La cruda vuelta a la realidad de los ni?os de 'Slumdog millionaire'
Rubina y Azharuddin rodar¨¢n otra pel¨ªcula, pero su m¨ªsera vida no ha cambiado
Pasar del Sunset Boulevard de Los ?ngeles a un suburbio de Bombay no es f¨¢cil, y menos a¨²n si uno es un ni?o. As¨ª lo han comprobado los protagonistas de Slumdog millionaire, mundialmente conocidos y considerados casi h¨¦roes en India tras los ocho oscars logrados por el filme, a su regreso de Hollywood. Rubina Ali, de nueve a?os, que interpreta a Latika de ni?a y Azharuddin Ismail, de 10 a?os, que act¨²a como Salim, volver¨¢n a la gran pantalla en una producci¨®n de Bollywood. Ambos han sido contratados para trabajar en Kal kissne dekha (?Qui¨¦n ha visto el ma?ana?) del productor Vasu Bhagnani, seg¨²n inform¨® ayer la agencia de noticias india, PTI. Ya se han comenzado a grabar unas escenas en las que los ni?os aparecen en un aeropuerto indio rodeados de cientos de personas, tal como fueron recibidos tras la ceremonia de los Oscar.
Dos de los peque?os participar¨¢n en una producci¨®n de Bollywood
Pero su entrada en Bollywood ha sido una de las pocas alegr¨ªas para los cr¨ªos desde que volvieron de Los ?ngeles. "Por haber dado orgullo a la naci¨®n", el Gobierno nacional prometi¨® la semana pasada conceder casas a estos dos peque?os chabolistas en Bombay. Pero hasta ahora no se ha vuelto a o¨ªr nada y los chicos siguen viviendo en p¨¦simas condiciones. "Nos han dicho que el Gobierno tiene planes de realojarlos, pero no hemos tenido ninguna noticia al respecto", asegur¨® la madre de Azharuddin. La familia espera la vivienda con especial ansia porque el futuro de su chabola es incierto, ya que corre el riesgo de ser demolida en los pr¨®ximos d¨ªas por no estar en un asentamiento legal, seg¨²n representantes del Gobierno.
Las barriadas en Bombay est¨¢n formadas por todo tipo de alojamientos: desde las bien construidas con tabique y cemento hasta las m¨¢s precarias de pl¨¢sticos, l¨¢minas de metal o cart¨®n. El elemento com¨²n es que se han establecido en terrenos prohibidos por lo que, adem¨¢s de no tener ning¨²n servicio, se encuentran bajo la continua amenaza de la picota. Hace tres meses, la chabola de Azharuddin fue demolida pero, como el resto de sus vecinos, la volvieron a levantar con chapas viejas y pl¨¢sticos.
Pero pasar de un hotel de lujo a una chabola no ha sido el ¨²nico problema del ni?o a su regreso a India. Tambi¨¦n ha sufrido otros, el m¨¢s grave, una paliza que le dio su padre. Ismail Mohamed, que comercializa chatarra y madera, alcoh¨®lico y enfermo de tuberculosis, golpe¨® al peque?o, al d¨ªa siguiente de su regreso de Hollywood, poriodistas que lo esperaban a la puerta de la chabola. "Estaba tan confundido y estresado por el regreso de mi hijo a casa que perd¨ª el control. Lo quiero mucho y estoy muy contento de tenerlo aqu¨ª", se disculp¨® p¨²blicamente. El chico tambi¨¦n ha tenido fiebre y v¨®mitos que le han impedido ir a la escuela varios d¨ªas.
El ¨¦xito de Slumdog millionaire y la fama de estos cr¨ªos tambi¨¦n ha tenido repercusiones m¨¢s agradables. La ONG ActionAid ha comenzado a denominar "el efecto Slumdog" al creciente inter¨¦s de los brit¨¢nicos por apadrinar a ni?os pobres de India. Antes, la ONG recib¨ªa unas 500 solicitudes de informaci¨®n por semana y, tras el ¨¦xito del filme casi se han triplicado, seg¨²n sus responsables. La ONG aprovecha para denunciar que la mitad de los ni?os indios padecen una mala nutrici¨®n y que millones de ellos viven en las calles y son obligados a trabajar m¨¢s de diez horas diarias.
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