Contin¨²a la tendencia a la baja

Los mercados de valores contin¨²an inmersos en plena tendencia a la baja acosados por los problemas del sector financiero, en particular, y por la recesi¨®n econ¨®mica, en general.

El Ibex 35 ha terminado esta semana con un descenso del 5,19% que, no obstante, le permite conservar los 8.100 puntos, tras perder en algunos momentos el nivel de los 8.000.

Los numerosos problemas de algunos grandes bancos, con importantes p¨¦rdidas en el tramo final del ejercicio, han marcado la pauta a los inversores en estos ¨²ltimos d¨ªas. Las p¨¦rdidas que anunciaba Royal Bank of Scotland, de m¨¢s de 30.000 millones de euros en el conjunto del pasado ejercicio, hicieron caer su cotizaci¨®n el 66,57% y arrastraron al conjunto del sector, tanto en el Reino Unido como en el resto de Europa.

Para colmo de males, la revisi¨®n a la baja de la calificaci¨®n crediticia de Espa?a provoc¨® un peque?o cataclismo interno, ya que la mayor prima de riesgo que se exigir¨¢ a partir de ahora a las sociedades espa?olas hizo subir las rentabilidades en los mercados secundarios de renta fija, con la consiguiente ca¨ªda de los precios. El deterioro de las carteras de valores de bancos y entidades aseguradoras tambi¨¦n pas¨® factura, destacando Mapfre en la Bolsa espa?ola, al perder m¨¢s del 10% en una sola sesi¨®n.

Los anuncios de ¨²ltima hora de nuevos problemas en la gran banca internacional han hecho aumentar considerablemente la desconfianza hacia el sector por parte de los inversores, que han colocado papel en los mercados de forma continua.

Los valores bancarios espa?oles no han podido sustraerse a esa corriente vendedora, a pesar de que, hasta ahora, los resultados publicados han cumplido las previsiones. Los resultados del ¨²ltimo trimestre todav¨ªa ser¨¢n buenos o, al menos, estables, pero a partir de ahora habr¨¢ dificultades para superar los datos de 2008 y eso es lo que est¨¢n descontando los inversores. De hecho, los tres grandes bancos espa?oles, Santander, BBVA y Popular, registraron niveles m¨ªnimos anuales en la sesi¨®n del mi¨¦rcoles cuando, aparentemente, ya hab¨ªa pasado la tormenta provocada por los resultados de Royal Bank of Scotland.

El ambiente en los mercados tambi¨¦n estuvo pendiente del nuevo presidente de Estados Unidos, aunque los inversores no hicieron concesiones gratuitas a la espera del nuevo plan de reactivaci¨®n econ¨®mica, con 275.000 millones de d¨®lares en incentivos fiscales y el resto, hasta m¨¢s de 800.000 millones, destinado a actividades generadoras de mano de obra inmediata. El problema es que esa inmediatez no ser¨¢ la que desean los inversores, impacientes por ver llegar el momento en que la econom¨ªa estadounidense toque fondo, para poder sacar conclusiones sobre la siguiente parte del proceso, al menos por lo que se refiere a la situaci¨®n econ¨®mica global.