Sacar partido a los Sue?os

Cada noche traspasamos los bastidores de nuestra conciencia para adentrarnos en un mundo oculto que se encuentra dentro de nosotros. Un lugar donde la l¨®gica se esfuma y nos sumergimos dentro de las vivencias m¨¢s surrealistas: somos capaces de volar, andar flotando, saltar los escalones de tres en tres; las personas con las que estamos de repente se transforman en otras; abrimos una puerta de nuestra casa y nos encontramos en alg¨²n terreno totalmente desconocido; los animales nos hablan; los seres queridos que ya han fallecido vuelven a estar con nosotros? Un mundo en el que todo, absolutamente todo, es posible.

Artemidoro de Daldis visit¨® rec¨®nditos lugares recopilando sue?os. Lleg¨® a reunir m¨¢s de 3.000. En esa ¨¦poca (siglo?II despu¨¦s de Cristo), los sue?os eran tenidos por mensajes cifrados de los dioses en los cuales se manifestaba el futuro. Artemidoro logr¨® romper con esa consolidada visi¨®n y contempl¨® los sue?os como algo totalmente humano, un fen¨®meno natural repleto de s¨ªmbolos que se pueden interpretar y nos hablan de nuestras vidas.

"Recordar e interpretar nuestros sue?os nos puede ayudar a cazar las ideas creativas que habitan dentro"

"Aprender t¨¦cnicas para manipular los sue?os sirve para acabar con las pesadillas o para algo tan importante como disfrutar"

Sigmund Freud, el patriarca de las teor¨ªas modernas de interpretaci¨®n de los sue?os, al igual que su predecesor griego, contemplaba los sue?os como libros escritos por nuestro inconsciente con s¨ªmbolos casi cr¨ªpticos. Seg¨²n el padre del psicoan¨¢lisis, lo que so?amos significa lo que de un modo secreto deseamos vivir opuesto al modo al que estamos viviendo. As¨ª, los sue?os los concibe llenos de deseos normalmente sexuales o agresivos inaceptables por nosotros mismos.

Actualmente, una de las concepciones m¨¢s investigadas es la hip¨®tesis de la continuidad, una teor¨ªa donde los sue?os simplemente son la continuaci¨®n de nuestra vida diurna. Nuestras preocupaciones, vivencias y fantas¨ªas diurnas siguen expres¨¢ndose, pero de otro modo, en los sue?os. Las teor¨ªas son numerosas, pero si vamos al terreno de lo pr¨¢ctico, la pregunta crucial es: ?c¨®mo podemos sacarles partido?

Interpretar los sue?os

"Los sue?os son int¨¦rpretes fieles de nuestras inclinaciones, pero se necesita arte para ordenarlos y comprenderlos" (M. de Montaigne)

La principal funci¨®n de interpretar nuestros sue?os es conocernos mejor. Existen muchos libros, reediciones o imitaciones de los "libros de los sue?os" con ra¨ªces en las creencias supersticiosas de los antiguos en donde, por ejemplo, si uno sue?a con un gato negro significa buena o mala suerte. No hagamos caso de esa especie de diccionarios. Cada uno de los s¨ªmbolos que aparecen en nuestros sue?os son totalmente individuales, un terapeuta nos puede ayudar a interpretarlos formul¨¢ndonos preguntas, pero s¨®lo nosotros podemos llegar a dilucidar lo que significan.

Para interpretarlos, primero hay que recordar todos los detalles, incluso los que nos parecen poco relevantes. Despu¨¦s analizar qu¨¦ emociones nos ha producido el sue?o y preguntarnos en qu¨¦ situaciones de la vida diurna solemos experimentarlas. Igual de esencial es asociar nuestros sue?os a todos los recuerdos, experiencias actuales o pensamientos. Asociar es la clave, porque en algunos casos eso nos llevar¨¢ a saber el porqu¨¦ de nuestro sue?o. Muchas investigaciones demuestran que las personas que realizan esta pr¨¢ctica no s¨®lo manifiestan entenderse cada vez m¨¢s a s¨ª mismas, sino que este conocimiento les motiva a introducir cambios en su vida.

Interpretar los sue?os nos puede servir para conocernos mejor, pero tambi¨¦n para ser m¨¢s creativos. Existen muchas an¨¦cdotas de investigadores que han llegado a su descubrimiento a trav¨¦s de los sue?os. Por ejemplo, el qu¨ªmico alem¨¢n F.?A. Kekul¨¦ dedic¨® una parte de su vida a descubrir cu¨¢l era la estructura del benceno, y un d¨ªa tuvo un sue?o con una serpiente que se mord¨ªa la cola. Kekul¨¦ descubri¨® que la estructura del benceno era circular, un anillo. Recordar e interpretar nuestros sue?os nos puede ayudar a cazar las ideas creativas que habitan dentro.

Para promover que en nuestros sue?os aparezcan ideas creativas que nos ayuden a solucionar nuestros problemas existe una t¨¦cnica que se denomina incubaci¨®n. Consiste en escribir en una l¨ªnea una pregunta o petici¨®n de algo que creemos importante saber para solucionar un problema. No un deseo, sino una informaci¨®n que necesitamos: "ay¨²dame a entender por qu¨¦ mi amigo?", "dame una idea para el proyecto?". Una vez escrita, repetir la frase, no de una forma autom¨¢tica, sino centr¨¢ndonos en el significado, de cinco a diez minutos antes de ir a dormir. Y al despertar, intentar recordar nuestro sue?o.

