32.000 euros por una exclusiva

Hay 2.000 periodistas acreditados en el campamento de la Esperanza, al pie de la mina San Jos¨¦, compitiendo por encontrar una toma de corriente, una mesa y... sobre todo, por una buena entrevista. El comentario generalizado entre varios compa?eros chilenos es que la puja por las declaraciones en exclusiva de los familiares la iniciaron los canales japoneses de televisi¨®n. Pero no fueron los ¨²nicos. Fuentes del diario alem¨¢n Bild indicaron que la semana pasada enviaron a uno de los mineros bajo tierra un contrato en el que se compromet¨ªan a pagarle unos 20 millones de pesos chilenos (32.000 euros) a cambio de sus declaraciones durante 72 horas. Primero le ofrecieron la mitad y despu¨¦s de varios tira y afloja, se fij¨® esa cantidad. El contrato lo firm¨® el propio minero.

"La foto se la llevar¨¢ el que m¨¢s dinero d¨¦ por ella", dice la esposa de un minero

Un minero con mucha cualificaci¨®n y experiencia apenas podr¨ªa aspirar hace tres meses a un salario de 2.000 euros. Ahora, en apenas unas horas podr¨ªa cobrar infinitamente m¨¢s.

Un periodista brit¨¢nico y su compa?era brasile?a acudieron el viernes a la casa de Ariel Ticona, quien fue padre mientras estaba enterrado. En la casa, su esposa, Elisabeth Segovia, acunaba a la ni?a que pari¨® hace un mes y a la que bautiz¨® con el nombre de Esperanza, por expreso deseo de su marido. El objetivo de los dos periodistas era proponerle a Elisabeth que en cuanto viera a su marido, en la zona restringida para los periodistas, le hiciera una foto junto a la reci¨¦n nacida y se la pasara a ellos. Elisabeth no ten¨ªa ning¨²n inconveniente... siempre que ellos cumplieran con una regla b¨¢sica en cualquier subasta: "La foto se la llevar¨¢ el que m¨¢s dinero ofrezca por ella", les dijo.

Elisabeth se encontraba rodeada de una veintena de familiares. Hablaban de la fiesta que le estaban preparando el s¨¢bado a Ariel. Los periodistas le preguntaron que si pod¨ªan asistir. Le dijeron que s¨ª, pero tendr¨ªan que contribuir. "Pensamos que se refer¨ªan a alguna comida o bebida. Pero aclararon que hab¨ªa que hacerlo con dinero. Dec¨ªan que ten¨ªan que pensar en el futuro de la ni?a. Nos pidieron que solo entr¨¢ramos con c¨¢maras peque?as y que no molest¨¢ramos mucho a Ariel. Y nos advirtieron de que una revista alemana iba a contribuir con 300 d¨®lares (215 euros)", explic¨® el periodista brit¨¢nico. "Por supuesto, no aceptamos".

A medida que iban llegando los mineros hacia el hospital de Copiap¨®, el gran circo medi¨¢tico se desplazaba. Y algunos familiares iban mostrando un comportamiento muy distinto del de hace unas semanas, cuando a ninguno se les hab¨ªa ocurrido pensar que pod¨ªan cobrar por contar su drama. Elvira Valdivia, la esposa del minero Mario Sep¨²lveda, pas¨® ante los periodistas como algunos famosos asiduos de las revistas del coraz¨®n: con gafas negras y sin detenerse a contestar.

Hace varias semanas el minero Edison Pe?a ya envi¨® una carta a su novia desde la oscuridad en la que le advert¨ªa de que hasta que no estuvieran todos en la superficie no habr¨ªa que cantar victoria, que tal vez se estaba frivolizando la cat¨¢strofe. Buena parte del circo se ir¨¢ la pr¨®xima semana. Solo quedar¨¢ el dinero que dejaron algunos, el buen recuerdo que dejaron otros y la alegr¨ªa de haber rescatado a 33 personas.