Lo que piensa un ciudadano vasco
El ciudadano que suscribe ha estado el ¨²ltimo mes ocupado b¨¢sicamente en cuestiones personales que no viene al caso explicar, muy distantes de la actividad institucional que le suele llenar el tiempo, aunque siguiendo con inter¨¦s lo que los medios de comunicaci¨®n han venido relatando sobre la actualidad. Este ciudadano a tiempo completo, como el resto de los vascos, centraba sus esfuerzos en tareas cotidianas, mientras escuchaba de fondo los boletines de radio y los teleberris, y dedicaba unos minutos al d¨ªa a leer la prensa empezando por la contraportada.
Desde su ideolog¨ªa, s¨ª, pero tambi¨¦n desde una prudente distancia de la acci¨®n pol¨ªtica, este ciudadano estaba preocupado porque estaba en riesgo la aprobaci¨®n de los Presupuestos Generales del Estado en unos momentos de incertidumbre; y observaba con temor que esa inestabilidad propiciara un periodo preelectoral de todo punto inconveniente. Pero los temores del ciudadano a este respecto se disipan cuando conoce que se ha llegado a un acuerdo entre el partido al que pertenece y quienes, parad¨®jicamente, suelen recelar de dar estabilidad a ese pa¨ªs que ni se atreven a nombrar. Y ese acuerdo, adem¨¢s de garantizar estabilidad, proporcionar ese escenario deseado de certidumbre y dar continuidad al mandato del presidente Zapatero y su renovado gobierno, tiene como resultado a?adido que Euskadi pueda obtener un buen paquete de transferencias que, sin duda, nos dar¨¢n alguna herramienta m¨¢s para hacer frente a la crisis.
Defender que al PNV le va a ir mejor a partir de ahora no es una apuesta segura
"Bien", se dice el ciudadano, "estabilidad, acuerdos, pol¨ªtica sin broncas, desarrollo estatutario.... lo que esper¨¢bamos del cambio en Euskadi". Con ese pensamiento regresaba a su tarea ordinaria en la C¨¢mara vasca cuando al parlamentario socialista, que no al ciudadano, una periodista le dice que con el citado acuerdo "el PNV ha pasado por encima del PSE". A¨²n sin tiempo para haber cambiado el chip, el ciudadano en tr¨¢nsito a pol¨ªtico le mostr¨® su extra?eza gestualmente y, tras meditar unos segundos, le sali¨® una parrafada que, como se la cont¨® a la periodista, se la puede contar a los lectores de este medio. M¨¢s o menos esto es lo que le dijo:
"Las legislaturas son largas, y un d¨ªa de gloria lo tiene cualquiera, pero el a?o tiene 365 d¨ªas, y quedan un mont¨®n de d¨ªas hasta mayo de 2013. Eso s¨ª, antes hay unas elecciones forales, que son determinantes para tomar decisiones futuras en materia econ¨®mica y fiscal, y el PNV deber¨ªa conservar las tres Diputaciones para seguir actuando de la misma forma en la que est¨¢ actuando, lo que no ser¨¢ sencillo.
Y de cualquier modo, cuando empez¨® la legislatura los socialistas vascos ten¨ªamos tres objetivos prioritarios como nuevo gobierno: lucha contra la crisis, lucha contra ETA y tranquilizar la pol¨ªtica vasca. Por diferentes razones, los tres van francamente bien.
Sobre la crisis no me enrollo, porque el ¨ªndice de producci¨®n industrial, la mejora de la recaudaci¨®n, los datos de empleo o las previsiones de crecimiento hablan por m¨ª; sobre ETA a¨²n hablar¨¦ menos, porque parece obvio que los terroristas est¨¢n peor que nunca y hay m¨¢s unidad de diagn¨®stico y criterio que nunca entre los partidos pol¨ªticos; y respecto de la tranquilidad, basta con echar la vista atr¨¢s y ver c¨®mo est¨¢bamos hace s¨®lo 20 meses."
Tras mi respuesta (que creo que dej¨® perpleja a quien sin duda esperaba alguna expresi¨®n de mi "malestar", como si yo quisiera que le fuera mal a Zapatero o a mi partido), decid¨ª escribir un art¨ªculo contando esta experiencia y desarrollando un poco m¨¢s el tercer objetivo, especialmente haciendo hincapi¨¦ en la forma en la que estamos tratando de conseguirlo. Porque habr¨¢ quien piense que la tranquilidad y la falta de crispaci¨®n que vivimos hoy en Euskadi es un designio divino, una racha afortunada o, tambi¨¦n esta, una concesi¨®n del PNV, y nada m¨¢s lejos de la realidad. ?Y aqu¨ª me tienen!
Aunque no ha sido nada f¨¢cil romper la incomunicaci¨®n, acabar con la crispaci¨®n y destensar la presi¨®n, la tensi¨®n o la discusi¨®n identitaria en la pol¨ªtica vasca, hoy ya nadie cuestiona que esta descompresi¨®n se ha producido. Y pienso que esto se ha conseguido centrando el debate b¨¢sicamente sobre los problemas reales de la ciudadan¨ªa y sus retos de futuro (una bandera permanente del lehendakari), buscando el acuerdo para dar estabilidad institucional (en consonancia con el comportamiento del socialismo vasco en el ¨²ltimo lustro, que ha sido la facilitaci¨®n de aprobaci¨®n de presupuestos en las instituciones vascas) y tratando de poner en valor lo que nos une, el Estatuto y su desarrollo (una apuesta firme del lehendakari en el debate de investidura y en el ¨²ltimo debate de pol¨ªtica general).
Habr¨¢ quien piense que el PNV lo tiene todo de cara o que "ha pasado por encima del PSE". Lo respeto. Pero este ciudadano-parlamentario no lo ve as¨ª. Porque lo conseguido obedece a lo que el PSE y el lehendakari se marcaron como objetivos hace 16 meses. Porque el PSOE y su Gobierno obtienen mayor¨ªa parlamentaria para toda la legislatura en los proyectos importantes y Espa?a gana en estabilidad pol¨ªtica. Y porque la apuesta del PNV por el camino estatutario no es demasiado compatible con la v¨ªa soberanista, y sus dirigentes lo saben, por mucho que traten de maquillar su reconversi¨®n estatutaria con una nueva escalada reivindicativa.
Si a todo esto le a?adimos, como le dec¨ªa a la periodista en el Parlamento, que el PNV tiene que repetir en las tres Diputaciones para que su resultado no sea considerado como un fracaso y que, posteriormente, tiene que elegir un candidato a lehendakari con una ¨²nica l¨ªnea pol¨ªtica debajo del brazo, defender que a partir de ahora al PNV las cosas le van a ir mejor no es una apuesta segura.
De cualquier modo, reconozco que como ciudadano-parlamentario he asistido con cierta perplejidad al desenlace de un proceso en el que lo fundamental, para algunos, era saber qui¨¦n humillaba a quien, y no qu¨¦ oportunidades abr¨ªa este importante acuerdo al conjunto de la sociedad vasca.
?scar Rodr¨ªguez Vaz es parlamentario vasco y Secretario General del Grupo Parlamentario Socialistas Vascos-Euskal Sozialistak.
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