Forcades, entre ciencia y esp¨ªritu

Barcelona ha reunido este fin de semana a un amplio grupo mundial de amantes de las teor¨ªas de la conspiraci¨®n, m¨ªsticos, estudiosos de la Biblia de la era cu¨¢ntica y visionarios de esp¨ªritus de la naturaleza, maestros ascendidos y extraterrestres. El economista y soci¨®logo Llu¨ªs Botinas habl¨® sobre el "montaje made in USA" del VIH, cuya existencia neg¨®; Diana Castillo, bi¨®loga, explic¨® sus investigaciones sobre el "autoatentado de 11-S" y la "voladura controlada" de los Torres Gemelas. Y la joven canadiense Jessica Schab, autodenominada Ni?a cristal, narr¨® la existencia de los ni?os ¨ªndigos y cristal y sus encuentros con los alien¨ªgenas grises. As¨ª, hasta una quincena de ponentes del mismo signo.

Y junto a ellos, clausurando el II Congreso Ciencia y Esp¨ªritu, estuvo la benedictina y m¨¦dica Teresa Forcades, autora del v¨ªdeo Campanas por la Gripe A que, con m¨¢s de un mill¨®n de descargas en YouTube, ha puesto en tela de juicio la eficacia y seguridad de la vacuna contra el H1N1, invitando a la gente a rechazarla.

Forcades, benedictina de Montserrat y residente en Berl¨ªn, demostr¨® sus poderes de comunicaci¨®n e ¨ªntima conexi¨®n con el auditorio. A los cinco minutos se meti¨® a la gente en el bolsillo y, despu¨¦s de una conferencia de una hora, tuvo que responder otra m¨¢s de preguntas del p¨²blico. Pero anul¨® una rueda de prensa. "Los periodistas la est¨¢is atosigando demasiado", se excus¨® un miembro de la organizaci¨®n.

Si la monja ha levantado pol¨¦mica dentro de la comunidad de epidemi¨®logos y vir¨®logos con sus tesis, ayer Forcades se reafirm¨® en cada uno de los puntos expuestos en el controvertido v¨ªdeo y dijo que ning¨²n experto hab¨ªa sido capaz de rebatirla. Forcades insisti¨® en la supuesta conspiraci¨®n e invenci¨®n del virus H1N1, pero como en el v¨ªdeo, siempre ofreciendo datos en boca de terceros: este experto ha dicho, ese investigador ha asegurado, la revista tal ha publicado y usando en todo momento el condicional "podr¨ªa". Tambi¨¦n sembr¨® dudas sobre la posibilidad de que algunas vacunas est¨¦n contaminadas a ra¨ªz del incidente ocurrido en los laboratorios Baxter cuando se inocul¨® un compuesto a unos hurones. Investigaci¨®n judicial que, como se?al¨®, ha sido archivada judicialmente.

De esta manera, Forcades cit¨® al vir¨®logo australiano Adrian Gibbs, que en una entrevista en Bloomberg, el pasado mayo, asegur¨® que el virus H1N1 era fruto de un laboratorio. Conclusi¨®n que Forcades, aunque evit¨® hacerla suya, coment¨® que "podr¨ªa" ser cierto, porque nunca un virus hab¨ªa combinado ocho segmentos gen¨¦ticos (seis de la zona americana y dos de la euroasi¨¢tica). Asimismo, neg¨® la existencia de estudios cient¨ªficos sobre los efectos secundarios de la vacuna y de los adyuvantes -estimuladores del sistema inmunol¨®gico- a largo plazo. Y afirm¨® que podr¨ªan causar problemas cardiovasculares e inflamaciones intestinales. La doctora no cit¨® el documento, publicado esta misma semana por la Organizaci¨®n Mundial de la Salud, que limita al 0,0005% las reacciones graves en el total de 65 millones de vacunas inyectadas. Y puestos a lanzar mensajes intranquilizadores, se?al¨® que la vacuna del papiloma ha provocado 25 muertes. Lo cierto es que en Estados Unidos la vacuna se ha administrado a 23 millones de adolescentes y ha provocado 32 fallecimientos.

Forcades anunci¨® que liderar¨¢ una iniciativa para reclamar al Gobierno tres medidas: que no obligue a la ciudadan¨ªa a vacunarse, que publicite los contratos con las farmac¨¦uticas y la puesta en marcha de estudios sobre la eficacia de la inmunizaci¨®n.