Autonom¨ªas del PP imponen el doble de servicios m¨ªnimos que Fomento

Esperanza Aguirre no se caracteriza por ocultar sus ideas ni sus fuentes de inspiraci¨®n. Siempre ha reivindicado como ejemplo la figura de Margaret Thatcher, la ex primera ministra inglesa, llamada dama de hierro entre otras cosas porque consigui¨® vencer la batalla contra los mineros escoceses. Aguirre ha abierto una batalla contra los sindicatos a cuenta de los liberados mal vista incluso en su partido -"hace muy feliz a Zapatero", le dijo Gallard¨®n-. En junio ya se enfrent¨® a los sindicatos del Metro de Madrid. Ayer redobl¨® el pulso, al imponer unos servicios m¨ªnimos en el transporte madrile?o para la huelga general del pr¨®ximo mi¨¦rcoles que doblan lo pactado entre los sindicatos y Fomento.

No fue la ¨²nica. Varias comunidades del PP trataron de imponer servicios m¨ªnimos del 50% o superiores, frente al 25% que ha pactado Jos¨¦ Blanco, que sube al 30% en horas punta. Mientras, las comunidades socialistas pactaban sin problemas con las centrales ese 25%. Las comunidades del PP agitan y endurecen as¨ª una huelga planteada no contra este partido, sino contra el Gobierno central del PSOE por una reforma laboral que abarata el despido, que pasa de 45 d¨ªas por a?o a 20 en la mayor¨ªa de los casos.

Algunas comunidades del PP, como la valenciana, presidida por Francisco Camps, imputado en el caso G¨¹rtel, llegaron a plantear servicios m¨ªnimos del 60% en el transporte y del 50% en la televisi¨®n p¨²blica. Conrado Hern¨¢ndez, l¨ªder local de UGT, asegur¨® que "incluso llegaron a pedir un 70% para los servicios de comedores infantiles, que no comienzan hasta octubre". Finalmente, la Generalitat cedi¨® y pact¨® con los sindicatos los mismos m¨ªnimos que Fomento.

Esto es, Camps acept¨® en la Comunidad Valenciana lo mismo que Aguirre rechaz¨® en Madrid. La direcci¨®n nacional del PP, que ha tratado de marcar un perfil bajo en la fase previa a la huelga general, ya que Mariano Rajoy entiende que se trata de una batalla pol¨ªtica dentro de la izquierda, no ha emitido ninguna doctrina general. Sin embargo, el enfrentamiento de sus comunidades con los sindicatos por los servicios m¨ªnimos da un giro pol¨ªtico a la huelga, en la que se implica el PP.

En Castilla y Le¨®n, CC OO y UGT cargaron contra la Junta presidida por Juan Vicente Herrera porque los servicios m¨ªnimos aprobados, que calificaron de "abusivos", "incluyen un jardinero para el edificio del presidente y un limpiador para cada director general". La educaci¨®n tambi¨¦n fue centro de la discordia.

En Murcia tampoco hubo acuerdo. Ni en Galicia, aunque all¨ª s¨ª hubo acercamiento en transportes, donde la Xunta propon¨ªa un 13,7% que s¨ª aceptaba UGT pero no CC OO. Por el contrario, los Gobiernos socialistas de Andaluc¨ªa, Catalu?a o Castilla-La Mancha no tuvieron problemas en pactar servicios m¨ªnimos en la l¨ªnea de Fomento y en educaci¨®n.

La situaci¨®n de mayor enfrentamiento se vivi¨® en Madrid. Despu¨¦s del acuerdo de madrugada en Fomento, el pacto parec¨ªa cercano. Desde primera hora de la ma?ana hubo contactos entre Esperanza Aguirre y los l¨ªderes sindicales, Javier L¨®pez (CC OO) y Jos¨¦ Ricardo Mart¨ªnez (UGT).

La comunidad propon¨ªa un 40% en el transporte, los sindicatos quer¨ªan bajar al 25% pactado con Fomento. Se negociaban los detalles, la cosa iba bien, pero a mediod¨ªa Aguirre decidi¨® romper la negociaci¨®n y aprobar un decreto por el que impone un 50% de servicios m¨ªnimos.

Francisco Granados, mano derecha de la presidenta, asegur¨® que los sindicatos no hab¨ªan querido aceptar cosas que s¨ª hab¨ªan asumido en otras comunidades, mientras las centrales contestaban que Aguirre quiere ser el "perejil de todas las salsas" y por eso ha decidido no pactar, para ser protagonista de la pol¨¦mica.