Rajoy pone el freno al PP y evita pedir censuras o anticipar elecciones
El l¨ªder no escucha la idea de Camps, euf¨®rico, de exigir adelantar las generales - Cospedal reta al Gobierno a que se someta a una cuesti¨®n de confianza
Mariano Rajoy sigue fiel a su ritmo pausado. Ni siquiera en el momento de mayor euforia despu¨¦s de un a?o muy duro, el de la noche electoral de las europeas, se le vio perder los nervios. Tampoco ayer, al d¨ªa siguiente, cuando convoc¨® a su direcci¨®n con la victoria por casi cuatro puntos a¨²n caliente. Encima de la mesa estaba el entusiasmo de Francisco Camps, que la noche anterior, absolutamente euf¨®rico por unos resultados extraordinarios en la Comunidad Valenciana, hab¨ªa exigido al Gobierno que adelante las elecciones. Pero Rajoy, una vez m¨¢s, se contuvo.
La direcci¨®n del PP no tiene intenciones de precipitar ninguna decisi¨®n importante. La moci¨®n de censura est¨¢ pr¨¢cticamente descartada porque la derrota ser¨ªa segura -CiU le anim¨® ayer a presentarla, pero inmediatamente despu¨¦s aclar¨® que ellos se abstendr¨ªan-, aunque p¨²blicamente nunca se va a anular esa posibilidad, porque no tiene sentido -el panorama puede cambiar- y para evitar las cr¨ªticas de los sectores m¨¢s duros.
Pero Rajoy ni siquiera se plantea pedir elecciones anticipadas, al contrario de lo que ha hecho Camps. La c¨²pula del PP, reunida ayer con la ¨²nica ausencia de Alberto Ruiz-Gallard¨®n, de viaje oficial para defender la candidatura de Madrid 2016, decidi¨®, por orden de Rajoy, tomar las cosas con calma y lanzar la pelota al tejado socialista. En vez de moci¨®n de censura o elecciones anticipadas, lo que pidi¨® Dolores de Cospedal, secretaria general, fue que el Gobierno se someta a una cuesti¨®n de confianza en el Congreso, para ver si cuenta con apoyos para seguir adelante.
En realidad, Zapatero sali¨® elegido en 2008 por mayor¨ªa simple, con los votos del PSOE (169 esca?os), que son los que repetir¨ªa en este momento, por lo que nada probar¨ªa una cuesti¨®n de confianza m¨¢s que la soledad de los socialistas, por lo que ¨¦stos descartan hacer caso al PP.
Varios miembros de la direcci¨®n coinciden en que para Rajoy "no es una prioridad" la petici¨®n de elecciones anticipadas. Ahora lo que toca, se?alan, es aprovechar el triunfo para despejar cualquier ruido interno -"desde fuera se han cuestionado muchas cosas, pero Rajoy es el l¨ªder que queremos, el que elegimos democr¨¢ticamente en el PP; a unos gustar¨¢ m¨¢s y a otros menos, sobre todo fuera del PP, pero a los de dentro nos gusta mucho", sentenci¨® Cospedal para tratar de acallar las cr¨ªticas- y concentrarse en explicar las propuestas del PP y exigir un cambio de pol¨ªtica econ¨®mica al Gobierno. "Son ellos los que han perdido, ellos tienen la responsabilidad de cambiar", sentencia un dirigente.
En este clima euf¨®rico -aunque al final los 23 diputados se quedaron lejos de los 25 que marc¨® Rajoy en una porra el domingo- el PP ha convocado hoy al Comit¨¦ Ejecutivo, con todos los dirigentes clave, en lo que se prev¨¦ una aclamaci¨®n del l¨ªder que ha vencido todas sus primarias y camina hacia el examen de verdad: el de las generales.
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