El cielo espa?ol se privatiza parcialmente

Separar el cielo tiene su toque demi¨²rgico. Partir la tierra para contentar a tirios y troyanos a fin de crear un nuevo modelo de gesti¨®n de los aeropuertos espa?oles promete ser una tarea herc¨²lea. Una larga g¨¦nesis para un proyecto que, seg¨²n anunci¨® el presidente del Gobierno, ser¨¢ presentado en julio. Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero avanz¨® la idea de que se separar¨¢n las dos alas de AENA (la navegaci¨®n a¨¦rea y los aeropuertos), se dar¨¢ entrada al capital privado en la nueva sociedad aeroportuaria (con mayor¨ªa de control p¨²blico, de un 70%) y las comunidades aut¨®nomas se incorporar¨¢n a la gesti¨®n.

Despu¨¦s se ha sabido que se mantendr¨¢ la estructura central en red de AENA, el mayor gestor aeroportuario del mundo, con 210 millones de pasajeros y 49 infraestructuras s¨®lo en Espa?a. Y que la participaci¨®n de las comunidades aut¨®nomas en los aeropuertos se har¨¢ a trav¨¦s de consorcios en cada uno de ellos, cuyas competencias habr¨¢ que negociar, as¨ª como el sistema para el nombramiento de sus responsables. El control de la navegaci¨®n a¨¦rea seguir¨¢ en manos p¨²blicas, mediante la creaci¨®n de una nueva entidad.

La entrada de constructoras podr¨ªa suponer conflictos de inter¨¦s

Las tasas de AENA son mucho m¨¢s baratas que las de aeropuertos rivales

La entrada de capital privado puede implicar una subida de tasas

El Gobierno no ha aclarado qu¨¦ piensa hacer con el dinero del 30% de AENA

La ministra de Fomento, Magdalena ?lvarez, no aport¨® m¨¢s pistas en su comparecencia del jueves en el Senado. Se limit¨® a decir que ten¨ªa el modelo en la cabeza pero que por respeto al Consejo de Ministros no pod¨ªa satisfacer la curiosidad de los parlamentarios.

El esbozo no gusta a los sindicatos. Tanto CC OO como UGT recelan de la privatizaci¨®n parcial de esta empresa p¨²blica. A su vez, el sindicato de controladores USCA considera "un error estrat¨¦gico" segregar las torres de control de la navegaci¨®n a¨¦rea en el mundo de la globalizaci¨®n. Adem¨¢s, recuerdan que Bruselas trata de impulsar el cielo ¨²nico europeo, que conlleva la creaci¨®n de un solo espacio ib¨¦rico para Espa?a, Portugal y sus respectivos archipi¨¦lagos.

Tampoco los partidos pol¨ªticos catalanes las tienen todas consigo y exigen que la Generalitat tenga derecho de veto en el aeropuerto barcelon¨¦s de El Prat. Una de las claves de la negociaci¨®n se centrar¨¢ en qu¨¦ obras y de qu¨¦ cuant¨ªa podr¨¢ contratar directamente el ¨®rgano gestor de la infraestructura y cu¨¢les se reservan al consejo de administraci¨®n de la futura sociedad aeroportuaria.

Otro punto caliente se refiere a qu¨¦ tipo de socios se sentar¨¢n en ese consejo. "Tendr¨ªa que ser un tipo de socio privado muy medido", apunta una fuente de la direcci¨®n econ¨®mica de AENA. "Si son constructoras, ser¨ªa como poner al zorro a cuidar de las gallinas", porque se decidir¨¢n inversiones cuantiosas que obviamente les interesar¨¢ adjudicarse. "Tampoco tendr¨ªa sentido que fuesen aerol¨ªneas".

Un alto cargo de AENA matiza en cambio que hay mecanismos para evitar conflictos de intereses, como las que rigen en las sociedades aeroportuarias de M¨¦xico, donde el operador p¨²blico espa?ol participa de la mano de Abertis.

La concesionaria de infraestructuras (participada por La Caixa y ACS) s¨®lo se declara a la espera de conocer los detalles del nuevo modelo, pero en principio, al igual que Ferrovial (propietario del gestor de aeropuertos brit¨¢nicos BAA) se muestra m¨¢s partidario de gestionar directamente las empresas en las que invierte. La constructora, en todo caso, no est¨¢ en buen momento para comprar ya que sufre los efectos del gran peso de la deuda de m¨¢s de 9.000 millones de euros por la compra de BAA.

La nota oficial del Gobierno aduce que la privatizaci¨®n parcial "servir¨¢ para mejorar la eficiencia" de los aeropuertos, "reduciendo los costes del transporte a¨¦reo y aumentando la calidad de servicio de los usuarios". Pero eso "no est¨¢ garantizado", sentencia la citada fuente de la direcci¨®n econ¨®mica de AENA. "Y los [socios] privados querr¨¢n dividendos que de otro modo se reinvertir¨ªan".

