Rajoy se preocupa por el deterioro de imagen pero se pone en manos de Camps

Durante unas cuantas horas, casi 24, Mariano Rajoy intent¨® actuar como Francisco Camps, y hacer como si el caso G¨¹rtel no existiera. Pero dur¨® poco. Lo que tard¨® en encontrarse en su despacho no s¨®lo con las caras de preocupaci¨®n de algunos dirigentes, sino sobre todo con los peri¨®dicos y las tertulias de radio y televisi¨®n, que apuntaban en un mismo sentido: la exigencia al l¨ªder del PP para que reaccionara ante el esc¨¢ndalo.

Rajoy reuni¨® a una especie de gabinete de crisis de urgencia en su despacho y, despu¨¦s de mucho cavilar, lleg¨® a una conclusi¨®n: hab¨ªa que decir algo, pero no se pueden tomar decisiones dr¨¢sticas hasta que haya nuevos imputados. En G¨¦nova se est¨¢ instalando la idea de que tanto Francisco Camps como Ricardo Costa y Vicente Rambla acabar¨¢n imputados en poco tiempo por el asunto de la financiaci¨®n ilegal del PP valenciano. Pero hasta que eso suceda, Rajoy est¨¢, dicen en su entorno, en manos de la voluntad de Camps.

El presidente no ha ofrecido una rueda de prensa en G¨¦nova desde el 13 de abril

A pesar de sus recomendaciones de "indiferencia" del mi¨¦rcoles, el l¨ªder, aseguran varios dirigentes, es plenamente consciente del enorme desgaste de imagen del partido y de su figura que est¨¢ provocando este caso, pero no tiene ni las ganas ni la fuerza para empujar a Francisco Camps a tomar decisiones, entre otras cosas porque todos los dirigentes asumen que destituir a Costa o a Rambla no arreglar¨ªa el problema, ya que es Camps quien ten¨ªa la relaci¨®n m¨¢s estrecha con El Bigotes, y quien decidi¨® que el PP le diera los contratos.

Ayer se produjo una nueva demostraci¨®n de la fuerza de Camps, claro vencedor del pulso que mantuvo con la direcci¨®n nacional, especialmente con Dolores de Cospedal, la secretaria general. Ella ofreci¨® una rueda de prensa en la sede central en la anunci¨® que no habr¨¢ m¨¢s medidas hasta que haya nuevos imputados: "Hemos hecho lo que pod¨ªamos. No se puede pedir m¨¢s. Todos los imputados est¨¢n suspendidos de militancia", dijo despu¨¦s de que Rajoy anunciara que el PP "actuar¨¢".

Cospedal defendi¨® a todo el partido, pero lanz¨® un claro mensaje contra Ricardo Costa: "No es nada ejemplarizante que se reciban ciertos regalos", sentenci¨®. "No hemos recibido ninguna explicaci¨®n" de Costa, remat¨®. Ante el enfado de los valencianos, G¨¦nova tuvo que rectificar r¨¢pidamente y enviar otro comunicado. "El PP ha recibido la documentaci¨®n enviada por [...] Costa, que acredita la venta del coche Mercedes Benz y la compra del veh¨ªculo Infinity. El PP se da por satisfecho con estas explicaciones".

Esta nueva demostraci¨®n de fuerza del PP valenciano confirma la idea instalada en el partido: que el l¨ªder est¨¢ en manos de Camps, que se resiste a tomar ninguna decisi¨®n e incluso a ofrecer explicaciones p¨²blicas de sus relaciones con El Bigotes, que sostiene en algunas grabaciones que el presidente le pidi¨® favores para su hermana, Estrella Camps.

Despu¨¦s de la reuni¨®n de crisis, entre las m¨²ltiples posibilidades, Rajoy descart¨® ofrecer una rueda de prensa en la sede nacional, algo que no sucede desde el 13 de abril pasado. Prefiri¨® hacer una breve declaraci¨®n, preparar un comunicado y mandar a Cospedal a atender a los periodistas.

En medio de un ambiente de gran tensi¨®n, la intervenci¨®n de Rajoy en una reuni¨®n convocada para analizar los Presupuestos, que se retras¨® una hora a la espera de que concluyera el gabinete de crisis, vino precedida por un dram¨¢tico desmentido de Ana Mato sobre la posibilidad de que Correa le hubiera regalado un coche: "Nadie me ha regalado nunca nada. Todo lo que tengo es fruto de mi trabajo".

Despu¨¦s, Rajoy remat¨®: "Ha quedado acreditado que no estamos ante una trama de financiaci¨®n irregular del PP, sino de una trama de corrupci¨®n para aprovecharse del PP". Era una declaraci¨®n muy parecida a la que pronunci¨® cuando se destap¨® el caso. Y, como entonces, Rajoy ha decidido esperar y ver.