La Fiscal¨ªa prev¨¦ trasladar a 'El Cuco' a un piso custodiado con otros menores

El pr¨®ximo 17 de noviembre Javier G. El Cuco, menor de 15 a?os, acusado por el asesinato y violaci¨®n de Marta del Castillo, deb¨ªa salir en libertad ya que la medida cautelar de su internamiento en un centro cerrado, caduca. Para evitarlo, la Fiscal¨ªa de Sevilla prev¨¦ solicitar al juez de menores otra medida cautelar para internarlo en un piso de convivencia con otros menores conflictivos denominado "de comunidad terap¨¦utica". El apartamento donde ser¨¢ ubicado estar¨¢ alejado de Sevilla "para garantizar su seguridad y tener la confianza de que el menor no se evada", detall¨® ayer Mar¨ªa Jos¨¦ Segarra, fiscal jefe de Sevilla.

La Fiscal¨ªa de Menores instruye la acusaci¨®n contra El Cuco en paralelo al caso que lleva el Juzgado de Instrucci¨®n 4 contra los cuatro adultos implicados debido a la Ley del Menor, que establece un proceso paralelo para los menores de edad. Pero a pesar de esta circunstancia, la Fiscal¨ªa no precipitar¨¢ el juicio del menor para poder contar con todas las pruebas solicitadas en la instrucci¨®n del Juzgado 4 y que pueden alterar de alg¨²n modo la acusaci¨®n de asesinato y violaci¨®n. De este modo, el ministerio p¨²blico no presentar¨¢ el escrito de acusaci¨®n al juez de menores por ahora, a la espera de las pruebas documentales solicitadas por el fiscal. "Estamos en un caso complejo y debemos acompasarnos", explica la fiscal jefe.

Una vez presentado el escrito de acusaci¨®n, el control de los tiempos pertenece al juez de menores, que decidir¨ªa el momento preciso para la celebraci¨®n del juicio. Segarra matiza que la medida no supone una demora intencionada: "No lo estamos retrasando. Como sigue el proceso de adultos con diligencias de prueba, vamos a esperar a la posibilidad de que sean eficaces las diligencias, por si tienen efecto en el caso del menor".

Ante las dificultades que afronta el caso por la falta de pruebas decisivas como el cuerpo del delito y las continuas mentiras y versiones de los cinco imputados, ambos juicios se prev¨¦n complejos y muy prolongados. Tanto en un proceso como en otro, los adultos deber¨¢n comparecer como imputados ante el juez Francisco de As¨ªs Molina y como testigos en el juicio a El Cuco. ?ste declarar¨¢ a su vez como testigo en el juicio con jurado contra los cuatro adultos acusados y como imputado ante el juez de menores.

Mientras el juez de menores juzgar¨¢ al adolescente El Cuco, un jurado popular resolver¨¢ la acusaci¨®n contra Miguel Carca?o, asesino confeso de Marta, su hermano Javier Delgado, la novia de ¨¦ste Mar¨ªa Garc¨ªa, y su amigo Samuel Ben¨ªtez.

No est¨¢ claro a¨²n cu¨¢l de los dos procesos se celebrar¨¢ antes. Pero en ambas posibilidades el jurado popular se ver¨¢ influido por la sentencia y hechos probados dictados por el juez de menores, y a la inversa. Todo apunta a que ser¨¢ harto complejo sustraerse a la presi¨®n medi¨¢tica, a pesar de que ambas sentencias deber¨¢n ser motivadas y considerar acreditados los hechos de la noche del crimen.

"Existir¨¢n problemas de comprensi¨®n social al celebrarse dos juicios, y ser¨¢ inevitable que se abra el debate debido a la trascendencia del caso", apunta Segarra. Numerosos juristas han mostrado su disconformidad con esta circunstancia que provoca un juicio paralelo para los menores implicados en cualquier delito. La trascendencia del caso Marta ser¨¢ un altavoz para el debate sobre la Ley del Menor.