"Ser miembro de una minor¨ªa no te convierte en ¨¢ngel"

Durante dos semanas ha recorrido Italia, Polonia y ahora Portugal para presentar su ¨²ltimo libro, M¨¢s muerto que nunca (Editorial Suma de Letras). Quiz¨¢ viajar tanto le ha quitado el hambre, pero el caso es que Charlaine Harris (1951, Misisipi) no abusa en absoluto del buf¨¦ del hotel lisboeta donde se hospeda. Pide caf¨¦ y se confiesa "agotada" y con ganas de volver a casa. Harris se ha hecho famosa por su serie de novelas sobre Sookie, una camarera sure?a con poderes telep¨¢ticos, y su novio, Bill, un vampiro muy educado. Con ese material, el guionista Alan Ball cre¨® True blood (Canal +), la serie de moda en Estados Unidos y la primera donde los chupasangres son un colectivo p¨²blico y notorio. "Los vampiros son s¨®lo una met¨¢fora, a m¨ª me interesaba hablar de cualquier minor¨ªa oprimida, aunque en este caso se tratara concretamente de la comunidad gay. Aun as¨ª, lo que quer¨ªa reflejar es que ser miembro de una minor¨ªa no te convierte autom¨¢ticamente en un ¨¢ngel. Ese era el n¨²cleo de mis novelas, y creo que lo sigue siendo".

La escritora pens¨® que tendr¨ªa que irse del pueblo cuando se estren¨® 'True blood'

La escritora se cri¨® en una zona donde no era raro ver cruces ardiendo y tipos encapuchados, aunque de eso "hace much¨ªsimo". A pesar del cambio que ha experimentado el pa¨ªs, Harris no niega que no las ten¨ªa todas consigo cuando la serie se convirti¨® en un boom y su nombre empez¨® a aparecer por todas partes: "Si te digo la verdad, cre¨ª que tendr¨ªa que hacer las maletas y huir del pueblo sin perder un segundo. Sin embargo, mis vecinos se me acercaban muy orgullosos y me dec¨ªan: 'Nos encanta True blood y seguro que las cosas malas que se dicen de nosotros no las has escrito t¨²' [tuerce el gesto y estalla en una carcajada]. As¨ª que finalmente me qued¨¦ donde estaba".

Mientras se concede una magdalena trufada con chocolate que deshoja como si fuera una margarita, Harris admite con sonrisa maliciosa que ha ganado "un mont¨®n de dinero". Ahora preside una entidad llamada Sisters in Crime (Hermanas en el Crimen). El grupo es una asociaci¨®n de escritoras estadounidenses comprometidas con el terror y el g¨¦nero negro que vigila que no haya agravios comparativos con sus colegas masculinos.

El ¨¦xito ha tenido consecuencias inesperadas para la veterana escritora: "Asusto a la gente porque parezco la abuela buena que a todo el mundo le gustar¨ªa tener, pero en realidad no escribo como ella. Cuando me encontr¨¦ con los actores de la serie recuerdo que me dijeron: 'Bueno, no es usted como esper¨¢bamos".

Harris ha tardado bastante en alcanzar el ¨¦xito. Sus comienzos no fueron muy prometedores: "Cuando empec¨¦ a escribir lo ¨²nico que quer¨ªa es que mi libro fuera lo suficientemente bueno para que lo publicaran. La cosa no funcion¨® como esperaba, y hace 12 a?os pens¨¦: '?Por qu¨¦ no hacer algo completamente distinto, algo sexy, con un componente sobrenatural, un mont¨®n de aventura?'. Y dibuj¨¦ toda una serie en mi cabeza. ?Sabes? Los vampiros no son simplemente vampiros, nunca. Tambi¨¦n tienen su propia agenda. As¨ª surgi¨® todo el mundo de True blood".

El momento culminante fue cuando lleg¨® a su puerta el DVD con el episodio piloto de la serie: "Yo llevaba mucho tiempo conviviendo con los personajes en mi cabeza, as¨ª que nada pod¨ªa igualar esas im¨¢genes, pero aun as¨ª fue como: '?Oh, Dios m¨ªo, esto es incre¨ªble!".