para demostrarle al mundo y a s¨ª mismo que puede con ella. Que las derrotas que sufri¨® con anterioridad eran s¨®lo el camino hasta la victoria final. Que le subestimaron los que pensaron que tiraba la toalla. Pero lo m¨¢s importante, lo que realmente supone el proyecto de remodelaci¨®n del eje Prado-Recoletos y que ha quedado ensombrecido por la refriega pol¨ªtica, es un paso muy relevante en el cambio de modelo de ciudad que experimenta Madrid. La primera gran obra de Gallard¨®n que pone el foco en el peat¨®n.
La remodelaci¨®n supone para Madrid el cambio de modelo de ciudad
El proyecto del equipo de ?lvaro Siza y Juan Miguel Hern¨¢ndez de Le¨®n es una apuesta clara y atrevida por la ciudad transitable a pie, la restricci¨®n del tr¨¢fico y el transporte p¨²blico. Treinta y siete mil coches desaparecer¨¢n de un plumazo de la zona. Una reducci¨®n del tr¨¢fico del 40%. Una idea que lleva macer¨¢ndose seis a?os y que supone una potenciaci¨®n evidente de uno de los mejores espacios que tiene la ciudad: el cuadril¨¢tero de los museos.
Pero, en medio de la batalla pol¨ªtica, el proyecto ha sido discutido por varios aspectos. Primero fueron los ¨¢rboles y los carriles de tr¨¢fico que discurr¨ªan frente al Museo Thyssen. Se solucion¨®. Ahora, Esperanza Aguirre lo ha sometido a un proceso ordinario de evaluaci¨®n ambiental, que tardar¨¢, como m¨ªnimo, nueve meses en resolverse, haciendo valer sus competencias sobre la zona declarada Bien de Inter¨¦s Cultural (de Atocha a Cibeles). Adem¨¢s, argumenta la Comunidad, la reducci¨®n de carriles en el eje colapsar¨¢ las calles aleda?as, especialmente la de Alfonso XII. Y para solucionarlo propone empecinadamente la soluci¨®n del t¨²nel que ya descart¨® el concurso internacional y el propio Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez del Manzano cuando era alcalde.
Y en medio de la par¨¢lisis, Gallard¨®n ha decidido tirar por la calle de en medio: el proyecto comienza, diga lo que diga Aguirre. El Ayuntamiento dejar¨¢ para lo ¨²ltimo la zona protegida y empezar¨¢ las obras de las zonas donde Aguirre no tiene competencias. La gran inc¨®gnita para los ciudadanos es cu¨¢ndo podr¨¢n ver acabado el proyecto. No hay plazos, ni presupuestos.
El Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid solicita que se estudien bien las consecuencias que la reforma tendr¨¢ sobre el tr¨¢fico. Si hay que hacer un t¨²nel, dicen, debe realizarse un estudio exhaustivo "sobre los condicionantes que imponen las infraestructuras y dem¨¢s elementos que ya alberga el subsuelo de este espacio urbano".
Los vecinos, a trav¨¦s de la Federaci¨®n Regional de Asociaciones de Vecinos (FRAVM), manifiestan el hartazgo de asistir a una lucha perenne que ha arrojado un sinf¨ªn de propuestas y contrapropuestas. Piden, adem¨¢s, que se atiendan sus alegaciones.
EL PA?S ha pedido a seis expertos independientes y de prestigio internacional que se pronuncien acerca de la conveniencia de una reforma de este calibre y de los problemas de tr¨¢fico que puede generar en el futuro. Todos est¨¢n a favor de la remodelaci¨®n y apuestan por medidas globales de restricci¨®n y control del tr¨¢fico en el centro de Madrid. ?sa, dicen, es la concepci¨®n de una ciudad moderna. ?Y la idea del t¨²nel? No convence a ninguno.
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