"El museo entra en el siglo XXI"

Con la apertura de las siete nuevas y espl¨¦ndidas salas, el Museo del Prado arroja luz sobre un periodo irremisiblemente asociado a la oscuridad. Con la nueva y honda reflexi¨®n que la pinacoteca ofrece del periodo comprendido entre el rom¨¢nico y la pintura renacentista, queda rematada la remodelaci¨®n que se inici¨® con la inauguraci¨®n, en 2007, de la ampliaci¨®n del arquitecto Rafael Moneo. Ahora es el turno de siete salas que contienen 120 obras, joyas en su mayor¨ªa, con las que el Prado ofrece todo un acto de justicia po¨¦tica con la Edad Media. El director del museo, Miguel Zugaza, se felicitaba ayer por ello: "Ahora es cuando de verdad el museo entra en el siglo XXI", declar¨®.

- Inventario de un tesoro. De las 34 piezas de esta etapa expuestas se ha pasado a 81. Gran parte permanec¨ªa en los almacenes. Otras han sido recientemente restauradas y las dem¨¢s proceden de donaciones y adquisiciones.

- El papel de Moneo. El responsable de la ampliaci¨®n ha sido tambi¨¦n el encargado de crear los nexos de uni¨®n entre las salas aprovechando dos peque?os patios interiores que conectan el viejo con el nuevo edificio y sirven para facilitar la comunicaci¨®n de los visitantes. Moneo ha dotado a las salas de una atm¨®sfera premeditadamente romana y ha eliminado todo aquello que entorpec¨ªa la contemplaci¨®n. Para el arquitecto lo m¨¢s importante ha sido reencontrarse con el espacio de Villanueva.

- Familiaridad rom¨¢nica. Gabriele Finaldi, director adjunto del museo, es el coordinador de la puesta al d¨ªa de la colecci¨®n de pintura espa?ola de este periodo. Uno de los m¨¦ritos m¨¢s obvios de su trabajo es mostrar en sus debidas condiciones las tablas rom¨¢nicas del museo y que no se pod¨ªan contemplar debidamente. "El p¨²blico est¨¢ poco familiarizado con ellas, pero esto cambiar¨¢. Moneo ha introducido dos puntos de entrada de luz desde los que se puede ver el azul del cielo, algo que enlaza con el mismo cielo que persegu¨ªa la pintura religiosa del per¨ªodo rom¨¢nico".

- 'Imperdibles'. Las joyas son las pinturas murales del siglo XII de la iglesia de la Vera Cruz de Maderuelo (Segovia) y la recreaci¨®n de los interiores de la ermita moz¨¢rabe de San Baudelio de Berlanga (Soria). Pero hay m¨¢s. El nuevo montaje cuenta con piezas clave en cada sala. Entre las m¨¢s importantes, la Virgen de la Leche y Santos, de Pere Lembri; La crucifixi¨®n, de Juan S¨¢nchez. Juan de Flandes deslumbra en este nuevo paseo con cinco pinturas. Y los retablos de Juan de Juanes, Y¨¢nez de la Almedina y Luis de Morales, cierran con brillantez el paseo.