Ocho meses sin ver la tele

"Me queda por probar una cosa. A ver si un fin de semana pongo la antena mirando para Santiago. A lo mejor voy y tengo suerte". Manolo Garc¨ªa, con casa en la falda del Monte do P¨¢ramo, entre las aldeas de Francos y Outeiro de Pena, es uno de los 2.500 vecinos del municipio de Paradela que no pueden ver la televisi¨®n desde hace ocho meses. El d¨ªa que dejaron de recibir la se?al coincidi¨® con el del estreno, el pasado verano, del Parque E¨®lico Serra do P¨¢ramo, uno de los ¨²ltimos que se inauguraron en Galicia, y de los ¨²ltimos que le dio tiempo a autorizar a la Xunta de Fraga dos d¨ªas antes de las elecciones de 2005.

Los diez aerogeneradores de 2.000 kilowatios de potencia y 105 metros de altura, con rotores de 90 de di¨¢metro, se levantaron en lo alto de la monta?a, cercando los repetidores. Ahora, cuando funcionan los molinos, que seg¨²n los afectados "es casi todo el tiempo", las cadenas no se ven, o no se oyen, o se instala una banda gris, ancha y persistente en el centro de la pantalla que aqu¨ª todos conocen como "a franxa". Cuando aparece la franja, el aparato emite un sonido que reproduce en alta fidelidad el ritmo de las aspas.

Los vecinos se graban mutuamente sus programas favoritos

El televisor emite el sonido de las aspas de los aerogeneradores

El fen¨®meno paranormal se repite en domicilios de O P¨¢ramo, Sarria, L¨¢ncara e incluso Lugo. Hay vecinos que s¨ª y hay vecinos que no, dependiendo de cu¨¢les sean los repetidores de referencia de la antena de casa. Y cada televisor es un mundo. Hay personas que viven puerta con puerta y logran coger diferentes emisoras. Si se llevan bien, se complementan. Ven la tele en una casa o en la otra, o se graban mutuamente los programas favoritos. En Francos hay quien no coge ni por asomo Tele5, quien no ve la Primera y quien solamente "en los d¨ªas serenos" logra atisbar la gallega.

En general, no se ve casi nada y la mayor¨ªa de los afectados se han acostumbrado a utilizar nada m¨¢s que dos botones del mando a distancia. Ni siquiera la compra de receptores de Televisi¨®n Digital Terrestre han venido a solucionar nada, pese a que el de O P¨¢ramo es el repetidor central de TDT para toda la provincia de Lugo. "A m¨ª ahora es lo que m¨¢s me falla, mucho m¨¢s que la anal¨®gica", se queja Manolo, "la voz va y viene a cada vuelta de aspa". Este vecino fue uno de los primeros en dirigirse al consistorio buscando una explicaci¨®n. Pero en las aldeas paradelenses de Francos, Outeiro de Pena, Ferreiros, Laxe, Cortes, Castrelo y Guimar¨¢s hay muchos perjudicados que ni se plantean protestar. "Aqu¨ª la mayor¨ªa son gente mayor que no dice nada", explica Garc¨ªa, "si pueden ver una cadena, se quedan contentos y ya no piden m¨¢s". Tambi¨¦n les falla desde el principio la telefon¨ªa rural de acceso celular (TRAC), pero coincide que este sistema anal¨®gico est¨¢ a punto de apagarse y ya no importa.

Isabel L¨®pez, como otros vecinos olvidados por las ondas hertzianas, ya se ha gastado m¨¢s de mil euros en adaptar la antena. Dice que no lo hace por ella ni por su marido, sino porque tiene ni?os: "Para nosotros, ver la tele es un lujo". Al antenista lo ha llamado varias veces. Le ha puesto amplificadores y ahora va a probar con otros "aparellos", aunque el profesional ya les ha adelantado que "no hay garant¨ªa de que vayan a funcionar".

Y lo peor, para los vecinos de Paradela, es que, siendo de los m¨¢s perjudicados por la instalaci¨®n de los aerogeneradores, no perciben nada a cambio porque no hay metro cuadrado del parque e¨®lico que caiga sobre sus tierras. Las parroquias de San Xo¨¢n de Friolfe, en O P¨¢ramo, o de San Miguel de Goi¨¢n, en Sarria, no ven bien la tele, pero al menos cobran, porque son propietarias de esa cumbre en la que se clavaron los postes repetidores primero y los gigantes fustes e¨®licos despu¨¦s.

Los alcaldes de los municipios afectados llevan meses pidiendo una soluci¨®n a Virandel, la adjudicataria del parque, pero ¨¦sta, explica el regidor de Paradela, Jos¨¦ Manuel Mato, "echa la culpa a la empresa de telecomunicaciones Retegal". "Hay ah¨ª una disputa", revela Mato: "Virandel asegura que la fuerza real de la se?al no es la que le comunicaron cuando estaban proyectando el parque". "Hace unos seis meses que empezamos a reclamar, y lo ¨²ltimo que supimos fue que los de los postes de la tele y los de los molinos de viento estaban negociando", sigue el alcalde del PP. "Yo llegu¨¦ a hablar con el responsable de Virandel en Madrid, pero hace meses que ya nadie nos dice nada", se lamenta. "Y por la parte pol¨ªtica, m¨¢s de lo mismo: la delegaci¨®n de Innovaci¨®n e Industria en Lugo es un desastre. Incluso antes del 1-M, el delegado ya estaba desaparecido en combate". Claro que "este tema s¨®lo lo puede solucionar el Gobierno central", opina el regidor: "Es Madrid quien tiene la obligaci¨®n de garantizar la se?al. Porque es un derecho que tenemos todos los ciudadanos".