Crisis de embarazos
Los dem¨®grafos advierten que la situaci¨®n econ¨®mica reducir¨¢ la natalidad - El desempleo y el menor flujo migratorio frenar¨¢n los nacimientos
El a?o pasado nacieron en Espa?a 518.967 ni?os; una cifra r¨¦cord que no se recordaba desde hac¨ªa 25 a?os. Fueron ni?os concebidos meses antes, cuando la ciudadan¨ªa no percib¨ªa claramente la profundidad de la crisis econ¨®mica. ?Qu¨¦ pasar¨¢ este a?o? Y, sobre todo, ?qu¨¦ suceder¨¢ el pr¨®ximo? Los dem¨®grafos se?alan que la crisis va a tener un efecto negativo en la natalidad. La cuesti¨®n a dirimir es la dimensi¨®n del mismo.
Franquear la barrera psicol¨®gica del medio mill¨®n de nuevos espa?oles puede haber sido una victoria p¨ªrrica. En primer lugar, porque la tasa de fecundidad (n¨²mero de hijos por mujer f¨¦rtil) sigue sin llegar ni de lejos al 2,1, llamada de reposici¨®n, y que garantizar¨ªa la estabilidad de una poblaci¨®n sin inmigraci¨®n. En segundo lugar, porque la crisis econ¨®mica puede dar al traste con las previsiones m¨¢s optimistas que vaticinaban que la tasa de fecundidad seguir¨ªa aumentando ligeramente, como lo ha venido haciendo en los ¨²ltimos diez a?os en Espa?a, pero tambi¨¦n en la mayor¨ªa de los pa¨ªses desarrollados.
"En t¨¦rminos reproductivos habr¨¢ un par¨¦ntesis", dice un economista
Las espa?olas esperan hasta rozar los 30 a?os para tener hijos
La protecci¨®n social s¨ª fomenta los embarazos, el 'cheque beb¨¦', no
"En un escenario m¨¢s dom¨¦stico, los ni?os encajan bien", afirma una dem¨®grafa
La falta de perspectivas econ¨®micas y laborales puede ser un factor disuasorio a la hora de tener un hijo. "El n¨²mero de nacimientos de este a?o no creo que vaya a ser muy diferente al registrado en 2008, porque en Espa?a los nacimientos se concentran en el primer semestre del a?o, fruto de concepciones de verano, cuando a¨²n no se hab¨ªa producido la quiebra de Leehman Brothers. Pero ser¨ªa extraordinario que en 2010 no hubiera un descenso", aventura Anna Cabr¨¦, directora del Centro de Estudios Demogr¨¢ficos de la Universidad Auton¨®ma de Barcelona.
"Desde que se decide tener un hijo hasta que nace transcurre una media de un a?o", advierte Olivier Thevenon, investigador del Instituto franc¨¦s de Estudios Demogr¨¢ficos y economista en la Divisi¨®n de Pol¨ªtica Social de la OCDE. "Esperamos un efecto negativo en la natalidad dada la incertidumbre y la precariedad. Es muy probable que en t¨¦rminos reproductivos la gente haga un par¨¦ntesis".
Nadie espera una estrepitosa ca¨ªda porque la demograf¨ªa tiene una cierta inercia, como dice el profesor de Geograf¨ªa Humana de la Universidad Aut¨®noma de Madrid Julio Vinuesa. Las espa?olas, como la mayor¨ªa de las europeas, esperan hasta rozar los 30 a?os para lanzarse a la maternidad. No disponen de un gran margen de tiempo para posponer su decisi¨®n. Pero otro dato confirma los peores presagios: las mujeres de hoy en d¨ªa son m¨¢s fecundas si tienen empleo. Raramente encuentran en el paro o la inactividad laboral la situaci¨®n ideal para ser madres.
El factor m¨¢s decisivo en algunos pa¨ªses y, sobre todo, en Espa?a, ser¨¢ el menor flujo migratorio. Los inmigrantes son el 12% de la poblaci¨®n espa?ola. Sin embargo, el 20% de los beb¨¦s nacidos el a?o pasado se le debe a ellos. Con la crisis, pocos est¨¢n volviendo a sus pa¨ªses de origen, pero muchos est¨¢n en el paro y, desde luego, otros muchos han dejado de venir de manera masiva. En el primer semestre de este a?o se registr¨® la mitad de inmigrantes ilegales llegados a nuestro suelo y el n¨²mero de contratos en origen baj¨® de los 136.000 en 2008 a poco m¨¢s de 10.000.
Vinuesa es reacio a establecer una relaci¨®n directa entre crisis econ¨®mica y descenso de la natalidad, pero s¨ª advierte: "Lo preocupante es que el n¨²mero de mujeres en edad f¨¦rtil va a ir disminuyendo en los pr¨®ximos a?os (por las que no nacieron entre las d¨¦cadas de los setenta y los noventa)". Ello se unir¨¢ a un menor n¨²mero de mujeres inmigrantes en este pa¨ªs dispuestas a procrear.
