Una 'birra' en Flandes

Gestado en la confluencia de dos r¨ªos -Escalda, el mayor de B¨¦lgica, y Lys, su gran afluente-, Gante lleg¨® a rivalizar con el mism¨ªsimo Par¨ªs en pleno Medievo (entre los siglos XIII y XV) como principal metr¨®poli europea, por la importancia comercial de esas autopistas fluviales. Y sus dos grandes muelles -Graslei (herboristas) y Korenlei (graneros)- le otorgaron un genuino sabor marinero pese a hallarse en el coraz¨®n del hist¨®rico Flandes y... ?a 55 kil¨®metros del mar del Norte! Pasado su momento de mayor esplendor y tambi¨¦n la siempre dura traves¨ªa por el desierto de la historia, la ciudad natal del rey espa?ol Carlos I (primer monarca de la Casa de Austria) ha despertado de su letargo impulsada por su legado hist¨®rico. Un boom cultural amparado en su aire estudiantil y en su patrimonio arquitect¨®nico que la convierte en uno de los mayores museos al aire libre de Flandes. Gante cuenta con 240.000 habitantes, 50.000 universitarios, 74 parques, 30 hect¨¢reas de zonas peatonales en el centro... y 650 bares en los que degustar 250 diferentes tipos de cervezas. Y adem¨¢s, desde hoy y hasta el 26 de julio la ciudad se echa a la calle en su gran fiesta (Gentse Feesten; www.gentsefeesten.be) con conciertos gratuitos, m¨¢s de 700 obras de teatro, exposiciones, visitas guiadas y fuegos artificiales.

9.00 Un, dos, tres...

Iniciamos el recorrido en Korenmarkt (1), generosa plaza en el coraz¨®n de la ciudad, con una bella coreograf¨ªa urbana de coches, bicicletas, autobuses, tranv¨ªas y peatones, todos circulando en perfecta armon¨ªa. Desde ella -o mejor a¨²n, desde el majestuoso puente de San Miguel- se contempla una de las mejores postales de Gante: la de su tr¨ªo de torres perfectamente alineadas. La primera es la de San Nicol¨¢s (2), cuya iglesia ha sobrevivido a dos incendios y a su conversi¨®n en cuadra de caballos durante la Revoluci¨®n Francesa. La segunda, el Belfort (3) (diario, 10.00 a 18.00, cinco euros), campanario que advert¨ªa de los peligros que acechaban a los ciudadanos. Desde su atalaya se tiene la mejor panor¨¢mica del centro, y su espectacular carill¨®n, de 44 campanas, ofrece seductoras melod¨ªas. Y la tercera es la catedral de San Bav¨®n (4) (abre de 8.30 a 18.00; domingos, de 13.00 a 18.00), que atesora la mayor joya de Gante: La adoraci¨®n del Cordero M¨ªstico, obra maestra de los hermanos Hubert y Jan van Eyck y de la escuela flamenca. La obra completa se presenta como un pol¨ªptico de 24 paneles, aunque la escena de la adoraci¨®n es su pieza clave, con una perspectiva naturista innovadora para su tiempo. Para admirar el original deben hacerse grandes colas ante su capilla, de acceso limitado. Pero hay una excelente copia en otra capilla abierta al p¨²blico sin l¨ªmites y que permite ser fotografiada. En esta catedral puede tambi¨¦n admirarse una gran obra de Rubens: La vocaci¨®n de San Bav¨®n.

12.30 Primero flores, luego un aperitivo

Como en Flandes se come pronto, es hora de abrir boca con un tapeo muy especial que sirven los domingos en la cercana plaza Kouter (5). All¨ª, unas altas mesas redondas invitan a la tertulia mientras se degusta media o una docena de ostras regadas con un buen vino de la tierra. La propia plaza se viste de colores para acoger un llamativo mercado de flores diario (de 7.00 a 13.00). Retomando la orilla del Lys regresamos hacia el centro en busca de alg¨²n buen restaurante o de una comida m¨¢s informal, con productos t¨ªpicos de Flandes, en la Lonja (6) (Groentenmarkt, 7; de martes a domingo, de 10.00 a 18.00), antiguo mercado de carne. Un poco m¨¢s al norte est¨¢ la Vrigdagmark (7), hist¨®rica plaza donde se realizaban las grandes celebraciones. La explanada concentra varios atractivos: un gran ca?¨®n de hierro forjado (Margarita la Rabiosa) del siglo XV junto al que todos se fotograf¨ªan; la m¨¢s popular parada de patatas fritas de Gante, Jozef, que data de 1898, y el mercadillo de los viernes y s¨¢bados.

