"La corrupci¨®n pasar¨¢ factura al PP"
Sustituy¨® a Gl¨°ria Marcos con la legislatura ya en marcha, tras la ruptura de la coalici¨®n Comprom¨ªs pel Pa¨ªs Valenci¨¤. Marga Sanz (Valencia, 1951), poco proclive a los ademanes extremos, ha mantenido una actitud combativa y serena. Junto a los otros dos diputados del grupo de no adscritos, Marina Albiol y Llu¨ªs Torr¨®, aspira a conquistar de nuevo un espacio propio de Esquerra Unida en el hemiciclo de las Cortes.
Pregunta. Tiene usted de aqu¨ª al d¨ªa 6 de octubre mucho trabajo: el debate de pol¨ªtica general, la huelga general, la convenci¨®n program¨¢tica de Esquerra Unida y la asamblea para la elecci¨®n de candidatos. Empecemos por la huelga general. ?Por qu¨¦ defiende usted que hay que secundarla?
"El victimismo es la cortina de humo para no asumir sus incapacidades"
"La mancha de la corrupci¨®n se ha ido extendiendo por el Pa¨ªs Valenciano"
"Habr¨ªa que reponer impuestos que no tiene sentido haber quitado"
"Ha habido una dejaci¨®n absoluta del Consell con las cajas de ahorros"
"Creo que se puede salir de la crisis de otra forma"
"Seguimos siendo la mejor alternativa de izquierdas al bipartidismo"
Respuesta. Lo m¨¢s importante es que la huelga general pueda frenar las pol¨ªticas antisociales y de recortes del Gobierno de Zapatero. Es un Gobierno que ha puesto al pa¨ªs de rodillas ante los mercados financieros y estamos a las puertas de un retroceso hist¨®rico en derechos sociales y laborales. M¨¢s all¨¢ de la convocatoria concreta contra la reforma laboral, estamos ante la posibilidad de una restricci¨®n de elementos fundamentales de la democracia, porque limitar la capacidad de intervenci¨®n social y pol¨ªtica de los sindicatos o de los organismos de representaci¨®n social es un atentado contra los pilares del Estado de derecho y la democracia.
P. ?Pero c¨®mo ayudar¨¢ a combatir la crisis? Detr¨¢s de los recortes hay una crisis econ¨®mica y alguna gente se pregunta c¨®mo ayudar¨¢ la huelga a resolverla.
R. Lo que no sirve para combatir la crisis es reducir la capacidad adquisitiva a cinco millones de pensionistas y a cuatro millones y medio de empleados p¨²blicos, recortar la inversi¨®n p¨²blica del Estado, ni much¨ªsimo menos iniciar un proceso de privatizaci¨®n de las cajas de ahorros que deber¨ªan actuar como banca p¨²blica para impulsar la econom¨ªa, el cambio de modelo productivo y la ayuda a las familias con m¨¢s problemas... Eso es lo que no se hace y se deber¨ªa hacer. Si se pierde un d¨ªa de trabajo en la huelga, es menos de lo que van a suponer los recortes y la p¨¦rdida de capacidad adquisitiva de la mayor¨ªa de la poblaci¨®n.
P. ?Pero usted cree que se puede salir de la crisis sin hacer sacrificios sociales?
R. Creo que se puede salir de otra forma. En el periodo de bonanza ha habido mucha gente que ha ganado much¨ªsimo y, sin embargo, el reparto de la tarta de la renta ha disminuido cinco puntos en contra de las rentas del trabajo. Por tanto, el modelo no ha sido justo en su reparto. Nosotros lo que decimos es que ahora quien m¨¢s se ha enriquecido tiene que aportar m¨¢s a la sociedad. ?Y eso c¨®mo se hace? Pues dando un giro a las pol¨ªticas econ¨®micas, con una reforma fiscal necesaria, que deber¨ªa poner en manos del Estado ingresos procedentes de eso que se llama sicav, de la reposici¨®n del impuesto del patrimonio, de los impuestos de transmisiones, de los impuestos sobre la banda m¨¢s alta del IRPF y de la lucha contra el fraude fiscal y la econom¨ªa sumergida. De ah¨ª se podr¨ªan conseguir much¨ªsimos recursos para el impulso econ¨®mico y para paliar los efectos m¨¢s sangrantes de la crisis en las familias. A final de este a?o habr¨¢ 750.000 personas que habr¨¢n agotado el seguro y las prestaciones de desempleo.
P. ?No es una paradoja que Izquierda Unida suba en las encuestas gracias a la crisis econ¨®mica?
R. La otra cara de la moneda de la crisis, que ha causado situaciones muy dram¨¢ticas, es que ha puesto a mucha gente favor de las pol¨ªticas que siempre hemos defendido, de cambio de modelo productivo, de defensa de lo p¨²blico, de cohesi¨®n social. Eso avala nuestra subida en las encuestas. Se hace patente que ten¨ªamos raz¨®n en las pol¨ªticas que siempre hemos defendido.
P. Eso abre expectativas de que Esquerra Unida pueda tener grupo propio en el pr¨®ximo Parlamento valenciano.
R. Estoy convencida de que lo vamos a tener. Somos la tercera fuerza del Pa¨ªs Valenciano. Seguimos siendo la formaci¨®n pol¨ªtica mejor situada como alternativa de izquierdas al bipartidismo.
P. A los ciudadanos que se preguntan si en las elecciones auton¨®micas del a?o que viene puede haber un cambio, ?qu¨¦ les dir¨ªa?
