Gordos y mayores, doble riesgo

El peso no es s¨®lo un problema o una obsesi¨®n de los j¨®venes. Con el paso de la edad, pesar demasiado es una carga que cada vez tiene peor soluci¨®n y consecuencias m¨¢s graves para la salud. Ocho de cada 10 mayores espa?oles supera su peso recomendado, y uno de cada tres es obeso.

Los expertos creen que debe prestarse m¨¢s atenci¨®n a la gente de m¨¢s edad

Ocurre justo en una etapa de la vida -a partir de los 60 a?os- en la que aumentan los riesgos de padecer alguna dolencia cardiovascular y es dif¨ªcil cambiar los h¨¢bitos para llevar una vida m¨¢s sana y perder peso. Hasta ahora se hab¨ªa prestado m¨¢s atenci¨®n a este problema en los menores de 45 a?os, y los expertos han lanzado la voz de alerta sobre los problemas en la poblaci¨®n mayor, cada vez m¨¢s numerosa. Diez millones de espa?oles tienen m¨¢s de 60 a?os; en 1988 eran 7,4. El problema se agudiza con la edad. Los datos apuntan a que alrededor del 15% de la poblaci¨®n espa?ola de todas edades sufre obesidad. En el caso concreto de los mayores es el doble.

En el norte de Espa?a viven m¨¢s mayores delgados que en el sur. Hay m¨¢s obesos en pueblos y en ciudades y el sobrepeso se da m¨¢s entre mujeres de 60 en adelante que entre los hombres. Son algunos de los resultados del estudio Prevalencia de sobrepeso y obesidad en poblaci¨®n espa?ola de 60 a?os o m¨¢s y factores relacionados, publicado recientemente en la revista Medicina Cl¨ªnica.

El informe dibuja un mapa de la obesidad por comunidades y por sexos a partir de los 60, con resultados similares por regiones a investigaciones anteriores en poblaci¨®n m¨¢s joven. Se considera obesa a la persona cuyo ¨ªndice de masa corporal (relaci¨®n peso-altura) es igual o superior a 30. En esa situaci¨®n, seg¨²n el estudio, se encuentran casi la mitad de los canarios mayores de 60 a?os (46,4%), seguidos de navarros, manchegos y andaluces [v¨¦ase el gr¨¢fico]. A la cola est¨¢n c¨¢ntabros, riojanos, catalanes y vascos. El porcentaje aumenta en las mujeres, con un 8,4% m¨¢s de obesas que de obesos. Pero ellas acumulan m¨¢s la grasa en gl¨²teos y piernas, un factor "que no entra?a el mismo riesgo cardiovascular que la grasa de distribuci¨®n abdominal, m¨¢s t¨ªpica del var¨®n", explica el informe.

El amplio estudio, para el que 1.200 investigadores han analizado casi 7.000 casos, es una foto fija que destaca las diferencias entre comunidades -hasta 26 puntos entre la primera, Canarias y Cantabria, la ¨²ltima- pero no analiza las causas. "Es s¨®lo el principio", seg¨²n Manuel Serrano- R¨ªos, presidente del Instituto Danone y organizador del seminario Alimentaci¨®n y salud: una visi¨®n cr¨ªtica, celebrado en la Universidad Internacional Men¨¦ndez Pelayo (UIMP) de Santander. "No exist¨ªan datos sistem¨¢ticos para estas edades; casi todos los estudios se concentran en poblaciones de 35 a 44 a?os. Ahora podremos hacer nuevas radiograf¨ªas y comparar la evoluci¨®n". El informe recalca la similitud de resultados por regiones en las que se concentran los mayores problemas con otro anterior en poblaci¨®n de 2 a 24 a?os. Apunta a "factores idiosincr¨¢sicos", como h¨¢bitos diet¨¦ticos y estilo de vida.

"Las papas arrug¨¢s, el mojo pic¨®n y el abuso de dulces en Canarias pueden tener mucho que ver", analiza Consuelo L¨®pez Nomdedeu, profesora de la Escuela Nacional de Sanidad. Tambi¨¦n alude a la abundancia del aceite de oliva en Andaluc¨ªa frente a una dieta rica en prote¨ªnas en el norte, donde se come m¨¢s pescado. S¨®lo una comunidad se sale de la tendencia norte-sur marcada en el estudio: Navarra, situada entre las m¨¢s obesas. El informe aclara que en la Comunidad Foral se analizaron menos de cien individuos en el reparto proporcional de la muestra.

Las costumbres influyen en el peso, insiste Basilio Moreno, presidente de la Fundaci¨®n de la Sociedad Espa?ola para el Estudio de la Obesidad y uno de los autores del estudio. "En el sur hace m¨¢s calor, y eso propicia el sedentarismo, sin olvidar el h¨¢bito de la siesta", explica. En las regiones del sur "existe menos educaci¨®n nutricional y es m¨¢s barato comer regular o mal que bien", a?ade Javier Aranceta, secretario de la Sociedad Espa?ola de Nutrici¨®n Comunitaria. Aranceta considera "preocupante" que la obesidad se manifieste en uno de cada tres mayores, porque "a esas edades es m¨¢s f¨¢cil cambiar de religi¨®n que de dieta". Pero Isidoro Ruip¨¦rez, ex presidente de la Asociaci¨®n Espa?ola de Geriatr¨ªa, pide un esfuerzo a cualquier edad: "Envejecer es inevitable, pero todos podemos influir en c¨®mo llegamos a viejos".