Las experiencias de privatizaci¨®n total o parcial de aeropuertos no siempre han conseguido abaratar las tasas ni mejorar las infraestructuras. AENA ha conseguido que Espa?a sea de los pocos pa¨ªses de Europa donde hay capacidad de sobra en los aeropuertos. Y con tasas m¨¢s bajas que la mayor¨ªa.

Seg¨²n el ¨²ltimo informe disponible de la consultora Jacobs (del pasado a?o, con datos homog¨¦neos de 2005) los aeropuertos espa?oles ingresan en tasas por pasajero 4,96 euros, frente a los 9,06 del grupo BAA (privado) o los 13 de A¨¦roports de Paris (semip¨²blico). Ese estudio revela asimismo que cada movimiento (despegue o aterrizaje) cuesta en Espa?a 473,4 euros frente a los 1.680 euros de Londres-Heathrow. Con los datos de este informe, no hay ning¨²n operador europeo m¨¢s barato que AENA (se analizan 50 mundiales).

En Espa?a las tasas aeroportuarias se aprueban con los Presupuestos Generales del Estado, que suele aumentarlas en l¨ªnea con la inflaci¨®n e incluso por debajo (el 3% de incremento para 2008 frente a la subida de precios del 4,2% en 2007).

Se trata de un precio pol¨ªtico en un pa¨ªs en el que m¨¢s del 10% del Producto Interior Bruto (PIB) lo aporta el turismo y el tres cuartas partes de los visitantes extranjeros llegan en avi¨®n. "Cualquier racionalizaci¨®n econ¨®mica de las tarifas con base t¨¦cnica s¨®lo puede conducir a incrementar las tasas", sentencia la fuente del ¨¢rea econ¨®mica de AENA. Otra cosa son las tasas de navegaci¨®n, que s¨ª cubren los costes.

En realidad, casi todo en los aeropuertos corre a cargo de empresas privadas: desde los cuestionados controles de seguridad a los aprovisionamientos de los aviones. Pero la gesti¨®n de la infraestructura en s¨ª admite muchos modelos: en red o con un s¨®lo aeropuerto; privada, p¨²blica o mixta. La clave est¨¢ en qui¨¦n y c¨®mo regula las tarifas y reparte los permisos de vuelo (slots).

Precisamente hace unas semanas el anterior comisario europeo de Transportes Jacques Barrot se despidi¨® del puesto con una comunicaci¨®n en la que da luz ver al comercio de slots, pese a estar prohibido por una directiva comunitaria. Una decisi¨®n sorprendente, comenta un ejecutivo de AENA, y que tiene el efecto perverso de que quien puede gestionar la capacidad -el propio aeropuerto- queda ajeno a ese mercado.

?Por qu¨¦ cambiar entonces un modelo sobre cuya eficacia hay suficiente consenso? Pesan por un lado los compromisos pol¨ªticos del Gobierno con la Generalitat catalana (paralelamente est¨¢ pendiente la negociaci¨®n del traspaso de las cercan¨ªas de Renfe y de los peque?os aeropuertos catalanes) y por otro la necesidad de financiaci¨®n.

El Ejecutivo a¨²n no ha aclarado qu¨¦ piensa hacer con el dinero obtenido en la venta de ese 30% de AENA. Las fuentes consultadas consideran que lo l¨®gico ser¨ªa que se ampliase el capital de la empresa para lograr una inyecci¨®n de dinero muy necesaria para una entidad que no recibe ni un euro del Estado y debe invertir ingentes cantidades de dinero (m¨¢s de 2.000 millones el pasado a?o) con sus propios medios.

El m¨¦todo elegido para la privatizaci¨®n parcial podr¨ªa ser la salida a Bolsa de ese paquete de acciones, en una l¨ªnea similar a la seguida por A¨¨roports de Par¨ªs hace un par de a?os. Seg¨²n fuentes de AENA el modelo de la red de aeropuertos parisinos ser¨ªa el espejo en el que se mirar¨ªa el proyecto espa?ol, si bien las diferencias entre ambos son relevantes.

Los planes del Gobierno de Zapatero tendr¨¢n adem¨¢s otros efectos. La mayor eficacia y racionalidad que se busca con la privatizaci¨®n podr¨ªa poner en cuesti¨®n las inversiones en aeropuertos como el de Burgos (que se inaugura el d¨ªa 3 de julio) o el de Le¨®n. "Ah¨ª podr¨ªa aterrizar el Challenger", ironiza una fuente de AENA. Por cuestiones pol¨ªticas, en los ¨²ltimos a?os se han abierto aeropuertos por doquier (por ejemplo en Huesca) que en el sector consideran poco menos que un despilfarro.

En ese sentido, los controladores a¨¦reos vaticinan problemas entre la futura entidad de navegaci¨®n a¨¦rea y los aeropuertos. "Ahora se hace un esfuerzo y se llevan controladores -que no sobran, todo lo contrario- a aeropuertos nuevos como el de Huesca o el de Burgos ahora, cuya rentabilidad es inexistente", explica Rafael L¨®pez, portavoz de USCA. "Habr¨¢ que ver si se hace lo mismo en el futuro", apostilla.