El duende Cazorla

Brinca Cazorla sobre el tackle del zaguero sueco y parece que sonr¨ªe. Al final del vuelo, da la pelota de primera, abriendo a la banda, y all¨ª est¨¢ Sergio Ramos, que recoge la pelota y vuela sobre la porter¨ªa sueca camino de los cuartos de final de una Eurocopa que no pod¨ªa empezar mejor para la roja.

Jug¨® e hizo jugar a Espa?a Cazorla, el n¨²mero 12, el ¨²ltimo en llegar. Ayer, golpeado en una u?a, descans¨® feliz. Se le ve¨ªa una enorme sonrisa en su cara menuda, con los aparatos de ortodoncia sobre los dientes. Si hubiera podido, se habr¨ªa comido una fabada con los doce amigos de la infancia que viajaron hasta el Tirol para verle vestido de rojo, para ver el partido de la selecci¨®n contra Suecia, para compartir con ¨¦l la alegr¨ªa de haberse clasificado para los cuartos de final.

Luis: "No me ha sorprendido, pero est¨¢ un punto por encima de lo que yo cre¨ªa"

Tras no convencer de entrada a Pellegrini, fue Marcelino quien le proyect¨® en el Recre

El d¨ªa que Espa?a jug¨® su ¨²ltima final de una Eurocopa, en junio de 1984, su madre, limpiadora en un colegio, estaba embarazada de tres meses. En diciembre de aquel a?o pari¨® a Santiago Cazorla Gonz¨¢lez en Lugo de Llanera (Asturias), a ¨¦se que hasta hace un mes preparaba las vacaciones de verano con su novia.

Pues nada de vacaciones: el s¨¢bado, en el Tivoli Neu, de Innsbruck, sustituy¨® a Iniesta en el minuto 10 de la segunda parte, se ech¨® a sus menudas espaldas al grupo y, de brinco en brinco, correte¨® como un duende protagonizando un partido memorable.

Jug¨® 35 minutos, cometi¨® una falta, le hicieron otra, complet¨® 19 pases buenos de 25 que intent¨® -un 79%, igual que Villa- y se ali¨® especialmente con los laterales (cinco pases a Ramos y Capdevila) y con los volantes (tres para Cesc y otros tres para Silva).

"Sorprenderme no me ha sorprendido para nada, pero est¨¢ un punto por encima de lo que yo cre¨ªa", reconoci¨® ayer Luis Aragon¨¦s, que le usa como revulsivo por chispeante y que le considera un jugador "brillante e inteligente, al que le gusta m¨¢s el ¨²ltimo pase que el gol".

En ese sentido, Luis Aragon¨¦s est¨¢ convencido de que Cazorla debe mejorar porque, sencillamente, puede mejorar: "Tiene un buen chut. Deber¨ªa usarlo de una forma m¨¢s r¨¢pida. Y no es un defecto lo que estoy diciendo. No es un reproche. Es una virtud que debe usar", explic¨® el seleccionador.

Cazorla es un producto de la cantera de Requex¨®n y el Villarreal se lo llev¨® tan pronto como el Oviedo entr¨® en bancarrota. Todav¨ªa a veces se le ve por el Carlos Tartiere. Acude all¨ª de vez en cuando para ver a su club de toda la vida, que milita ahora en Tercera. No convenci¨® a Manuel Pellegrini, as¨ª que lo aprovech¨® Marcelino en el Recreativo de Huelva hace dos a?os. Por muy poco dinero, tuvo el canalizador del juego ofensivo que buscaba. Ahora, tras un a?o sensacional en el conjunto castellonense, Cazorla vale 20 millones de euros.

"Le debo mucho a Marcelino. Me ense?¨® muchas cosas y me dio la oportunidad de tener minutos en Primera, algo fundamental para un jugador que quiere despuntar", reconoce el jugador que juega como vive, con la sonrisa estampada en la cara. Su permanente optimismo, su forma de ser tan positiva, sufri¨® un dur¨® golpe cuando jugaba en Huelva, el m¨¢s duro que le haya dado la vida: una enfermedad fulminante mat¨® a su padre, que le hab¨ªa inculcado la pasi¨®n por el f¨²tbol. "Era catal¨¢n y muy del Bar?a. Por eso yo crec¨ª viendo jugar al dream team", explica Santi, que entonces so?aba con ser como Stoichkov o como Laudrup y ha terminado por ser un futbolista descarado, r¨¢pido, muy combinativo, de buen toque y, adem¨¢s, considerado como la alegr¨ªa de la huerta. En el vestuario del Villarreal -sus compa?eros le conocen por Paquirr¨ªn-, es el fiel escudero y el buf¨®n oficial del grupo.