Los grandes patronos atacan la pol¨ªtica energ¨¦tica de Merkel

Los rebeldes retratados en el diario econ¨®mico Handelsblatt llevan todos corbata de seda: son 40 dirigentes empresariales y hombres p¨²blicos, unidos en una campa?a contra la pol¨ªtica energ¨¦tica e industrial de la canciller Angela Merkel. En un anuncio a toda p¨¢gina que se publica hoy en diversos medios alemanes, los ejecutivos arremeten contra el proyecto gubernamental de introducir un impuesto para el combustible de las centrales nucleares. La tasa es uno de los puntos del ambicioso plan de austeridad del Gobierno, que contempla el ahorro de 80.000 millones de euros hasta 2014. Bajo el titular Valent¨ªa y realismo para el futuro energ¨¦tico de Alemania, los firmantes defienden la necesidad de centrales nucleares y el uso del carb¨®n como combustible en las centrales t¨¦rmicas. Acusan al Gobierno de bloquear "inversiones necesarias" para el futuro. Sin miedo a la paradoja, el texto augura que ese futuro "pertenecer¨¢ a las energ¨ªas renovables". Pero "hay que permanecer realistas" hasta que llegue.

El aplazamiento de la clausura total de las centrales nucleares es uno de los puntos m¨¢s controvertidos del programa con el que Merkel gan¨® las elecciones generales hace 11 meses. El nuevo impuesto, anunciado en junio, aliment¨® la pol¨¦mica entre el lobby nuclear y los sectores democristianos que, capitaneados por el ministro de Medio Ambiente, Norbert R?ttgen, no quieren que el apag¨®n se posponga indefinidamente.

Esta alianza empresarial, que el peri¨®dico califica como la cr¨¨me de la cr¨¨me, incluye al consejero delegado del Deutsche Bank, Josef Ackermann, as¨ª como sus hom¨®logos en Bayer, Werner Wenning; Thyssen-Krupp, Ekkehard Schulz, y BASF, J¨¹rgen Hambrecht; adem¨¢s de los m¨¢ximos responsables de los cuatro grandes grupos energ¨¦ticos del pa¨ªs: E.ON, RWE, Vattenfall y EnBW.