Escamas de pez convertidas en arte
San Sebasti¨¢n expone 40 fotograf¨ªas microdigitales de f¨®siles y estructuras ¨®seas de seres vivos - Los trabajos son obra de dos paleoantrop¨®logos
?Puede el embri¨®n de un rat¨®n, el f¨¦mur de una mujer o las escamas de un pez convertirse en objeto de una exposici¨®n de arte? La respuesta es s¨ª y las pruebas est¨¢n colgadas en las paredes de la sala Kubo de San Sebasti¨¢n. All¨ª luce ?seos Cosmos (-3.200.000/+2009), una exposici¨®n de 40 fotograf¨ªas microdigitales de f¨®siles y estructuras ¨®seas de seres vivos rubricadas por los paleoantrop¨®logos Alejandro P¨¦rez-Ochoa, de la Universidad Complutense de Madrid, y Timothy G. Bromage, de la Universidad de Nueva York.
Ambos cient¨ªficos son los m¨¢ximos responsables de un proyecto que estudia desde hace m¨¢s de 25 a?os la relaci¨®n entre el c¨¢ncer y la evoluci¨®n humana, trabajo que abordan desde la doble perspectiva de la biolog¨ªa molecular y la paleoantropolog¨ªa. Su investigaci¨®n les ha llevado a estudiar el esqueleto humano y el de otros seres vivos en distintos pa¨ªses, muchos de ellos africanos, en los que han ido tomando las im¨¢genes que componen la muestra, que se podr¨¢n ver en San Sebasti¨¢n hasta el pr¨®ximo 5 de julio.
Ambos cient¨ªficos estudian la relaci¨®n entre el c¨¢ncer y la evoluci¨®n
El viaje que proponen P¨¦rez-Ochoa y Bromage comienza hace m¨¢s de tres millones de a?os y llega hasta la actualidad. En ese periplo, los asistentes a la exposici¨®n podr¨¢n contemplar algunos detalles del esqueleto de Lucy, nombre con el que se conoce a uno de los hom¨ªnidos m¨¢s antiguos del mundo.
Cada fotograf¨ªa, ampliaciones de la imagen real, esconde "un secreto", por lo que P¨¦rez Ochoa recomienda "dejarse invadir por el misterio" de cada una de ellas y hacerlo con tiempo suficiente. Tiempo para apreciarlas y leer las explicaciones anexas, pues, de lo contrario, resulta dif¨ªcil captar todo su significado.
?Qu¨¦ secreto guardan, por ejemplo, lo que parecen unas enormes patas de crust¨¢ceo? Pues es la secci¨®n de un molar permanente de un ser humano de la Edad Media en Dinamarca, cuya anchura real es de un cent¨ªmetro. ?Y las dos im¨¢genes que semejan estampaciones en blanco y negro? Muestran c¨®mo la radiaci¨®n resultante de la cat¨¢strofe nuclear de Chernobil influy¨® en las estructuras naturales de las escamas de una tenca, un tipo de pez.
Los autores de la exposici¨®n subrayan con su trabajo la necesidad de que los humanos vuelvan a comportarse como "seres pertenecientes a una naturaleza que hay que respetar" y con la que mantener una armon¨ªa.
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