Un hist¨®rico centrista en la nueva RTVE

Un pol¨ªtico, sin experiencia en medios de comunicaci¨®n pero con una prolongada trayectoria de gesti¨®n en diferentes instituciones p¨²blicas, llevar¨¢ las riendas de RTVE durante los pr¨®ximos tres a?os. Alberto Oliart, que fue ministro de Industria y Defensa a principios de los a?os ochenta -en los Gobiernos de UCD- relevar¨¢ en el cargo a Luis Fern¨¢ndez, el primer presidente de la televisi¨®n p¨²blica elegido por el Parlamento.

Y al igual que Fern¨¢ndez, que presentar¨¢ formalmente su dimisi¨®n ma?ana, acceder¨¢ al cargo con el apoyo de las dos principales formaciones pol¨ªticas. Por segunda vez en la historia, PSOE y PP han consensuado el nombre del presidente de la televisi¨®n estatal. El consenso no es total: CiU aplaude la elecci¨®n, mientras que PNV y ERC la cuestionan.

Oliart, octogenario, es elegido para desempe?ar el cargo tres a?os

Fern¨¢ndez se despide irritado por no haber contado ante la reforma

Las negociaciones entre ambos partidos se han llevado al m¨¢s alto nivel y el pacto ha sido sellado directamente por el jefe del Ejecutivo, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, y el l¨ªder del PP, Mariano Rajoy. El PSOE necesitaba cerrar cuanto antes la crisis abierta por Luis Fern¨¢ndez, que abandona al puesto a mitad de mandato. El PP, a su vez, ha querido dar una imagen de responsabilidad institucional acelerando el acuerdo.

Antes de acceder a su cargo, Oliart, de 81 a?os, deber¨¢ ser designado consejero de RTVE por el Pleno del Congreso de los Diputados con una mayor¨ªa cualificada (dos tercios de los votos) y pasar el examen al que ser¨¢ sometido por parte de los miembros de la comisi¨®n mixta de control. Pese a que el mandato que fija la ley es de seis a?os, Oliart desempe?ar¨¢ el cargo durante tres, justo los que le restan por cumplir a Fern¨¢ndez, que accedi¨® a la c¨²pula de RTVE en enero de 2007.

El m¨¢ximo ¨®rgano de gobierno de RTVE est¨¢ compuesto por 12 vocales (incluido el presidente), de los cuales cuatro han sido elegidos por el PP y dos por el PSOE mientras que CiU, IU y ERC tienen un representante cada uno. Tambi¨¦n los sindicatos UGT y CC OO cuentan con sendos consejeros.

Oliart se manifest¨® ayer firme defensor de la "objetividad y la neutralidad" de los medios p¨²blicos de comunicaci¨®n y dijo que en una sociedad tan plural como la espa?ola y con tendencias tan distintas, la radiotelevisi¨®n p¨²blica tiene que ser "lo m¨¢s as¨¦ptica posible". En declaraciones a la cadena SER, donde colabor¨® como comentarista pol¨ªtico, dijo que m¨¢s que "ilusi¨®n", el cargo le despertaba otro tipo de sentimientos. "Si me llaman y creen que tengo que hacerlo y que lo puedo hacer, pues lo intentar¨¦". Oliart gestionar¨¢ un presupuesto de 1.200 millones de euros, tendr¨¢ en sus manos siete cadenas de televisi¨®n, cinco de radio y una emergente divisi¨®n de medios interactivos y a sus ¨®rdenes estar¨¢ una planilla de 6.400 trabajadores, la mayor¨ªa de menos de 52 a?os, la edad tope del expediente de regulaci¨®n de empleo al que se acogieron m¨¢s de 4.000 empleados.

Afronta, igualmente, el desaf¨ªo de dar un giro de 180 grados a la televisi¨®n p¨²blica, que a partir del 1 de enero dejar¨¢ de emitir publicidad. Adem¨¢s, en abril se producir¨¢ el apag¨®n anal¨®gico, que provocar¨¢ un severo reajuste del panorama audiovisual. "Para hacer frente a la nueva situaci¨®n", afirman fuentes de RTVE, "se necesita un gestor, y un gestor como Oliart, que no viene de la empresa privada sino de las instituciones p¨²blicas". En este contexto, una de las claves ser¨¢ qui¨¦n ocupe el puesto de director general corporativo, una tarea que tanto en la etapa de Luis Fern¨¢ndez como en la de su antecesora, Carmen Caffarel, ha desempe?ado Jaime Gaiteiro.

Tras obtener la idoneidad por parte del Congreso, Alberto Oliart ser¨¢ nombrado presidente de la corporaci¨®n por el propio consejo de administraci¨®n de la compa?¨ªa. Este organismo se reunir¨¢ ma?ana de manera extraordinaria para conocer la dimisi¨®n del todav¨ªa presidente. Luis Fern¨¢ndez envi¨® ayer una carta a los consejeros en la que les comunica que presentar¨¢ su "renuncia expresa" a los cargos de presidente y consejero de la corporaci¨®n RTVE. "Es una decisi¨®n que he querido adecuar a los intereses de la corporaci¨®n, por un lado, y a los de la instituci¨®n por la que fui nombrado, el Parlamento, por otro".

Fern¨¢ndez explica que se trata de "una decisi¨®n basada en motivos estrictamente personales". Y agrega: "He trabajado con plena dedicaci¨®n en defensa de los intereses de RTVE y he asumido las exigencias de un cargo que requer¨ªa decisi¨®n, honestidad e independencia".

Tras la renuncia de Fern¨¢ndez est¨¢ su no disimulado malestar por la nueva ley de financiaci¨®n de RTVE, aprobada el pasado verano, que acarrea la desaparici¨®n radical de la publicidad en la televisi¨®n p¨²blica y recauda una parte de sus ingresos de las privadas y las operadoras de telecomunicaciones. Esta reforma fue pilotada por la vicepresidenta primera, Mar¨ªa Teresa Fern¨¢ndez de la Vega. Fern¨¢ndez se encontr¨® de la noche a la ma?ana con una ley sobre la que ni hab¨ªa sido consultado. Su equipo no oculta que se sinti¨® "ninguneado" ante una reforma de tan hondo calado.

El cambio que espera a TVE a la vuelta la esquina afectar¨¢ tambi¨¦n al modelo de contenidos. A partir de ahora, deber¨¢ ejercer como una aut¨¦ntica televisi¨®n p¨²blica, con una oferta de programaci¨®n que no est¨¦ enfocada s¨®lo a la b¨²squeda de la audiencia o como un mecanismo para atraer publicidad. Pero tendr¨¢ las manos un poco m¨¢s atadas que las privadas, ya que la ley establece limitaciones a la emisi¨®n de grandes pel¨ªculas de Hollywood o la inversi¨®n en la compra de derechos deportivos.

Y es probable que ya no pueda repetir ese holgado liderazgo en las audiencias del que tanto ha presumido Fern¨¢ndez. En su ¨²ltima comparecencia en el Senado se mostraba especialmente satisfecho de haber colocado los informativos de TVE en lo m¨¢s alto del podio. Y destacaba que los noticiarios de su etapa han sido los m¨¢s "independientes, plurales y neutrales". Precisamente los informativos han sido el tal¨®n de Aquiles de sus antecesores, que han tenido que arrastrar incluso condenas judiciales por manipulaci¨®n.