Chac¨®n afirma que las casas de Figueirido no se tocar¨¢n

La pol¨¦mica en torno a la ampliaci¨®n del per¨ªmetro de seguridad de la base militar General Morillo establecida en Figueirido (Pontevedra) lleg¨® ayer hasta el Congreso. La nacionalista Olaia Fern¨¢ndez traslad¨® la cuesti¨®n a la ministra de Defensa, Carme Chac¨®n, que asegur¨® que las casas existentes en esa franja de 300 metros no se derribar¨¢n, ni tampoco se impedir¨¢ llevar a cabo obras de conservaci¨®n, siempre y cuando el ministerio lo autorice.

Chac¨®n inform¨® que los ayuntamientos (Pontevedra, Vilaboa y Mar¨ªn) conoc¨ªan de antemano esta situaci¨®n ya que Defensa les solicit¨® informes urban¨ªsticos de las zonas afectadas. Afirmaci¨®n que se contrapone con lo dicho por los representantes municipales, molestos por no haber sido informados previamente. Ayer la corporaci¨®n de Vilaboa debati¨® en pleno una moci¨®n del BNG en contra de esta disposici¨®n despu¨¦s de que esta formaci¨®n recopilase un centenar de firmas de vecinos.

La titular de Defensa aclar¨® que se podr¨¢n conceder incluso permisos para uso agr¨ªcola o la instalaci¨®n provisional de casetas. La ministra asegura que las franjas de seguridad que rodean las instalaciones militares son indispensables para garantizar "el aislamiento necesario y la defensa inmediata", un concepto que no cuaja entre los titulares del centenar de viviendas afectadas por ese per¨ªmetro y que, a partir de ahora, se ver¨¢n obligados a multiplicar los tr¨¢mites si quieren mover una piedra.