Internet y corrupci¨®n
Empieza hoy en Barcelona el F¨®rum de Cultura Libre (www.fcforum.net), con participaci¨®n de especialistas de gran relieve de todo el mundo. Los temas centrales son el acceso colectivo a la cultura y el uso de Internet como gran palanca de transformaci¨®n de relaciones pol¨ªticas y sociales. El f¨®rum coincide con la crisis global del modelo productivo hegem¨®nico y con la explosi¨®n local de graves episodios de corrupci¨®n pol¨ªtica y empresarial. No son coincidencias banales. Existe un gran desconcierto sobre c¨®mo encarar la creaci¨®n art¨ªstica, cultural y cognitiva, cuando los esquemas de apropiaci¨®n mercantil tradicionales ya no funcionan como antes. Y el desconcierto no es menor entre los pol¨ªticos profesionales cuando tratan de responder a la indignaci¨®n social y apenas si son capaces de articular un "no todos somos iguales".
Los actuales instrumentos de informaci¨®n y comunicaci¨®n nos ofrecen pistas de c¨®mo avanzar en la democratizaci¨®n del control sobre los asuntos y las finanzas p¨²blicas cuando fallan, como han fallado, los instrumentos de control institucionales. El apartado pol¨ªtico del f¨®rum trabajar¨¢ en v¨ªas de respuesta, ya explorada en los pa¨ªses que m¨¢s pulcritud demuestran en la gesti¨®n del dinero y de los asuntos p¨²blicos, para ofrecer la m¨¢xima transparencia en todo aquello que tiene que ver con la actuaci¨®n de la Administraci¨®n, aprovechando la gran palanca de las tecnolog¨ªas de la informaci¨®n y la comunicaci¨®n. Ya no basta con decir que se ha publicado tal o cual cosa en el diario oficial o en el bolet¨ªn de la provincia. Hemos de exigir que en las webs de Generalitat, diputaciones, ayuntamientos y partidos cualquier ciudadano o entidad pueda ver, de manera f¨¢cil y c¨®moda, qui¨¦n contrata y recibe qu¨¦ y con qu¨¦ coste. Todo gobierno que de verdad quiera luchar contra la telara?a de intereses y lobbies que siempre rodean al poder necesita aliados. Le hace falta un control social constante y sistem¨¢tico que le ayude a descubrir madrigueras de suciedad y rincones de corrupci¨®n. La democracia necesita contrademocracia ciudadana para poder ganar la batalla de la corrupci¨®n. Si no es as¨ª, la oleada de esc¨¢ndalos acabar¨¢ preparando el terreno para populismos indeseables que ya asolan algunos pa¨ªses de Europa en estos momentos.
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