Un a?o con el dinero congelado
Unos 4.000 clientes del Banco Privado Portugu¨¦s luchan por recuperar sus ahorros
Hace poco m¨¢s de un a?o, el Banco Privado Portugu¨¦s (BPP) era considerado un modelo en el mundo de las finanzas lusas, a salvo de cualquier turbulencia en los mercados. Hoy, al borde de la quiebra, lleva 12 meses intervenido por el Gobierno, con los dep¨®sitos congelados de unos 4.000 clientes que invirtieron en un producto garantizado (retorno absoluto), y sobrevive de un pr¨¦stamo de 450 millones de euros con aval del Estado. Su anterior presidente, Jo?o Rendeiro, est¨¢ en la mira del Departamento de Investigaci¨®n y Acci¨®n Penal de Lisboa por varios delitos, y la Comisi¨®n Europea pide explicaciones a las autoridades portuguesas sobre el supuesto plan de viabilidad del banco.
El Gobierno anunci¨® la semana pasada la creaci¨®n de un Fondo Especial de Inversi¨®n (FEI) que deber¨ªa reunir el patrimonio de los clientes afectados en un valor inicial de 1.200 millones de euros y permitir¨ªa empezar a devolver los fondos bloqueados a partir de marzo. Jaime Antunes, l¨ªder de una de las asociaciones de damnificados, se?ala sin entusiasmo que "por primera vez el Gobierno ha asumido una relaci¨®n con los clientes. Ha entrado en el proceso anunciando que est¨¢ dispuesto a dialogar y presionar a las entidades para que el FEI sea creado urgentemente".
La entidad sobrevive gracias a un pr¨¦stamo con el aval del Estado
El Gobierno aprueba un fondo para compensar a los afectados
La Comisi¨®n del Mercado de Valores Mobiliarios (CMVM) ha se?alado que faltan tres elementos para autorizar el fondo especial, a pesar de estar reunidas las condiciones legales: una lista definitiva de los activos y pasivos que formar¨¢n parte del fondo, la opini¨®n del Revisor Oficial de Cuentas y la definici¨®n de la remuneraci¨®n de la sociedad gestora. La CMVM reclama estos datos al BPP desde hace seis meses.
Los problemas del BPP salieron a la luz el 20 de noviembre de 2008, cuando Rendeiro, fundador y todav¨ªa presidente del Consejo de Administraci¨®n del BPP, solicit¨® la garant¨ªa del Estado para un pr¨¦stamo de 750 millones de euros. El Banco de Portugal rechaz¨® la petici¨®n. D¨ªas antes, la agencia calificadora Moody's hab¨ªa rebajado la nota del BPP y advertido de que la situaci¨®n del banco era de "grave desequilibrio financiero". Rendeiro dimiti¨® el 28 de noviembre y tres d¨ªas despu¨¦s el banco regulador intervino y nombr¨® una administraci¨®n provisional encabezada por Ad?o da Fonseca, con el mandato de poner en marcha un plan para salvar la instituci¨®n, que inclu¨ªa un pr¨¦stamo de 450 millones de euros, negociado con seis bancos.
Para evitar que los clientes retirasen en masa sus ahorros, quedaron congelados los dep¨®sitos que ¨¦stos hab¨ªan invertido en productos de retorno absoluto. "Eran clientes que no quer¨ªan correr riesgos y que firmaron un contrato con el banco, seg¨²n el cual ¨¦ste garantizaba el capital m¨¢s los intereses. El banco incumpli¨® el contrato, al no contabilizar en sus cuentas esta responsabilidad y transformar un producto garantizado", explica Jaime Antunes. Cuando los clientes, auditores u otras entidades miraban al BPP ve¨ªan un banco bien capitalizado, porque no ten¨ªa las responsabilidades principales inscritas en el balance. "Ha habido una grave laguna de fiscalizaci¨®n y supervisi¨®n", critica el portavoz de los clientes, que responsabiliza a la CMVM y al Banco de Portugal por no haber ordenado ninguna investigaci¨®n.
