La protesta 'anti-Bolonia' persigue a los ministros europeos

Los sacos de dormir vuelven a adornar el vest¨ªbulo de la Facultad de Filosof¨ªa de la Universidad Complutense de Madrid. Lo hacen m¨¢s de un a?o despu¨¦s del punto ¨¢lgido del movimiento estudiantil contra el proceso de Bolonia, que ha dado un modelo com¨²n a las universidades de 47 pa¨ªses europeos, con tres ciclos: grado, m¨¢ster y doctorado. Desde el curso pasado, las protestas se han ido apagando en Espa?a, donde la mitad de las carreras est¨¢n ya reformadas. Ahora, tras la movilizaci¨®n en la reciente cumbre sobre el proceso en Viena -que los estudiantes consideraron un ¨¦xito porque los ministros admitieron fallos en las reformas-, distintos colectivos intentan reactivarlo.

En la Facultad de Filosof¨ªa hab¨ªa ayer unos 70 o 100 universitarios, seg¨²n la universidad -entre 200 y 300, seg¨²n los organizadores-. El pasado jueves comenzaron distintas actividades, talleres y acciones -entre otras, una manifestaci¨®n, hoy, en Madrid, apoyada por IU- con motivo del encuentro informal de ministros de Educaci¨®n de la UE que se celebra en Madrid ma?ana y pasado.

Un grupo de alumnos de varios pa¨ªses se encierra en la Complutense

En el encuentro de ministros se hablar¨¢ del espacio europeo de universidades, pero el objeto es mucho m¨¢s amplio. Se trata de definir el papel que debe jugar la educaci¨®n en las pol¨ªticas europeas para salir en buenas condiciones de la actual crisis econ¨®mica. La Comisi¨®n Europea aprobar¨¢ el pr¨®ximo junio la Estrategia 2020, que pretende crear 15 millones de puestos de trabajo con un nivel alto de cualificaci¨®n. Ello requiere, entre otras cosas, pasar del actual 31% de titulados superior (universitarios y de FP de grado superior) al 40%.

Pero en la Facultad de Filosof¨ªa ven un futuro distinto, con una universidad "elitista" sin acceso para los hijos de las clases bajas. All¨ª hay alumnos llegados de Italia, Austria, Alemania o Portugal, explica un portavoz estudiantil. Fabio Salgado, estudiante portugu¨¦s de 24 a?os, cuenta que se han desplazado a Madrid en varias furgonetas alquiladas una treintena de compa?eros procedentes de Lisboa, Oporto o Coimbra. Sus quejas contra el proceso son, entre otras, la falta de financiaci¨®n y que los m¨¢steres son muy caros, quejas que tienen m¨¢s que ver, por otro lado, con la pol¨ªtica de cada Gobierno que con el proceso en s¨ª. Pero quejas muy similares a las de Espa?a, como la de la mercantilizaci¨®n, que uno de los portavoces del grupo organizador explica como la inclusi¨®n en la educaci¨®n superior "de criterios de mercado, como rentabilidad o eficiencia", algo que, dice, no hab¨ªa ocurrido antes y que no es compatible con la universidad que quieren.

Pero tambi¨¦n algo que no se cansan de negar el Gobierno y los rectores. Una y otra vez han insistido en la "dimensi¨®n social" del proceso. De hecho, el ministro de Educaci¨®n. ?ngel Gabilondo, ha explicado este fin de semana que la reuni¨®n de ministros se centrar¨¢ en c¨®mo impulsar esa "dimensi¨®n social" de la pol¨ªtica educativa. Esto es que hablar¨¢n, por ejemplo, de la pol¨ªtica de becas o los mecanismos de igualdad de oportunidades que deben impulsarse en la UE "para que ning¨²n talento se pierda en Europa, y menos por razones econ¨®micas o sociales".