A Rossi le basta con subir al podio para ser campe¨®n

Un pasito es lo que separa a Valentino Rossi de la reconquista de la corona m¨¢s prestigiosa del Mundial: si el italiano se sube al podio ma?ana (7.00, TVE) en Motegi, autom¨¢ticamente recuperar¨¢ el t¨ªtulo de MotoGP dos a?os despu¨¦s de perderlo. Si completa la haza?a, su temporada habr¨¢ sido de nota. Por un lado, porque el nivel de competencia del certamen est¨¢ muy por encima del que hab¨ªa hace unos a?os; y, por el otro, porque tiene 29 a?os. Ser¨ªa el octavo t¨ªtulo para Rossi, el sexto en MotoGP y el que le devolver¨ªa el cr¨¦dito que perdi¨® el a?o pasado, cuando Casey Stoner le vapule¨®, a ¨¦l y al resto, una y otra vez.

Desde entonces, el panorama ha cambiado mucho. Rossi cuenta ahora con los mismos neum¨¢ticos que el australiano, los Bridgestone, que le han permitido llevar su moto a un nivel incluso superior al de la Ducati. Yamaha, por su parte, se pas¨® toda la temporada pasada aguantando los bocinazos de su piloto estrella, que le exig¨ªa una reacci¨®n para poder plantar cara a Stoner. Los gritos acabaron por surtir efecto, al extremo que la M1 es a d¨ªa de hoy la m¨¢quina m¨¢s equilibrada de la parrilla. Es potente a la vez que manejable, dos prestaciones muy a tener en cuenta en Motegi, un trazado que cuenta con frenadas, ¨¢ngulos y tremendas aceleraciones.

El alir¨®n de Il Dottore en la pista japonesa ser¨ªa dram¨¢tico para Honda, propietaria de la instalaci¨®n, circunstancia que a¨²n motiva m¨¢s a Rossi, que no gana aqu¨ª desde 2001 y sigue en su empe?o de demostrar que puede que Honda cometiera un error hace cinco a?os, cuando le abri¨® las puertas para que se marchara. Con Honda consigui¨® tres t¨ªtulos mientras que con Yamaha tiene dos. Aunque del tercero no le separa nada; s¨®lo un pasito.