EE UU da un giro radical a su plan de rescate para seguir el modelo europeo

Obligado por la crisis a una intervenci¨®n p¨²blica hist¨®rica, el Gobierno de Estados Unidos comprar¨¢ 250.000 millones de d¨®lares (m¨¢s de 182.000 millones de euros) en acciones preferentes sin derecho a voto de los bancos privados para fortalecer el capital del sector bancario privado e incrementar el cr¨¦dito hacia las empresas y consumidores.

"Estamos tomando pasos decisivos para proteger la econom¨ªa", afirm¨® el secretario del Tesoro, Henry Paulson, durante el anuncio de la parcial nacionalizaci¨®n, consecuencia del descalabro de Wall Street durante la crisis de las hipotecas. Los 250.000 millones forman parte de los 700.000 millones de d¨®lares aprobados por el Congreso en la mayor operaci¨®n de salvamento desde la Gran Depresi¨®n de 1929.

La prioridad inicial del Gobierno era la compra de la deuda t¨®xica de los bancos para sanear sus balances, pero al final ha optado por comenzar con la compra de acciones para desbloquear el cr¨¦dito y acotar los tipos de inter¨¦s. El Estado, a trav¨¦s de la Corporaci¨®n Federal de Garant¨ªa de Dep¨®sitos, tambi¨¦n avalar¨¢ las nuevas emisiones de deuda de los bancos, de modo que EE UU da un giro radical y aplica las dos principales medidas que han tomado los grandes Gobiernos europeos siguiendo el modelo brit¨¢nico. Sin embargo, en EE UU las autoridades no entrar¨¢n en el consejo de administraci¨®n ni, por lo tanto, podr¨¢n relevar a los gestores de las entidades ni condicionar el pago de dividendos, como ha sucedido en los bancos brit¨¢nicos.

No todos los bancos aceptaron de buen grado la compra de parte de sus acciones por la Administraci¨®n al considerar inconveniente su creciente penetraci¨®n en las cuentas y balances del sector privado. No obstante, debieron ceder ante las presiones de los negociadores gubernamentales, seg¨²n el diario The Wall Street Journal.

La meta de la Casa Blanca es que los grandes bancos act¨²en de locomotoras y que los bancos agobiados por sus activos desvalorizados dispongan de fondos suficientes y agilicen la concesi¨®n de pr¨¦stamos a particulares, empresas y administraciones locales. El Gobierno comprar¨¢ 125.000 millones de d¨®lares en acciones de las principales instituciones financieras, entre ellas J.P.Morgan Chase, Bank of America, Citigroup, Wells Fargo, Bank of New York Mellon, Morgan Stanley, Merrill Lynch, State Street y Goldman Sachs. El resto del dinero, hasta los 250.000 millones, desembarcar¨¢ en cientos de bancos menores.

"Una amplia gama de instituciones financieras puede participar en este programa vendiendo acciones al Gobierno en t¨¦rminos atractivos para proteger al contribuyente", dijo Paulson, art¨ªfice de la operaci¨®n. La p¨¦rdida de confianza de los inversores en el sistema financiero de EE UU, cuya onda expansiva sacudi¨® los mercados globales y castiga al conjunto de la econom¨ªa nacional, es la raz¨®n fundamental de la ofensiva oficial en curso, a la que ayer se sumaron, de nuevo, George W. Bush y el presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke. Los dos instaron a confiar en las nuevas herramientas.

El discurso de Paulson fue ayer patri¨®tico y optimista, abundante en invocaciones a la hist¨®rica capacidad de EE UU para afrontar crisis: "Somos fuertes y siempre hemos superado las dificultades. Esta vez no ser¨¢ diferente". El alto funcionario reconoci¨® que los inversores no quieren prestar a los bancos, y los bancos m¨¢s saneados no quieren prestarse entre ellos, ni tampoco a los consumidores. El plan garantiza los pr¨¦stamos durante tres a?os.