El problema se produjo porque el banco hac¨ªa contratos de corto plazo, renovables a tres o seis meses, con productos de madurez de largo plazo. Cuando estall¨® la crisis de los mercados en 2008, los productos financieros que compraron para las carteras de los clientes se devaluaron en un 50%. L¨®gicamente, los clientes con contratos de corto plazo quer¨ªan retirar los fondos. Y el dinero no estaba. El banco nunca ha publicado una lista de clientes afectados, pero los de retorno absoluto rondan los 4.000, con unas 1.700 cuentas, porque hay cuentas que tienen m¨¢s de un titular, con una cartera de unos 1.200 millones de euros.
Ha pasado un a?o desde la intervenci¨®n del BPP. Con el pr¨¦stamo de 450 millones de euros, el Estado dio instrucciones de pagar prioritariamente a otras instituciones financieras (cajas de cr¨¦dito agr¨ªcola, para evitar movilizaciones campesinas), bancos extranjeros (Citibank, Fortis) y ayuntamientos. Pero el dinero no alcanz¨® para todos, y el n¨²mero de acreedores aument¨®. "Esta distribuci¨®n del dinero privilegi¨® a determinados acreedores en detrimento de otros", sostiene Antunes.
Adem¨¢s de los clientes de retorno absoluto, hay otros afectados por la crisis del BPP. Como los que invirtieron en productos de capital riesgo, entre los que figura un n¨²mero apreciable de espa?oles en Vigo y Madrid. Liminorke, con 256 accionistas, empresa portuguesa que invirti¨® en valores energ¨¦ticos, tiene un dep¨®sito en el BPP de 53,4 millones de euros; la espa?ola Kendall Develops, con 150 accionistas, que fue abandonada por el banco, y Private Financeiras, que est¨¢ pr¨¢cticamente quebrada. El BPP gestionaba estas empresas a trav¨¦s de contratos de gesti¨®n, por los que cobraba comisiones millonarias (unos cuatro millones de euros anuales en los casos de Liminorke y Kendall). En este sector de capital riesgo, el dinero comprometido con el BPP asciende a 800 millones de euros.
Algunos clientes han participado en manifestaciones de protesta y han ocupado oficinas del banco. Otros escribieron a Bruselas y lograron que la Comisi¨®n Europea abriera recientemente una investigaci¨®n sobre la operaci¨®n de salvamento del BPP por parte del Gobierno portugu¨¦s, para determinar su compatibilidad con el Derecho comunitario. La Comisi¨®n hab¨ªa aprobado en marzo pasado la garant¨ªa del Estado al pr¨¦stamo de 450 millones de euros, condicionada a un plan de reestructuraci¨®n y viabilidad del banco en seis meses que no ha visto nadie.
Hijo de Zapatero, maestro de las finanzas
Jo?o Rendeiro (Lisboa, 1952), hijo de los due?os de una zapater¨ªa del barrio lisboeta de Campo de Ourique, "pas¨® de la nada a la cima del mundo de las finanzas, con negocios en Portugal, Espa?a, Brasil y ?frica", seg¨²n cuenta la periodista Myriam Gaspar, autora del libro Jo?o Rendeiro, testimonio de un banquero. Esta biograf¨ªa autorizada lo presenta como un triunfador nato y un inversor respetado. En 1996 fund¨® el Banco Privado Portugu¨¦s (BPP), nuevo nombre de la Sociedad de Inversiones Incofina, adquirida dos a?os antes por un grupo de accionistas al BCP.
Al frente de Joma Advisers, Rendeiro fue el presidente del Consejo de Administraci¨®n y accionista principal del BPP, que gestionaba grandes fortunas (era conocido como el banco de los ricos) y ten¨ªa en su consejo consultivo a una larga lista de notables empresarios, financieros y pol¨ªticos. Gran coleccionista de arte, es miembro de la Fundaci¨®n Serralves, en Oporto, y curador del Museo de Lengua Portuguesa, en S?o Paulo. La revista estadounidense Art Review lo consider¨® una de las 100 personas m¨¢s influyentes en el mundo del arte en 2006.
Dimiti¨® el 28 de noviembre de 2008, tras estallar el esc¨¢ndalo, y desde julio de 2009 es uno de los cinco altos ejecutivos del banco declarados sospechosos por el Ministerio P¨²blico. Rendeiro declar¨® ante el fiscal por los presuntos delitos de lavado de dinero, fraude, evasi¨®n fiscal y falsificaci¨®n de documentos. -
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