16.00 Dise?o detr¨¢s de la fachada rococ¨®

Saciado el apetito, es un buen momento para recrear la vista en el Museo del Dise?o (8) (Jan Breydelstraat, 5; www.designmuseumgent.be; abre de martes a domingo, de 10.00 a 18.00; entrada, cinco euros), ubicado en un edificio del siglo XVIII de fachada rococ¨®. All¨ª se exponen muebles y objetos art d¨¦co y art nouveau, destacando la sorprendente noria de Alessi, a base de miniaturas, en la planta superior. Cruzando por el bello puente de los Decapitados se accede al impresionante Castillo de los Condes de Flandes (9) (Sint-Veerleplein, 11; www.gent.be/grabensteen; de 9.00 a 18.00; ocho euros, con audiogu¨ªa). Una fortaleza iniciada en el siglo IX, con sucesivas modificaciones hasta el siglo XII. Sus almenas, y sobre todo el torre¨®n central, permiten contemplar la ciudad desde diferentes ¨¢ngulos. A destacar en su interior la sala con instrumentos medievales de tortura, fiel testimonio de sus s¨®tanos carcelarios. De noche, iluminado, el castillo tiene una presencia m¨¢gica cautivadora.

18.00 Una tarde con paseo fluvial

Tras visitar el castillo podemos adentrarnos en Patershol, un viejo barrio obrero convertido en refugio de artistas, cuyo laberinto de angostas callejas empedradas est¨¢ plagado de boutiques de lo m¨¢s chic, salas de arte y restaurantes. Los fans de lo kitsch no deben perderse De Het (10) (Kraanlei, 81) -literalmente, el infierno-, una curiosa tienda repleta de mil im¨¢genes demoniacas, con un restaurante aterrador. Y los m¨¢s golosos dar¨¢n rienda suelta a sus dulces caprichos en Temmerman (11) (Kraanlei, 79), tienda de golosinas y pastas variadas, como las t¨ªpicas neuzen (naricitas).

Quien prefiera una tarde relajada puede acercarse a los muelles y hacer un minicrucero fluvial por el Lys con el Boat in Gent (www.boatingent.be, tour hist¨®rico, 50 minutos, seis euros, 3,50 ni?os), que zarpa del embarcadero de Kraanlei (12). Tambi¨¦n hay la opci¨®n de dar una vuelta en carruaje desde Sint-Baafsplein (13) (media hora, 30 euros), junto al Belfort. En la misma plaza est¨¢ una de las m¨¢s prestigiosas chocolater¨ªas, Van Hoorebeke, con 26 tipos distintos de bombones.

19.30 Sabores belgas

Al caer el sol, Gante resplandece con miles de luces que iluminan sus regios edificios y la animaci¨®n se concentra en los dos muelles, Korenlei y Graslei (14), que, enmarcando el Lys, proporcionan el mejor souvenir digital de la ciudad. Sus a?ejas fachadas gremiales dan cobijo a restaurantes vanguardistas como el Belga Queen (15) (Graslei,10; www.belgaqueen.be), multiespacio con m¨²sica en vivo, zona lounge, cocteler¨ªa y cocina belga, o el Allegro Moderato (16) (Korenlei, 7 B; www.restoallegro.com), elegante y sofisticado, de alta cocina francesa.

22.00 Las noches 'flamencas'

Nada que ver con nuestro cante jondo. La movida gantesa es bien distinta y su epicentro est¨¢ un poco al norte de Korenmarkt. El Club Central (17) (Hoogpoort, 32; www.clubcentral.be) ofrece dos ambientes: latino (salsa, merengue, bachata) y dance (m¨²sica de los a?os setenta y ochenta). Y muy cerca, para los amantes del jazz, el Hot Club de Gand (18) (Groentenmarkt, 15 B; www.hotclubdegand.be). Para quien prefiera el ambiente de taberna con cata de cervezas belgas, como la Kwak, su templo es De Dulle Griet (19) (Vrijdagmark, 50 www.dullegriet.be), que presume de tener 250 tipos distintos. ?Salud!

El Gante m¨¢s vanguardista