"S¨®lo quiero saber que pas¨®"

A las 14.20 Gabriel Crespo mira el reloj. "Estoy a punto de cumplir un a?o". Su nueva vida empez¨® cinco minutos m¨¢s tarde el 5 de septiembre de 2007, cuando el pesquero en el que viajaba, el Nuevo Pepita Aurora, volc¨® tras un golpe de mar. "Muy mal. Muchos compa?eros estaban al lado m¨ªo.

Fue en d¨¦cimas de segundo. No me lo explico", relataba ayer en el puerto de Barbate (C¨¢diz) para intentar resumir sus sensaciones. Ocho marineros, entre ellos Crespo, lograron sobrevivir al siniestro. Otros ocho compa?eros no lo consiguieron. Sus viudas contin¨²an con demasiadas preguntas sin responder un a?o despu¨¦s.

"Que la muerte de mi marido y la de sus compa?eros no sea en balde"

"Estaba en mi casa y sent¨ª la gente bajando las escaleras del edificio. Sal¨ª a ver qu¨¦ pasaba y una vecina me pregunt¨® si iba a ver qu¨¦ hab¨ªa pasado en el puerto. Ella fue la que me lo dijo. Que el barco hab¨ªa volcado y que hab¨ªa muertos. No es forma de enterarse de que te has quedado viuda", lamenta Dolores Caravaca.

El mismo d¨ªa del siniestro fueron encontrados tres cuerpos, los de Antonio Miguel Gil, Manuel Corrales y Manuel Fern¨¢ndez. Dolores Caravaca tuvo que esperar al 19 de septiembre cuando un complicado operativo logr¨® llevar a tierra los cad¨¢veres de Manuel Alba, su marido, y el de Andr¨¦s Lucio. Ella pudo enterrar a su esposo y ser, desde aquel d¨ªa, una viuda para todos los efectos. Las mujeres de Francisco Cla, Manuel Buela y Manuel Reyes no lo han podido hacer todav¨ªa porque sus cuerpos siguen desaparecidos.

"A m¨ª me han dado 28.000 euros. Los he puesto en manos de un abogado para que me saque el caso adelante. No quiero un duro, s¨®lo saber lo que le pas¨® a mi marido", confiesa emocionada Dolores Caravaca. Ante el juez, su letrado ya ha solicitado que una instituci¨®n independiente complemente el informe realizado por el Ministerio de Fomento.

Las viudas dudan de la investigaci¨®n gubernamental porque no ha encontrado fallos estructurales en el barco, su principal teor¨ªa. Piensan que el dise?o del Nuevo Pepita Aurora, similar a otros barcos siniestrados en Galicia, fue fundamental para favorecer el vuelco del barco. Por eso reclaman que el pesquero, hundido a 136 metros frente a la costa de Tarifa, salga a flote. "Es la prueba del crimen", argumenta la viuda de Manuel Alba. "Quiero que la muerte de mi marido y la de sus compa?eros no sea en balde. A mi marido no lo voy a recuperar pero hay mucha gente cruzando el Estrecho". Un funeral y una ofrenda floral sirvieron ayer en Barbate para recordar a los fallecidos y desaparecidos.

Para Gabriel Crespo, de 29 a?os, el 5 de septiembre ser¨¢ ya para siempre un d¨ªa especial, de ¨¦sos que en los que el est¨®mago aprieta durante toda la jornada con lo que ¨¦l llama un "pellizco muy fuerte". Se salv¨®. Era el ¨²nico que llevaba el chaleco salvavidas. Se lo puso despu¨¦s de los fuertes vaivenes que daba el pesquero con el temporal. Sus compa?eros se re¨ªan de ¨¦l por eso. "La bodega estaba bien. No hab¨ªa cedido nada ni se hab¨ªa movido la carga y, de repente, volcamos. Uno se tir¨® al agua, otro ya se hab¨ªa matado. Eso es para vivirlo", y decide callarse en ese momento.

Viajaba con su hermano, Jos¨¦, de 47 a?os, quien tambi¨¦n sobrevivi¨®. "Yo no s¨¦ nadar", reconoce. "No s¨¦ c¨®mo sal¨ª pero la cosa es que estoy aqu¨ª y puedo contarlo". Su hermano Gabriel retoma su relato. "No estoy bien. Me despierto muchas noches. Me acuesto y me levanto. Tengo pesadillas. La parienta me dice que grito mientras duermo. Estoy mal". Ninguno regresar¨¢ a la mar. S¨®lo ha vuelto a faenar un superviviente, Pedro Fernando Romera. No le ha quedado m¨¢s remedio. "Me falta medio a?o para cotizar lo suficiente y que me pueda prejubilar con el total de la paga", explica. Cuando lo consiga no cobrar¨¢ m¨¢s de 700 euros. "Despu¨¦s de todo lo que he pasado, es una miseria, pero es lo que tengo", se queja.

En los d¨ªas posteriores a la tragedia uno de los compromisos m¨¢s firmes fue la recolocaci¨®n de los supervivientes en tierra. Las administraciones mediaron y alguna empresa ha anunciado que cuenta con ellos. Pero un a?o despu¨¦s s¨®lo Pedro Fernando Romera est¨¢ trabajando. Y adem¨¢s en un barco. "No queremos que se hagan m¨¢s barcos de ¨¦stos porque se va a seguir ahogando gente", exige Jos¨¦ Crespo. Cuando terminan de recordar ya pasan de las 14:30. Ya est¨¢n en el primer a?o de su nueva vida.