Los recortes calentaron la protesta
An¨¢lisis de los puntos m¨¢s conflictivos del Estatuto y su ajuste constitucional
La sentencia del Tribunal Constitucional que ayer llev¨® a la calle a miles de catalanes anula 14 art¨ªculos de los 128 que recurri¨® el PP y dicta interpretaciones restrictivas sobre otros 27 preceptos. Mayoritariamente, las tachaduras de inconstitucionalidad versan sobre aspectos simb¨®licos, aunque en otros casos derrumban alguna de las paredes maestras de la carta auton¨®mica, como el blindaje de ciertas competencias de la Generalitat o la aspiraci¨®n de descentralizar el Poder Judicial. Adem¨¢s, abre la puerta a cuestionar aspectos como el modelo ling¨¹¨ªstico de la escuela, que tiene el catal¨¢n como lengua vehicular en todas las etapas.
- Los objetivos. El Estatuto se aprob¨® en 2006 con cuatro grandes objetivos: definir Catalu?a como naci¨®n, lograr un nuevo sistema de financiaci¨®n, resarcir el d¨¦ficit de infraestructuras de esta comunidad y blindar determinadas competencias. Los tres primeros objetivos, aunque con modificaciones, han aguantado el pulido del tribunal, aunque los magistrados han a?adido interpretaciones que, sobre todo a medio plazo, pueden desnaturalizar la carta auton¨®mica.
- El t¨¦rmino naci¨®n. La definici¨®n de Catalu?a como naci¨®n en el Pre¨¢mbulo se mantiene, pero la sentencia hace una reinterpretaci¨®n al declarar que el concepto carece de eficacia jur¨ªdica y solo podr¨¢ utilizarse en sentido ideol¨®gico, hist¨®rico o cultural. Lo mismo ocurre con los s¨ªmbolos "nacionales" como el himno o la bandera. La frase que m¨¢s ha indignado a los partidos catalanistas es la conclusi¨®n de que "la Constituci¨®n no conoce otra que la Naci¨®n espa?ola". Las reiteradas alusiones a la "indisoluble unidad de Espa?a", una docena a lo largo de la sentencia, acaban de acotar el simbolismo de la definici¨®n de Catalu?a como naci¨®n.
- Las competencias. Las competencias que la Generalitat y el Gobierno central comparten en Catalu?a, como la Educaci¨®n, no quedan tan trabadas como en el Estatuto votado en refer¨¦ndum. El art¨ªculo 111, que obligaba al Estado a aprobar normas con rango de ley y no inferior para intervenir en estos asuntos, ha sido declarado inconstitucional. Seg¨²n los magistrados, "tambi¨¦n es posible predicar el car¨¢cter b¨¢sico de normas reglamentarias y de actos de ejecuci¨®n del Estado". Adem¨¢s, a?aden que un Estatuto no puede dictar qu¨¦ tipo de normas debe aprobar el Gobierno central. Tambi¨¦n ha quedado tocado el modelo de "bilateralidad" que quer¨ªa el Estatuto en las relaciones Generalitat-Estado. La sentencia deja claro que la bilateralidad no es una relaci¨®n entre iguales y que el Estado siempre goza de una posici¨®n de superioridad.
- La financiaci¨®n. El cap¨ªtulo referido a la financiaci¨®n de la Generalitat ha sufrido retoques, pero eliminan solo dos incisos. Se invalida el principio de la nivelaci¨®n, pero no deber¨ªa tener grandes consecuencias, porque el modelo est¨¢ ya consagrado en la LOFCA. Lo que s¨ª avala el alto tribunal es la disposici¨®n adicional tercera, que obliga a que las inversiones del Estado en Catalu?a sean al menos equivalentes al peso de la econom¨ªa catalana en el conjunto de Espa?a: en torno al 18,8%.
- La justicia. El poder judicial catal¨¢n s¨ª queda tocado. Los magistrados hablan de "evidente exceso" en este cap¨ªtulo al intentar crear un Consejo de Justicia de Catalu?a como ¨®rgano de gobierno del poder judicial. Lo dejan todo en manos de un eventual cambio de la Ley Org¨¢nica del Poder Judicial.
- La lengua. Dentro de los aspectos considerados constitucionales pero que pueden dar pie a un nuevo conflicto legal est¨¢ la interpretaci¨®n que los magistrados hacen de la definici¨®n del catal¨¢n como lengua "vehicular" de la ense?anza que aparece en el art¨ªculo 35. El alto tribunal aclara que "no cabe pretender leg¨ªtimamente" que la ense?anza se imparta "¨²nica y exclusivamente en una de las dos lenguas cooficiales". "Es constitucionalmente obligado que las dos lenguas cooficiales sean reconocidas (...) como vehiculares", concluye. El consejero de Educaci¨®n del Gobierno catal¨¢n, Ernest Maragall, manifest¨® ayer que considera que la interpretaci¨®n del Constitucional no conduce a ning¨²n cambio en el modelo ling¨¹¨ªstico escolar.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
Archivado En
- Tribunal Constitucional
- Protestas sociales
- Comunidades aut¨®nomas
- Orden p¨²blico
- Estatutos Autonom¨ªa
- Pol¨ªtica auton¨®mica
- Seguridad ciudadana
- Malestar social
- Tribunales
- Catalu?a
- Administraci¨®n auton¨®mica
- Poder judicial
- Espa?a
- Problemas sociales
- Pol¨ªtica
- Administraci¨®n p¨²blica
- Proceso judicial
- Sociedad
- Estatutos
- Normativa jur¨ªdica
- Legislaci¨®n
- Justicia