EE UU limpiar¨¢ la banca con otro bill¨®n de d¨®lares
El Tesoro comprar¨¢ activos 't¨®xicos' con inversores privados que acudan a subastas
El Departamento del Tesoro de EE UU present¨® ayer los detalles de su plan para limpiar, con la ayuda del sector privado, los balances de los bancos contaminados por las hipotecas basura y otros t¨ªtulos vinculados a deuda de mala calidad. Se trata de movilizar hasta un bill¨®n de d¨®lares (unos 735.000 millones de euros) para la compra de activos t¨®xicos y conseguir as¨ª que vuelva a fluir el cr¨¦dito y escapar de la recesi¨®n. El plan fue recibido con algarab¨ªa por Wall Street, aunque faltan muchos detalles por aclarar y los esc¨¦pticos manifiestan dudas sobre si realmente funcionar¨¢.
Tras una reuni¨®n con su equipo econ¨®mico, el presidente Obama se mostr¨® "muy confiado" en que el plan permitir¨¢ descongelar los mercados crediticios, aunque admiti¨® que a¨²n queda "mucho camino que recorrer y mucho trabajo por hacer".
Wall Street recibe la nueva iniciativa con una subida de casi el 7%
El plan conf¨ªa en los denostados fondos especulativos y en el capital riesgo
El Tesoro procede, en s¨ªntesis, a limpiar los activos que merman los resultados de los bancos, los mismos que est¨¢n en el coraz¨®n de esta crisis. Y lo hace sin tener que tomar el control de las entidades contaminadas, huyendo as¨ª del camino de la nacionalizaci¨®n que se ha visto obligado a recorrer en parte. Geithner recurre a la participaci¨®n de inversores privados para que se fije el precio de los activos t¨®xicos mediante subasta y facilita a esos inversores una generosa financiaci¨®n para que participen en el programa. De alg¨²n modo, la avaricia (de los potenciales inversores) y el apalancamiento (esta vez con fondos p¨²blicos), demonizados como culpables de la crisis financiera, se convierten en la receta para el rescate. Y los denostados hedge funds y fondos de capital riesgo, pasan a ser posibles protagonistas del mismo.
En su plan, el Tesoro denomina "activos heredados" a los activos t¨®xicos. Se trata bien de carteras de pr¨¦stamos hipotecarios o de t¨ªtulos vinculados a pr¨¦stamos cuyos mercados se han secado. Las dudas sobre el valor de estos activos y, en consecuencia, sobre el estado de salud de las instituciones bancarias, dificultan que puedan equilibrar sus balances por la v¨ªa privada y congelan el flujo normal de cr¨¦dito. Para romper con este c¨ªrculo vicioso que tiene de rodillas al sistema financiero -y a la econom¨ªa- desde hace 18 meses se crea una esfera p¨²blico-privada que "repare" los balances.
El Tesoro se apoya en el Fondo de Garant¨ªa de Dep¨®sitos (FDIC) y la Reserva Federal (Fed) para llevar adelante la nueva estrategia de rescate de Wall Street. El nuevo plan no necesita pasar por el Congreso, pues recurre a 100.000 de los 350.000 millones de d¨®lares que quedan en el fondo de estabilidad financiera creado por iniciativa del anterior secretario del Tesoro, Henry Paulson, para usar en la compra de esos activos. Washington busca que el sector privado se implique asumiendo parte del riesgo y, para animarle a participar, la FDIC dar¨¢ enormes cr¨¦ditos.
El poder de compra gracias a esta combinaci¨®n de fuerzas ser¨¢ inicialmente de medio bill¨®n de d¨®lares, cantidad que podr¨ªa duplicarse con el tiempo, seg¨²n explic¨® el secretario del Tesoro, Timothy Geithner. En la pr¨¢ctica, el Gobierno y el sector privado compartir¨¢n los riesgos y las posibles ganancias. Geithner puso el acento en que los inversores privados perder¨¢n su dinero si las cosas van mal (si el valor de realizaci¨®n de los activos t¨®xicos que se compren es menor que el pagado) y que el Tesoro compartir¨¢ las ganancias si las cosas van bien. Pero tambi¨¦n cabe la lectura contraria: los inversores privados arriesgar¨¢n s¨®lo una peque?a parte de capital que, gracias al pr¨¦stamo de fondos p¨²blicos, puede proporcionarles grandes ganancias si los precios se recuperan. Si las cosas van mal, los inversores podr¨¢n desentenderse de esos pr¨¦stamos, mientras que el Estado asumir¨¢ el grueso de las p¨¦rdidas.
