Que suenen los cencerros
La fiesta de la trashumancia convoca en el Aubrac franc¨¦s reba?os de vacas y a muchos curiosos
El curioso t¨ªtulo de la ¨²ltima pel¨ªcula de George Clooney, Los hombres que miraban fijamente a las cabras, sirve para definir la sensaci¨®n que uno tiene al llegar al Aubrac, elevada meseta francesa a 1.300 metros de altitud (repartida entre los departamentos de Loz¨¨re, Cantal y Aveyron), donde cada tercer fin de semana de mayo se concentran decenas de reba?os de vacas para participar en la gran Fiesta de la Trashumancia. Y claro est¨¢, tambi¨¦n miles de personas, lugare?os y for¨¢neos, que miran fijamente a las vacas, adornadas con flores y acebo, que tiene una simbolog¨ªa m¨¢gica: ahuyentar las enfermedades de los animales y protegerlos durante su trashumancia. Esto es, su largo y lento peregrinaje desde las zonas llanas, donde hibernan, hasta los altos pastos de esta privilegiada meseta, donde vivir¨¢n y se alimentar¨¢n durante seis meses, de mayo a octubre. Un espect¨¢culo natural dif¨ªcil de imaginar hoy d¨ªa, en pleno siglo XXI, y menos para quienes viven en las ciudades.
Acercarse hasta esta zona de la Loz¨¨re (Languedoc-Rosell¨®n) es una buena manera de descubrir una tradici¨®n rural y una actividad laboral, el pastoreo, que se resiste milagrosamente a desaparecer engullida por la civilizaci¨®n tecnol¨®gica.
Tol¨®n, tol¨®n
El espect¨¢culo tiene sus preliminares el d¨ªa antes, s¨¢bado 22, con los reba?os acerc¨¢ndose por caminos y ca?adas con su inconfundible serenata de cencerros. Y es que estos, seg¨²n cuentan los pastores, son los que incitan a las vacas a seguir caminando sin parar. Por eso al llegar a su meta los ganaderos las api?an en establos para acercarse a ellas y proceder a la retirada de sus cencerros. Hecha ya la traves¨ªa, no es necesario que sigan sonando.
Pero la gran fiesta tiene lugar el domingo 23 de mayo en Aubrac, peque?a villa con medio centenar de habitantes, cuyo censo se multiplica por diez. Su plaza mayor ser¨¢ el escenario donde entren por riguroso orden los reba?os para recibir la bendici¨®n (seguida de bailes folcl¨®ricos), con las vacas engalanadas para la ocasi¨®n.
Paralelamente, una gran carpa acoge la feria donde venden todo tipo de productos de la regi¨®n, as¨ª como restaurantes donde degustar el plato estrella de la zona: el aligot. Una masa compacta y deliciosa que recuerda a la fondue, formada por pur¨¦ de patata, nata y un queso aut¨®ctono, el Tomme, producido por la leche de las vacas del Aubrac. Un plato del que anta?o se alimentaban los pastores, que viv¨ªan en peque?as y austeras caba?as de piedra llamadas burones.
Al margen de la Fiesta de la Trashumancia, hay otros m¨²ltiples alicientes en el entorno. Como la belleza pl¨¢stica de los prados, adornados estas semanas con miles de flores. En especial los narcisos, que, prensados (cada a?o se recogen all¨ª m¨¢s de 20 toneladas), se usan para fijar los perfumes y son exportados a la localidad de Grasse (en la Costa Azul), capital mundial de la perfumer¨ªa. Brujulear por los alrededores de Aubrac permite tambi¨¦n disfrutar de espect¨¢culos naturales como la cascada y la gruta (con columnas bas¨¢lticas) de Deroc, con una ca¨ªda de 32 metros; de lagos como Sant Andeole, presidido por una gran cruz, o de centenarios puentes de piedra como el del r¨ªo Bes (siglo XVIII), sobre un paso de piedra que sol¨ªa inundarse.
Camino de Santiago
La meseta del Aubrac es adem¨¢s un referente mundial para los amantes del senderismo, no en vano por sus tierras transcurre tambi¨¦n parte destacada del Camino de Santiago franc¨¦s, reconocido en 1997 por el Consejo de Europa como primer itinerario cultural europeo. Una ruta que atraviesa el G¨¦vaudan desde Le Puy-en-Velay (cuyo obispo Godescale fue el primer peregrino franc¨¦s a Santiago, en 951, andando unos 3.000 kil¨®metros) hasta Roncesvalles, hacia Espa?a. El tramo que corresponde al Aubrac, el de la GR-65 que va de St.-Alban Limagnole a la citada Aubrac, pasa por Aumont-Aubrac y Nasbinals. El primero es un pueblo muy animado, etapa del camino santo, en el que destaca la Maison du Prieur¨¦ (hoy oficina de turismo), con su fachada de granito y su iglesia parroquial. Nasbinals es la capital del Aubrac en su parte de la Loz¨¨re y punto de encuentro de peregrinos que visitan su magn¨ªfica iglesia rom¨¢nica del siglo XIV. Y como guinda, para reponer fuerzas y relajar el cuerpo y la mente, podemos sumergirnos en las reconfortantes aguas termales de La Chaldette (www.lachaldette.com).
Y por si fueran pocas razones para viajar al Aubrac, cerca de la localidad de Laguiole se esconde el restaurante de Michel Bras (www.bras.fr), un tres estrellas Michelin en plena monta?a rodeado de pastos.
Gu¨ªa
C¨®mo llegar
? Por la AP-7 hasta La Jonquera. Seguir por la A-9 hasta Beziers y continuar por la A-75, pasando por el viaducto de Millau hasta Aumont-Aubrac.
Comer
? Buron Lac de Born (00 33 04 66 32 52 20). Junto al lago del mismo nombre pr¨®ximo a Nasbinals. Carnes a la brasa y aligot. Men¨²s por 18 y 23 euros.
? Buron du Ch¨¦ (00 33 04 66 32 55 72). En Nasbinals. Ensaladas, brasa y tablas de quesos. Precio medio a la carta, entre 15 y 25 euros por comensal.
Dormir
? Hotel Camillou (www.camillou.com). En Aumont-Aubrac. Un tres estrellas con restaurante con una estrella Michelin, a cargo del chef Cyril Attrazic. Habitaci¨®n doble, 67 euros.
? L? d'Ici (www.lodici-aubrac.com/fr/la-maison). En Nasbinals. Casa rural con encanto. 65 euros.
Informaci¨®n
? Oficina de turismo de Nasbinals (00 33 04 66 32 55 73).
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.