R. Los valencianos y las valencianas se van dando cuenta de que este Consell no sirve, de que aqu¨ª hay un grupo de pol¨ªticos imputados del PP que se empe?an en seguir saliendo en la foto y que tienen secuestrada la voluntad de los valencianos y las valencianas en las instituciones. As¨ª no se puede gobernar, as¨ª no se puede dar un proyecto de futuro para el Pa¨ªs Valenciano y, por tanto, estas situaciones, en que la corrupci¨®n llega cada vez a m¨¢s rincones de nuestras instituciones, est¨¢n haciendo mella en la conciencia de los valencianos y valencianas y estoy convencida de que eso pasar¨¢ factura al Partido Popular.
P. ?Pens¨® que pod¨ªamos llegar a esta situaci¨®n?
R. Cuando salt¨® el caso Brugal este verano pens¨¦: "?M¨¢s todav¨ªa?". Porque, realmente, lo tenemos todo tocado. Hay dos Diputaciones tocadas, el presidente de la Generalitat, tres consellers, el Ayuntamiento de Orihuela, concejales... La mancha se ha ido extendiendo por todo el Pa¨ªs Valenciano. Ellos cuentan con un aparato de propaganda magn¨ªfico que es R¨¤dio Televisi¨® Valenciana, que cambia la historia d¨ªa a d¨ªa, pero lo cierto es que era impensable llegar a esta barbaridad. Y eso conlleva un recorte de libertades, porque la ¨²nica manera de intentar tapar sus verg¨¹enzas es restringir la capacidad de actuaci¨®n de la oposici¨®n y restringir la capacidad de cr¨ªtica de la sociedad. Se ha ido recortando la capacidad de manifestaci¨®n y de expresi¨®n, y de representaci¨®n, de la sociedad para acallar la cr¨ªtica.
P. ?No cree que hay poca respuesta social, poca movilizaci¨®n ciudadana?
R. En estos momentos empieza a darse una movilizaci¨®n por los problemas concretos que este Consell es incapaz de resolver. No hab¨ªa visto un verano con m¨¢s protestas: los dependientes, los bomberos, los trabajadores de justicia, los profesores, las bandas de m¨²sica. La gente empieza a ser consciente de la incapacidad de este Consell para gobernar y se mueve por lo que m¨¢s le afecta.
P. Digamos que el malestar es m¨¢s bien difuso.
R. S¨ª, pero el comentario est¨¢ en la calle: "Estos se est¨¢n enriqueciendo, son unos sinverg¨¹enzas". Ahora hay que ver c¨®mo se transforma en una actitud pol¨ªtica.
P. Usted es economista y profesora de Administraci¨®n de Empresas. La situaci¨®n financiera de la Generalitat parece abocar a medidas de saneamiento y recortes. ?C¨®mo podr¨ªa enfocarlo un hipot¨¦tico Gobierno progresista?
R. El problema es que este Gobierno, cuando hace recortes, los hace del gasto social y no de la f¨®rmula 1, las regatas, la Volvo Ocean Race... Aqu¨ª hay unas prioridades. Cuando un Gobierno ha malgastado el dinero, lo ha usado incorrectamente, est¨¢ dejando las arcas vac¨ªas y su insolvencia es manifiesta, lo m¨ªnimo que puede hacer es recortar el gasto superfluo, no invertir en proyectos que nos endeudan m¨¢s y no son sostenibles y destinar recursos a lo social, a impulsar la reindustrializaci¨®n. Habr¨ªa que reponer impuestos que no tiene sentido haber quitado. Si adem¨¢s hubiera voluntad de colaborar con el Gobierno central en perseguir la econom¨ªa sumergida, que aqu¨ª supone el 24% o 25%, tendr¨ªamos m¨¢s recursos.
P. Ese es un aspecto, el de la propia Administraci¨®n, pero est¨¢ tambi¨¦n el del modelo econ¨®mico. ?Cree posible la reindustrializaci¨®n o ya es una utop¨ªa?
R. Para empezar ha habido una dejaci¨®n absoluta del Consell con el tratamiento de las cajas de ahorros. La desterritorializaci¨®n de las cajas es un atentado a la capacidad de autogobierno de los valencianos. Se trata de instrumentos fundamentales para orientar la econom¨ªa y el cambio de modelo. Yo hubiera trabajado, como han hecho otros Gobiernos auton¨®micos, para que esas entidades se quedaran y actuaran sobre el territorio. Por otra parte, el cambio de modelo productivo significa que los huevos que metimos exclusivamente en el cesto de la construcci¨®n hay que ponerlos en otros sectores. Hay que apostar por el dise?o, la inversi¨®n en I+D+i, en formaci¨®n de la mano de obra, por m¨¢s cultura y m¨¢s sostenibilidad, con un papel central de lo p¨²blico como elemento de cohesi¨®n. Ese modelo es posible.
P. Otro tema recurrente de la legislatura ha sido la queja del PP ante el Gobierno central...
R. El victimismo del Consell no es m¨¢s que la cortina de humo para no asumir sus propias responsabilidades e incapacidades. En Esquerra Unida tenemos claro que el sistema de financiaci¨®n que sufre el Pa¨ªs Valenciano es injusto, pero el Consell tiene la responsabilidad de haber pactado con los socialistas un Estatuto de Autonom¨ªa que dej¨® de lado la poblaci¨®n como elemento de financiaci¨®n y a la hora de negociar con el Gobierno central prefiri¨® ir a hacerse la foto antes que mejorar las condiciones de financiaci¨®n. El recurso al victimismo, al final, solo empeora la situaci¨®n de los valencianos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.