Correo divino

Los autores de este sorprendente libro son dos profesores universitarios, Luis de Sebasti¨¢n y Josep Sayeras, y cuentan que la idea de escribirlo surgi¨® como un divertimento para entretener las horas de la can¨ªcula entre curso y curso de Econom¨ªa Internacional en la Universidad Centroamericana JSC de El Salvador (UCA).

En una tradici¨®n judeocristiana como la nuestra no resulta extra?o que seres al borde de la desesperaci¨®n dirijan cartas a Dios ("ay¨²dame, Se?or, en este mal trago"); la novedad reside en que las cartas tienen respuesta. "Ya se sabe que si hablas con Dios eres religioso, pero si Dios habla contigo est¨¢s loco", dicen los autores. Pero esta f¨®rmula permite a De Sebasti¨¢n y Sayeras tratar situaciones y problem¨¢ticas de rabiosa actualidad de forma desenfadada.

Los m¨¢s de treinta e-mails "humanos", escritos con iron¨ªa y sarcasmo, son retales de una realidad marcada por la crisis econ¨®mica. Son cartas de parados, inmigrantes, empresarios, especuladores, futbolistas, pol¨ªticos, economistas, universitarios, jubilados, amas de casa y ministras de Econom¨ªa, entre otros, en las que denuncian injusticias de la vida cotidiana, piden consejo o, llanamente, favores.

Las respuestas "divinas" -del Dios de los autores- rezuman emociones contrarias a los de sus emisores: son las de un Dios paciente y misericordioso, bonach¨®n y generoso que busca dar sosiego y soluciones a aquellos que acuden en busca de ayuda y consejo. Un Dios que sabe bastante de econom¨ªa y que ironiza sobre la capacidad de predecir el futuro de los economistas.

En respuesta al e-mail de uno de ellos, especialista en modelos econom¨¦tricos, Dios le confiesa que los economistas no saben predecir el futuro. "Naturalmente eso no es peyorativo ni negativo, puesto que pod¨¦is realizar muy buenas predicciones y luego analizar por qu¨¦ no se cumplieron y explicar los factores que tuvisteis en cuenta o se modificaron en una direcci¨®n que no hab¨ªais previsto. No olvides que existen dos clases de economistas: los que no saben predecir y los que no saben que no saben predecir. Os cre¨¦, entre otras muchas razones, para no dejar solos a los hombres del tiempo, y por lo visto su evoluci¨®n ¨²ltimamente ha sido m¨¢s positiva que la vuestra".

Otro correo electr¨®nico es de una reci¨¦n nombrada ministra de Econom¨ªa que tiene que lidiar con la crisis econ¨®mica y pretende abolir las ayudas a las ONG, ONL, Iglesia cat¨®lica, apost¨®lica y romana, otras iglesias y otros organismos similares. Pero lo quiere hacer con un estilo mucho m¨¢s dialogante y le pide a Dios tener una reuni¨®n, pues considera que se podr¨¢ entender mejor que con sus representantes en la tierra. En su respuesta Dios declina la amable invitaci¨®n ya que la "¨²ltima vez que aparec¨ª en una se arm¨® un fuerte revuelo del que todav¨ªa colean algunos asuntos".

En el pr¨®logo los profesores advierten que posiblemente el libro nos haga sonre¨ªr y que ¨¦se era el principal prop¨®sito. Otro, no menos importante que el anterior, es hacer reflexionar y poner en entredicho determinadas convenciones e ideas sobre la econom¨ªa y la sociedad actual. Estos dos fines convierten a esta obra en un producto extremadamente peligroso. Es un libro para lectores inteligentes, pues trata con humor temas dram¨¢ticos de la realidad cotidiana, para que, usando "el buen sentido de la raz¨®n", puedan sacar sus propias conclusiones.

El ¨²ltimo e-mail es muy especial porque est¨¢ escrito por uno de los autores, por Sayeras, y la dirige al otro autor, Luis de Sebasti¨¢n, que falleci¨® de manera repentina antes de terminar el libro. Se trata de una carta escrita mojando la pluma en el coraz¨®n e ironizando, para ser coherente con el tono general de la obra, diciendo que tal deb¨ªa ser la urgencia de Dios por leerla, incluso antes de que estuviera terminada, "que no ha tenido m¨¢s opci¨®n que reunirse directamente contigo para conseguir la primicia".

Es, pues, el libro p¨®stumo de Luis de Sebasti¨¢n, un ¨²ltimo regalo intelectual surgido de la complicidad con Sayeras, para ayudarnos a comprender mejor la econom¨ªa y el mundo en que vivimos. Una despedida, amable y divina, de un gran economista comprometido con las personas m¨¢s necesitadas y con la b¨²squeda de un mundo m¨¢s justo y solidario. -

Marcel Planellas es profesor de ESADE (Universidad Ramon Llull).