La primera pandemia del siglo

Los virus no entienden de protocolos ni saben comportarse ante la opini¨®n p¨²blica. Con una extensi¨®n casi mundial (se han identificado casos en 74 pa¨ªses), la nueva gripe es ya, oficialmente, una pandemia. La primera del siglo XXI. Aunque el calificativo puede llevar a confusi¨®n: se debe a la facilidad de propagaci¨®n del virus, no a su gravedad (la mortalidad es del 0,5%).

Fue la directora de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS), Margaret Chan, quien hizo ayer el anuncio del aumento del nivel de alerta de 5 a 6, el m¨¢ximo. "El virus se transmite f¨¢cilmente entre personas y entre pa¨ªses. Por eso he decidido elevar el nivel de alerta", dijo. La decisi¨®n se ha tomado despu¨¦s de avisar a los pa¨ªses con m¨¢s casos, como Espa?a (488 confirmados).

La posibilidad de que el virus mute es la principal amenaza

El peligro se traslada a los pa¨ªses del Sur, donde empieza el invierno

Claro que, tras el mensaje tranquilizador, Chan avis¨® de que la situaci¨®n puede cambiar. Es lo que hacen siempre los virus de la gripe. "Y nadie es capaz de prever lo que va a hacer ¨¦ste", dijo. Las posibilidades van desde que siga siendo leve hasta que adquiera caracter¨ªsticas del H5N1 (el de la gripe aviar) y se vuelva m¨¢s mortal.

En el hemisferio Norte lo peor no se espera hasta el invierno. Las radiaciones ultravioleta del verano deben desactivarlo. Adem¨¢s, desde 2003 los pa¨ªses ricos han acumulado antigripales. Y tienen otra ventaja: en oto?o habr¨¢ vacunas. Esto no va a suceder en el Sur, porque, por m¨¢s prisa que tengan los humanos, fabricar una vacuna tiene unos pasos que no se pueden acortar.

De momento, los ¨²ltimos datos son que en el mundo hay confirmados casi 29.000 casos desde finales de abril, y ha habido 144 fallecidos. La cifra es s¨®lo "la punta del iceberg", admiti¨® Chan. En EE UU, los Centros de Control de Enfermedades (el organismo cient¨ªfico de referencia) calculan que por cada diagn¨®stico hay otros 3.000 afectados. Esta proporci¨®n es a la baja (es un pa¨ªs puntero donde las alertas saltaron muy pronto), por lo que aventurar que ya ha habido 90 millones de infectados en el mundo no parece una exageraci¨®n.

?sta es la primera pandemia de gripe que se declara en 40 a?os. La anterior empez¨® en Hong Kong en 1967, y se sald¨® con medio mill¨®n de muertos. Los expertos creen que no se repetir¨¢ la situaci¨®n de la gripe espa?ola de 1918, con unos 30 millones de fallecimientos. La causa no est¨¢ s¨®lo en el virus, sino en el cambio de las circunstancias. Entonces, acababa de terminar la I Guerra Mundial, y, sobre todo, no exist¨ªan los antibi¨®ticos.

Aunque el cambio de ¨¦poca tambi¨¦n tiene sus inconvenientes. "Pandemia quiere decir una enfermedad que se propaga r¨¢pidamente", record¨® Chan. Eso hace medio siglo quer¨ªa decir que tardaba de seis a nueve meses en cruzar el planeta, porque la mayor¨ªa del transporte se hac¨ªa en barco o en tren. Ahora, bastan 24 horas para que un virus d¨¦ la vuelta al mundo. Adem¨¢s, Chan remarc¨® que hoy d¨ªa el 85% de las enfermedades cr¨®nicas (cit¨® la diabetes, la obesidad, las cardiovasculares, respiratorias y el asma como factores de riesgo) se da en "pa¨ªses de ingresos medios y bajos". "Nuestra gran preocupaci¨®n es que no sabemos qu¨¦ va a pasar en ellos", se?al¨®.

Por eso, el cambio del nivel de alerta tiene distintas lecturas en cada pa¨ªs. De manera general, es un anuncio para que no se gasten esfuerzos en detener el virus (se supone que ya est¨¢ en todas partes). Ahora, el trabajo debe ser atender a los afectados. "Hacer an¨¢lisis y diagn¨®sticos caso a caso consume tiempo y dinero", advirti¨® Chan.

Los protocolos de la OMS (y el plan espa?ol hecho siguiendo las directrices internacionales) estipulan la posibilidad de que los enfermos se a¨ªslen -"voluntariamente", recalca el documento espa?ol- en sus casas, que se cierren colegios u otros lugares de grandes aglomeraciones. En cambio, consideran in¨²til restringir los viajes (no tiene sentido impedir la llegada de algo que ya est¨¢ dentro) o, en este caso, prohibir el comercio de carne de cerdo (que el material gen¨¦tico del virus se corresponda con una gripe porcina no quiere decir que estos animales transmitan la enfermedad).

La directora de la OMS record¨® que este virus afecta m¨¢s a personas j¨®venes (ah¨ª est¨¢n los casos de los colegios de Madrid o del cuartel de Hoyo de Manzanares), lo que es una ventaja porque es gente m¨¢s fuerte. Por otro lado, si se confirman los casos africanos, el pat¨®geno tendr¨ªa a su alcance a grupos de poblaci¨®n como los inmunodeprimidos por el VIH, lo que puede hacer que, aunque el virus no se vuelva m¨¢s peligroso en s¨ª mismo, sus efectos sean mucho m¨¢s devastadores.

Tras la declaraci¨®n de la pandemia, la ministra de Sanidad espa?ola, Trinidad Jim¨¦nez, insisti¨® en que mantendr¨¢ los mismos protocolos que ha seguido hasta ahora. "La OMS no recomienda cambiar los h¨¢bitos ni los criterios epidemiol¨®gicos", declar¨®.

Jim¨¦nez explic¨® que, como dice la OMS, Espa?a concentrar¨¢ los recursos en la atenci¨®n a los afectados, m¨¢s que en detectar el virus, porque ¨¦ste est¨¢ muy extendido. Ya no se contabilizar¨¢ caso por caso a los enfermos. Tampoco se har¨¢ an¨¢lisis a todos. Para saber qu¨¦ pasa se har¨¢ un muestreo de la poblaci¨®n.

La edad media de los afectados en Espa?a es de 20 a?os. En su mayor¨ªa son varones y el tiempo medio de la enfermedad es tres d¨ªas, explic¨® Jim¨¦nez. Pr¨¢cticamente ninguno pasa ya por el hospital. "Los antivirales se aplican s¨®lo a los grupos de riesgo. La nueva gripe est¨¢ muy extendida y no queremos que haya un uso masivo para no crear resistencia al virus", explic¨® la ministra.

Jim¨¦nez declar¨® que la vacuna estar¨¢ previsiblemente en Espa?a en octubre. Un grupo de expertos debe decidir a qui¨¦n se va a suministrar. De momento se toma como referencia los grupos de riesgo de la gripe estacional, es decir, un 30% de la poblaci¨®n. Un porcentaje similar al que se baraj¨® esta semana en el consejo de ministros de Sanidad de la UE celebrado en Luxemburgo.

La ministra de Sanidad intent¨®, sobre todo, mandar un mensaje de tranquilidad. "Pandemia significa diseminaci¨®n, extensi¨®n. No implica mayor gravedad. El cambio de fase no tiene porqu¨¦ implicar cambios en nuestra vida cotidiana. S¨®lo hay que mantener los h¨¢bitos de higiene correctos, como con cualquier gripe".