?Interpretar nuestros sue?os nos podr¨ªa ayudar a predecir el futuro? Aqu¨ª entramos en un terreno resbaladizo, es la cuesti¨®n de si existen o no sue?os premonitorios. Muchas personas afirman haberlos tenido, pero no existen estudios rigurosos que lo confirmen. Sin embargo, el efecto Poeltz podr¨ªa explicar desde la ¨®ptica de la psicolog¨ªa y no de la parapsicolog¨ªa el porqu¨¦ a veces nuestros sue?os pueden anticipar acontecimientos. A lo largo del d¨ªa, nuestro cerebro capta much¨ªsima informaci¨®n, mucha m¨¢s de la que somos conscientes. A veces ocurre que informaci¨®n que ha captado nuestro cerebro de forma subliminal o acontecimientos totalmente irrelevantes a los que casi no hemos prestado atenci¨®n aparecen en nuestros sue?os.

Imaginemos que mientras estamos leyendo estas l¨ªneas tenemos la televisi¨®n conectada y en estos momentos est¨¢n emitiendo un anuncio de colonia al que no prestamos atenci¨®n. Pues podr¨ªa pasar que esta colonia apareciera en nuestros sue?os. Esto es el efecto Poeltz. Si esta noche so?¨¢ramos que sacamos a pasear al perro y se rompe la cadena, y al d¨ªa siguiente nos pasara en la vida real, lo podr¨ªamos interpretar a trav¨¦s de este efecto, quiz¨¢ nosotros ya hubi¨¦ramos advertido de forma inconsciente que la correa ten¨ªa alguna parte da?ada.

A veces ocurre que mientras estamos dentro de nuestro sue?o ?somos conscientes de que estamos so?ando! A este fen¨®meno se le denomina sue?o l¨²cido. Hay personas que nunca han vivido esta experiencia, pero muchas dicen haberla experimentado al menos una vez en su vida.

Saber que estamos dentro de un sue?o es el primer paso para manipularlo. Para conseguir mientras so?amos ser conscientes de que estamos en un sue?o se emplea una t¨¦cnica denominada "chequeo de la realidad": a lo largo del d¨ªa nos iremos preguntando frecuentemente: ?estoy so?ando? Y comprobarlo. Suena raro, porque mientras estamos despiertos es obvio que sabemos que estamos despiertos, pero si nos lo preguntamos a menudo, al final nos lo preguntaremos cuando estemos dentro del sue?o y entonces s¨ª que podremos ver que estamos so?ando. Un ejemplo: intentemos a lo largo del d¨ªa mirar al reloj con frecuencia y cada vez que lo miremos intentemos mentalmente mover las agujas del reloj, con toda nuestra fuerza mental, con toda nuestra concentraci¨®n; cuando logremos mover las manecillas del reloj con nuestro poder mental ?es que estamos so?ando!

Manipular los sue?os

So?aba el ciego que ve¨ªa, y?so?aba lo que quer¨ªa" (refr¨¢n)

Existen otras t¨¦cnicas que se emplean para promover esa consciencia dentro del mundo on¨ªrico. Una de ellas es la denominada WILD (wake induced lucid dream; en espa?ol: sue?o l¨²cido inducido en la vigilia). Esta estrategia debe aplicarse cuando nos vamos a dormir. El primer paso consiste en relajarnos; se puede emplear cualquier t¨¦cnica de relajaci¨®n que conozcamos, por ejemplo, ir tensando y destensando diferentes partes del cuerpo mientras respiramos pausadamente, empezando por los pies hasta la cabeza. O simplemente respirar lenta y profundamente mientras visualizamos un paisaje agradable. Una vez relajados, el siguiente paso consiste en prestar atenci¨®n a las im¨¢genes que se presentan en nuestra conciencia; a veces, en este estado nos aparecen puntos, rayas o cualquier tipo de im¨¢genes. Si vamos prestando atenci¨®n a estas im¨¢genes, pueden ir transform¨¢ndose en escenas completas. Y aqu¨ª ya estamos entrando en el mundo on¨ªrico a la vez que nos damos cuenta de ello. A veces no se nos aparecen este tipo de im¨¢genes; en este caso, podemos ir contando mientras nos quedamos dormidos. Podemos contar hasta cien y cuando lleguemos a este n¨²mero nos decimos: "estoy so?ando", y verificamos si realmente lo estamos o no. Si no nos encontramos en el sue?o, vamos repitiendo el conteo.

Otra manera consiste, simplemente, en fijarnos en nuestra respiraci¨®n constantemente hasta que entremos en el sue?o. Esto es, se trata de mantener la conciencia fija en algo (los n¨²meros, la respiraci¨®n?) mientras el resto de nosotros se va quedando dormido. Es como mantenernos parcialmente despiertos. No se trata de obsesionarnos, sino de practicarlo a diario con tranquilidad hasta que por fin lo consigamos.

Una cosa es experimentar sue?os l¨²cidos y otra distinta es cambiar el argumento de nuestros sue?os a nuestro antojo. A veces podemos ser muy conscientes de que so?amos, pero queremos cambiar el argumento y nos resulta imposible. Aqu¨ª tambi¨¦n se trata de practicar, empezando por lo m¨¢s f¨¢cil; por ejemplo, es m¨¢s viable cambiar nuestra conducta en el sue?o que modificar el escenario.

?Para qu¨¦ puede servir manipular nuestros sue?os? Si tenemos pesadillas, para acabar con ellas. Y so?ar lo que queramos puede servir para algo muy importante en nuestras vidas: ?disfrutar! Uno de los sue?os preferidos por la gente que logra manipularlos es el de volar. No hay nada igual a la sensaci¨®n de volar por los paisajes m¨¢s bellos que podamos imaginar, sintiendo el aire y esa descomunal libertad.