La tasa de morosidad se duplica y alcanza el nivel m¨¢s alto desde 1999
Solbes descarta que la subida plantee problemas a las entidades de cr¨¦dito
La morosidad sigue su ascenso imparable. Casi 31.220 millones de euros en pr¨¦stamos estaban en el limbo de los impagos en junio. Un 1,70% del total del dinero prestado por bancos, cajas de ahorros, cooperativas de cr¨¦dito y financieras. La cifra no parece alarmante. Pero su crecimiento es m¨¢s que llamativo: ha aumentado un 92% en s¨®lo un semestre y un 132% en comparaci¨®n con las cifras de hace justo un a?o.
Los pr¨¦stamos impagados pueden llegar al 4% a final de a?o, seg¨²n Adicae
Los morosos, aquellos que llevan m¨¢s de tres meses sin pagar la cuota de su pr¨¦stamo, han sido algo poco com¨²n en Espa?a durante casi dos lustros. En 2006 la tasa de pr¨¦stamos dudosos rondaba el 0,70%. En 2007 el 0,80%. Pero el aumento del paro y las incesantes subidas del Eur¨ªbor (tipo de referencia que marca el inter¨¦s de la mayor¨ªa de las hipotecas) han disparado la tasa de malos pagadores. Para encontrar una cifra similar al 1,70% registrado en junio hay que remontarse hasta agosto de 1999, seg¨²n datos del Banco de Espa?a.
Las entidades m¨¢s afectadas por la morosidad son las cajas de ahorros. La tasa sobrepasa en ¨¦stas el 1,90%. El triple que hace un a?o. Los resultados de diferentes cajas el primer semestre no promet¨ªan nada bueno. Caja Madrid cerr¨® junio con el 1,89% de pagos dudosos. La Caixa con el 1,26%, el triple que 12 meses antes. Los expertos apuntaron ya entonces que ser¨ªan las cajas quienes sufrir¨ªan m¨¢s la crisis del ladrillo, ya que tienen cerca del 70% de sus cr¨¦ditos conectados con el sector. Pero los bancos tampoco han sido inmunes y cierran junio con una morosidad del 1,28%, frente al 0,65% de hace un a?o.
El Ministro de Econom¨ªa, Pedro Solbes, descart¨® ayer que la subida de este indicador suponga problemas para la banca. En una entrevista con la agencia EFE asegur¨® que el sistema financiero espa?ol es suficientemente "s¨®lido" y est¨¢ dotado de las reservas necesarias para hacer frente a esta situaci¨®n.
El secretario de Econom¨ªa del Partido Popular, ?lvaro Nadal, asegur¨® ayer, sin embargo, que el dato supone un avance hacia una situaci¨®n "de riesgo".
Aunque la tasa de morosidad todav¨ªa est¨¢ lejos del m¨¢ximo registrado en 1994 (en febrero de ese a?o se super¨® el 9%), y por debajo del 2,5% que aproximadamente registra la zona euro, muchos ven en este ascenso imparable s¨®lo el principio de lo que se avecina. La Asociaci¨®n de Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros (Adicae) augura que a finales de 2008 la morosidad estar¨¢ cerca del 4%. "Antes habl¨¢bamos de crisis hipotecaria, ahora nos atrevemos a hablar de crisis subprime en Espa?a", explic¨® rotundo ayer su presidente Manuel Pardos.
"Las entidades entraron en una carrera por el mercado que les llev¨® a ofrecer pr¨¦stamos con condiciones abusivas o absurdas a los colectivos m¨¢s vulnerables, como los j¨®venes o los inmigrantes", a?adi¨® Pardos. Su asociaci¨®n pide al Gobierno la puesta en marcha de medidas legales como la Ley de Sobreendeudamiento, congelada la pasada legislatura, que ofrecer¨ªa mecanismos para ayudar a las familias con cargas excesivas.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.