"Hubo una contestaci¨®n social como nunca antes"

"Fueron meses de manifestaciones y una contestaci¨®n social contra un acto administrativo como no se hab¨ªa producido antes". As¨ª recuerda el concejal socialista, Manuel Garc¨ªa Hierro, la guerra de los parqu¨ªmetros que a principios de 2006 llev¨® a su grupo municipal a plantear ante los tribunales el recurso que ahora ha tenido fallo judicial.

El activismo de barrio comenz¨® en Fuencarral-El Pardo donde se convirti¨® en cita obligatoria durante semanas el acudir a las siete de la tarde a la esquina entre las calles de Sangenjo y Narc¨ªs Monturiol, para cortar luego el tr¨¢fico que iba a parar a la avenida de la Ilustraci¨®n.

Muy pronto este barrio del norte de la capital tuvo su l¨ªder. Jes¨²s Otero, de 73 a?os, que hoy est¨¢ condenado por la Audiencia Nacional a un a?o de c¨¢rcel y 4.000 euros de indemnizaci¨®n a la empresa concesionaria precisamente por romper un parqu¨ªmetro, uno de los m¨¦todos de protesta m¨¢s extendidos. Otero es incluso autor de un libro sobre el asunto: La guerra de los parqu¨ªmetros. Desde mi pac¨ªfica frontera.

Pronto las manifestaciones se extendieron por Hortaleza y Carabanchel. En este ¨²ltimo distrito se hicieron a¨²n m¨¢s virulentas, y hoy es all¨ª m¨¢s dif¨ªcil encontrar un parqu¨ªmetro que funcione que uno inutilizado.

Un a?o despu¨¦s de la llegada del SER se hab¨ªan formado 12 colectivos antiparqu¨ªmetros, que convocaron cientos de manifestaciones. Tienen hasta su propia mascota: Ruiz-Vampir¨®n, un gigante con la cara del alcalde y vestimenta de chupasangres.