El plan Geithner cuenta con dos grandes programas. Con el de pr¨¦stamos heredados, los bancos podr¨¢n vender a fondos p¨²blico-privados de nueva creaci¨®n sus carteras de pr¨¦stamos hipotecarios contaminados. La FDIC determinar¨¢ la cantidad de fondos con que garantizar los activos que le presenten los bancos para ser subastados. En la pr¨¢ctica, por cada d¨®lar que aporten los inversores privados, el Tesoro pondr¨¢ otro y el nuevo fondo podr¨¢ emitir deuda con garant¨ªa de la FDIC por hasta 12 d¨®lares m¨¢s.
En un ejemplo puesto por el Tesoro que guarda esas proporciones, un banco que quiere vender una cartera de hipotecas por un valor nominal de 100 d¨®lares, lo solicita al FDIC, que saca a subasta esos activos entre varios inversores privados. En el ejemplo, gana una oferta por importe de 84 d¨®lares. De esa cifra, el FDIC garantiza 72 d¨®lares, dejando 12 de inversi¨®n, en los que ir¨ªan a medias el Tesoro y el inversor privado, que gestionar¨ªa la cartera bajo supervisi¨®n de la FDIC hasta su liquidaci¨®n. Aunque esto ya no lo dice el ejemplo, si al vencimiento el valor de la cartera es de 90 d¨®lares, el inversor privado ganar¨¢ 3 y el Tesoro otros 3 (menos los gastos). Si el valor es, digamos, de 50, el inversor perder¨ªa sus 6 d¨®lares, y el sector p¨²blico, 28.
El segundo programa es el de t¨ªtulos heredados -l¨¦ase t¨®xicos- y tiene a su vez dos partes. Por un lado, la Reserva Federal dar¨¢ pr¨¦stamos para la compra de titulizaciones de activos (pr¨¦stamos hipotecarios, al consumo o comerciales) potenciando el programa TALF, anunciado hace unos meses por la Fed para reactivar el cr¨¦dito y que entra en vigor ma?ana. Por otro, el Tesoro se asociar¨¢ con cinco gestoras de activos para crear plataformas o veh¨ªculos que compren los t¨ªtulos. Si el fondo pone 100 d¨®lares, el Tesoro pondr¨¢ otros 100 como coinversor y conceder¨¢ 100 d¨®lares (o en algunos casos 200) m¨¢s como pr¨¦stamo.
Geithner dijo que es inevitable que el Gobierno asuma riesgos. Sin embargo, cree que al hacer competir a los inversores privados entre ellos permitir¨¢ establecer un precio adecuado para esos activos que ahora no tienen mercado. Aunque la participaci¨®n privada puede proteger al contribuyente al hacer que el Tesoro no pague demasiado, la duda es si los precios que los inversores est¨¦n dispuestos a ofrecer ser¨¢n suficientes para sanear los balances de los bancos.
El mercado parece confiar en que s¨ª, a tenor de la subida del 6,84% que marc¨® ayer Wall Street, impulsado por el sector financiero. Es la mayor subida del ¨ªndice Dow Jones en casi cinco meses y se extendi¨® a las Bolsas de todo el mundo.
Geithner espera que un amplio n¨²mero de inversores -individuales, fondos de pensi¨®n, aseguradoras y a largo plazo- participe en esta operaci¨®n de limpieza. Para conseguirlo, una de las cuestiones que deb¨ªa aclarar Timothy Geithner era si iba a aplicar alg¨²n tipo de restricci¨®n a las pr¨¢cticas de remuneraci¨®n de las entidades participantes en el programa.
No ser¨¢ el caso, seg¨²n el jefe del Tesoro. La respuesta fue inmediata. El primero en anunciar su intenci¨®n en participar en el plan fue el reputado fondo Pimco, que ve posible obtener beneficios de hasta dos d¨ªgitos con la inversi¨®n. Morgan Stanley, por su parte, cree que la acci¨®n del Gobierno ayudar¨¢ a estimular el mercado de cr¨¦dito y califica de "innovadora" la estrategia de Timothy Geithner, que resucita la idea original para lidiar con estos activos.
Se estima que hay hasta dos billones de activos t¨®xicos bloqueados en los balances y en muchos de ellos el mercado no paga ni la mitad de su valor nominal, lejos por tanto del optimista ejemplo propuesto por el Tesoro.
El 'plan Geithner'
- El Tesoro de EE UU se asociar¨¢ con inversores privados para comprar activos 't¨®xicos' por hasta un bill¨®n de d¨®lares.
- Un programa se destinar¨¢ a comprar carteras de pr¨¦stamos y otro, a adquirir titulizaciones de activos financieros.
- El nuevo rescate usa los fondos del
plan Paulson y no necesita pasar por el Congreso.
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