Cabe preguntarse si crisis econ¨®micas anteriores tuvieron un efecto negativo en la natalidad. En los a?os setenta, marcados por la crisis del petr¨®leo, descendi¨® la natalidad, como explica Rafael Puyol, presidente del Instituto Empresa. Posteriormente, los datos del INE (Instituto Nacional de Estad¨ªstica) demuestran que Espa?a registr¨® el menor n¨²mero de nacimientos y las tasas de natalidad y fecundidad m¨¢s bajas de su historia entre los a?os 1995 y 2000, es decir, los a?os siguientes a la recesi¨®n econ¨®mica de los noventa.
Carmen Salaices, jefa del ¨¢rea del Movimiento Natural de la Poblaci¨®n del INE, reh¨²sa utilizar como modelos las crisis anteriores. "En los a?os setenta y en los noventa est¨¢bamos inmersos en periodos de bajada continua de la natalidad. Aquellas crisis no produjeron ca¨ªdas espectaculares".
Pero hubo ca¨ªdas generalizadas. No s¨®lo en Espa?a. En todo el mundo. "Se vio en Francia y en Estados Unidos, entre otros. La Gran Depresi¨®n de los a?os 30, la crisis petrolera de los setenta y la recesi¨®n de los noventa produjeron curvas descendentes paralelas a las de la econom¨ªa en las tasas de fecundidad", dice Thevenon.
En este terreno, la gran diferencia con aquellas otras crisis la marcan el distinto papel social de la mujer y, sobre todo, las pol¨ªticas de protecci¨®n social, las ¨²nicas que logran elevar o mantener la natalidad de los pa¨ªses desarrollados. El experto en poblaci¨®n Rafael Puyol, y el propio Vinuesa, instaban este verano al Gobierno espa?ol a tomar medidas para incrementar la fecundidad y aliviar as¨ª la carga del envejecimiento de la poblaci¨®n.
Seg¨²n las ¨²ltimas proyecciones de la Divisi¨®n de Poblaci¨®n de la ONU (con datos de 2007 y 2008), el ritmo del crecimiento del planeta sigue ralentiz¨¢ndose. Vaticina una poblaci¨®n de 9.000 millones de almas en el a?o 2050 (ahora somos 6.800). En los pa¨ªses m¨¢s pobres las tasas de fecundidad van a seguir reduci¨¦ndose mientras que en los pa¨ªses m¨¢s desarrollados ocurrir¨¢ lo contrario. Todos tienden a converger en el 2,01. Pero en tales proyecciones no se tuvo en cuenta la crisis actual, que est¨¢ castigando a pa¨ªses ricos y pobres por igual. Habr¨¢ que esperar a la pr¨®xima revisi¨®n.
Pero dentro del mundo rico de baj¨ªsima fecundidad, los que ya se aproximan a esa tasa de dos hijos por mujer, adem¨¢s de Irlanda, son Francia y los pa¨ªses n¨®rdicos. Hay un dato revelador al respecto: Francia dedica el 3,8% del PIB a protecci¨®n social frente al 1,5% espa?ol.
"La tasa se eleva all¨¢ donde se facilita el cuidado de los ni?os y donde hay m¨¢s flexibilidad laboral", dice un reciente informe de Eurostat, la oficina estad¨ªstica europea. "La recesi¨®n de los noventa en los pa¨ªses n¨®rdicos redujo la tasa de fecundidad en Suecia, pero no en Finlandia, donde el Gobierno instituy¨® una importante ayuda familiar", recuerda Thevenon.
El Gobierno espa?ol instituy¨® en julio una ayuda ¨²nica de 2.500 euros a las familias por el nacimiento de cada hijo. Es el llamado cheque beb¨¦ que, seg¨²n los expertos, no ha demostrado su efecto beneficioso en la natalidad. "No creo que nadie se decida a tener un hijo por 2.500 euros. La natalidad no se puede fomentar con medidas puntuales, sino con altos niveles de protecci¨®n social sostenidos en el tiempo", dice Salaices. "El cheque beb¨¦ es el Plan E de la natalidad", sentencia Puyol. "Yo me he alegrado de que no se haya suprimido el cheque beb¨¦. No sirve para fomentar la natalidad, pero es un detalle, y quitarlo igual s¨ª que podr¨ªa disuadir a m¨¢s de uno de tener hijos", aventura Cabr¨¦.
No obstante, todos los dem¨®grafos consultados dejan una puerta abierta a otras hip¨®tesis distintas al esperado descenso de la fecundidad. La natalidad depende del comportamiento humano, dif¨ªcil de predecir. "Qui¨¦n sabe si con la crisis la gente gasta menos en viajes y lujos y glorifica lo dom¨¦stico. En ese escenario, los ni?os encajan muy bien", bromea Anna Cabr¨¦.
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